El creador de las zapatillas Veja: ?Todo el mundo nos dec¨ªa que fu¨¦ramos a Londres, pero amamos Madrid por muchos motivos?
Hablamos con S¨¦bastien Kopp, cofundador de la firma de deportivas, que acaba de inaugurar su primera tienda en Espa?a, la sexta en el mundo. Celebra sus primeros 20 a?os yendo a contracorriente en la industria de la moda.
Hace un par de d¨¦cadas S¨¦bastien Kopp y Fran?ois-Ghislain Morillion eran dos amigos veintea?eros que acababan de terminar sus estudios y trabajaban en banca. ¡°El ¨²nico objetivo de trabajar en finanzas era el dinero, a veces la gente tiene que ganarse la vida. Pero cuando tu objetivo es el dinero generalmente tampoco tienes otra aspiraci¨®n¡±, cuenta Kopp por tel¨¦fono desde las oficinas en Par¨ªs de Veja (l¨¦ase ¡°Veya¡±). Aspiraciones ten¨ªan muchas, quer¨ªan hacer del mundo un lugar mejor. Casi nada. Pero en vez de desechar el clich¨¦ ut¨®pico, reunieron 10.000 euros y en 2004 fundaron una marca de zapatillas, ¡°sin ser gente de moda¡±.
La firma, que se ha hecho globalmente reconocida, coloc¨® a las personas y al planeta en el centro. ¡°Hab¨ªamos podido estudiar durante seis o siete a?os en buenos centros, habl¨¢bamos varios idiomas, viv¨ªamos en Par¨ªs que es una de las capitales del mundo, ten¨ªamos el respaldo de nuestros padres por si algo sal¨ªa mal¡ La pregunta que surgi¨® era que, si no lo hac¨ªamos nosotros, que ¨¦ramos unos privilegiados, ?qui¨¦n iba a hacerlo?¡±. Pese a que no pagan a celebridades por calzarlas, sus deportivas est¨¢n entre las favoritas de nombres tan dispares como Reese Witherspoon, Katie Holmes, Emily Ratajkowski, Meghan Markle o la princesa de Gales, Kate Middleton. Lucirlas se ha convertido en una manera de posicionarse a favor de unas condiciones laborales justas y por una moda de menor impacto.
Si no lo hac¨ªamos nosotros, que ¨¦ramos unos privilegiados, ?qui¨¦n iba a hacerlo?
La ense?a acaba de desembarcar en Madrid con su sexta tienda propia (calle Barquillo, 44), tras abrir en Par¨ªs, Nueva York, Burdeos y Berl¨ªn.
Se dec¨ªa, al menos hasta la pospandemia, que el comercio f¨ªsico estaba en crisis. ?Por qu¨¦ hab¨¦is decidido abrir este nuevo local?
Entre la tienda de una gran cadena e internet no hay mucha diferencia, es aburrido. Pero la gente se est¨¢ dando cuenta que en la tienda de una firma puedes hacer muchas cosas m¨¢s all¨¢ de vender: puedes organizar eventos, colaboraciones, lanzamientos de libros, fiestas, actividades con ni?os¡ Esto siempre ha sido parte de la estrategia en los locales que abrimos nosotros, que no son muchos. Nos ubicamos en los sitios que nos gustan, escogidos con mucho cuidado y tratados con mimo. As¨ª lo hacemos en nuestras direcciones en Par¨ªs, Nueva York, Burdeos y Berl¨ªn. Y desde ahora tambi¨¦n en Madrid.
?Y por qu¨¦ hab¨¦is elegido precisamente Madrid como quinta ciudad en la que estableceros?
Porque eliges los sitios a los que quieres ir. Todo el mundo nos dec¨ªa que fu¨¦ramos a Londres o a China, pero vamos a las ciudades que nos gustan. Amamos Espa?a por muchas razones. Amamos el ambiente de Madrid, en Barcelona estuvimos en el Bread & Butter entre 2008 y 2013. En Veja no tenemos inversores ni accionistas, as¨ª que somos bastante libres para hacer lo que queremos, que es algo que se aplica a todo el funcionamiento de la compa?¨ªa.
En estos ¨²ltimos 20 a?os hab¨¦is estado presentes en muchas tiendas multimarca en todo el mundo, ?c¨®mo ha cambiado la respuesta de este canal a un producto tan enfocado a la sostenibilidad?
Al principio nos limitaba mucho la escasa oferta de algod¨®n org¨¢nico, porque todos nuestros modelos estaban hechos en lona, con la ¡®V¡¯. La cantidad que pod¨ªamos producir era limitada, pero mucha gente quer¨ªa las zapatillas, as¨ª que pudimos elegir y entramos en las mejores tiendas del mundo. En Madrid por ejemplo fue Ekseption, con los que mantenemos una relaci¨®n a largo plazo casi desde el principio, desde 2007. Entonces ¨¦ramos solo 10 personas, as¨ª que si lo piensas era una locura que una firma tan peque?a trabajara con este tipo de tiendas, pero todos tuvieron fe en nosotros.
?Y cu¨¢ntos sois ahora?
Somos 300 entre las oficinas de Par¨ªs y Brasil. Adem¨¢s, tenemos un centro en el Amazonas, con gente dedicada en exclusiva al caucho y otra oficina que trabaja solo con el algod¨®n org¨¢nico (en abastecimiento, las relaciones con los productores, los campos¡).
?C¨®mo fueron los inicios?
Empezamos sin saber nada, solo lo que hab¨ªamos le¨ªdo. Lo primero fue viajar a los campos de algod¨®n en Brasil. Pasamos mucho tiempo con los agricultores, entendiendo c¨®mo funcionaba todo. Analizamos con ellos a cu¨¢nto ten¨ªan que vender el algod¨®n, porque lo vend¨ªan demasiado barato y no pod¨ªan mantenerse. Quisimos establecer las bases de un comercio justo con ellos y, por ejemplo, pagar el 40% del precio por adelantado para que puedan vivir bien. En el primer contrato que firmamos les compramos el algod¨®n a un 55% m¨¢s del precio de mercado, porque para nosotros ese algod¨®n, sin qu¨ªmicos y respetando la tierra, era un bien muy preciado. Es la diferencia de Veja, que estamos en el terreno, solo nosotros sin intermediarios entre el productor de la materia prima y el consumidor final. Llevamos 20 a?os haciendo esto y viajando a los campos, es nuestra diferencia y algo que la gente no entiende porque el resto de las marcas no sabe qu¨¦ pasa en los cultivos.
Pese a pagar m¨¢s a productores y trabajadores, el precio de vuestras zapatillas est¨¢ en l¨ªnea con el resto del mercado. ?Es una cuesti¨®n de m¨¢rgenes?
No, es una idea que tuvimos al principio, cuando ten¨ªamos 23 a?os: en los inicios de Veja dijimos que no har¨ªamos publicidad. ?Por qu¨¦? Porque en marcas como Adidas se lleva un porcentaje muy importante del coste de la zapatilla. El precio de producir un zapato en China oscila entre 12 d¨®lares o 3 d¨®lares, a lo que sumas todo el coste de la comunicaci¨®n (que puede ser campa?as, pago a famosos, etc.). La comunicaci¨®n para estas marcas puede suponer un 75% del coste total, gastan miles de millones. Si nos ahorramos este dinero de la comunicaci¨®n, podemos ponerlo en la cadena de suministro y no pagar a una celebity, sino al productor del algod¨®n org¨¢nico. Al final tenemos el mismo coste: la fabricaci¨®n de nuestro producto puede ser cuatro o cinco veces m¨¢s cara, pero no tenemos ese gasto extra y el precio final es similar. Ese es el giro de Veja.
?C¨®mo hab¨¦is ido variando el proceso productivo para tener menos impacto a lo largo de todos estos a?os?
Con el conocimiento que hemos ido adquiriendo. Por ejemplo, en 2009 empezamos a introducir cuero en algunos modelos. Pero coger la piel de la vaca y transformarla en cuero es un proceso muy contaminante en el que se usan metales pesados, as¨ª que dijimos ¡®vale, queremos hacerlo, pero sin utilizar cromo en el curtido, vegetalmente, con acacia¡¯. Nadie lo entend¨ªa, pero nos daba igual. Luego quisimos saber de donde ven¨ªa esa piel, su trazabilidad. Si ven¨ªa de vacas del campo o vacas de la industria ganadera. Saber qu¨¦ com¨ªan, si transg¨¦nicos o comida org¨¢nica. El giro de Veja no es solo la sostenibilidad o el comercio justo, es la trazabilidad. Porque cuando sabes y cuando tienes datos puedes cambiar, puedes mejorar. Si no sabes de d¨®nde vienen las cosas, ?c¨®mo vas a cambiarlas? Toda nuestra innovaci¨®n est¨¢ basada en la trazabilidad
?Y cu¨¢l es hoy en d¨ªa el proceso m¨¢s contaminante en la fabricaci¨®n de uno de vuestros pares de zapatillas?
Hicimos un gran estudio de emisiones de CO2 en 2017 en el que analizamos cu¨¢nto supon¨ªa trasladar la goma desde el Amazonas, el impacto del uso por los clientes, absolutamente todo. Y el proceso m¨¢s contaminante es el curtido de la piel. As¨ª que decidimos reducir su uso e intentar variar el proceso para reducir el impacto. Ahora estamos teniendo muy buenos resultados gracias al equipo de materias primas, que es fant¨¢stico.
Aunque es una demanda por parte de muchos consumidores, a¨²n hoy hay muy pocas firmas que tengan este nivel de trazabilidad. ?Por qu¨¦ crees que sigue habiendo tan poca transparencia?
La opacidad es m¨¢s barata. Ser transparente es muy caro, sale m¨¢s barato cerrar los ojos y no querer ver las cosas. Cuando no sabes de d¨®nde vienen, cuando no miras el origen es todo m¨¢s barato. En cambio, cuando viajas a Brasil y ves en los campos de algod¨®n a la gente, a sus familias, regresas y quieres luchar por ellos, quieres luchar con ellos.
S¨ª, porque muchas veces se olvida que la sostenibilidad debe tener tambi¨¦n en cuenta a la gente, no solo al planeta. Es la palabra de moda, sostenibilidad, pero como tal corre el riesgo de pasar de moda. ?Es posible que la industria de pasos hacia atr¨¢s?
S¨ª, por supuesto, siempre es posible dar pasos atr¨¢s. Las democracias pueden retroceder, todo puede retroceder. Pero impedirlo es nuestro trabajo. Tuvimos esta idea en 2004, lanzamos Veja en 2005 y todo el mundo nos dec¨ªa que esto a la gente no le importaba: una iniciativa en torno al algod¨®n org¨¢nico, en torno al caucho, a las condiciones sociales de los trabajadores, de las f¨¢bricas¡ y mira lo que es Veja hoy. No conozco las mentes de las personas, no s¨¦ si estos son temas que les preocupan, pero es nuestro trabajo poner el foco sobre estas cuestiones.
La semana pasada la ONU publicaba un informe en el que ped¨ªa a la industria de la moda que dejara de fomentar el consumismo. ?Cu¨¢ntos pares de zapatillas se pueden tener?
Controlamos esto, controlamos el crecimiento de Veja. Decimos que no a muchas cosas, por cada cosa que aceptamos rechazamos 100, no queremos crecer demasiado r¨¢pido. Aplicamos a Veja nuestros valores, as¨ª que no hacemos muchos descuentos, los dise?os pr¨¢cticamente no cambian de una temporada a otra, creemos que el buen dise?o dura 5 a?os, 10 a?os, 20 a?os. Nuestra misi¨®n es ofrecer un buen dise?o, as¨ª que solo creamos uno o dos nuevos modelos cada a?o, vamos a un ritmo pausado. Ahora mismo podr¨ªamos haber abierto 100 tiendas en todo el mundo, pero no queremos, preferimos tener 10. Y est¨¢ genial.
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