El descubrimiento de la estructura del ADN cumple 50 a?os

La suma de las dos mentes geniales que resolvieron el enigma se produjo en Cambridge (Reino Unido) en 1951. En oto?o de aquel a?o, el joven bi¨®logo norteamericano Jim Watson lleg¨® a la universidad de Cambridge, donde f¨ªsicos y qu¨ªmicos investigaban las estructuras de las prote¨ªnas. El reci¨¦n llegado intu¨ªa que la importancia de una desconocida mol¨¦cula, el ¨¢cido desoxirribonucleico o ADN, era superior a la de las prote¨ªnas y que podr¨ªa tratarse, incluso, de la m¨ªtica y ansiada mol¨¦cula de la vida, responsable de la transmisi¨®n de los caracteres hereditarios de los seres vivos.

Esta idea hab¨ªa nacido en la primavera de ese mismo a?o, cuando, en un congreso celebrado en N¨¢poles, Watson coincidi¨® con un f¨ªsico ingl¨¦s, Maurice Wilkins, que mostr¨® a los participantes una fotograf¨ªa del ADN obtenida mediante la t¨¦cnica de difracci¨®n de rayos X. En ella se observaba que la mol¨¦cula parec¨ªa poseer una estructura de forma regular.

El prop¨®sito de Watson de desvelar las caracter¨ªsticas del ADN se vio respaldado por un pol¨¦mico investigador del Cavendish, Francis Crick. Ambos dedicaron sus esfuerzos a interpretar las fotograf¨ªas que Rosalind Franklin y Maurice Wilkins obten¨ªan mediante la difracci¨®n de rayos X. La empresa se convirti¨® en una carrera contrarreloj porque Wilkins tambi¨¦n trataba de desentra?ar el ADN al otro lado del Atl¨¢ntico.

Tras realizar infinidad de modelos tridimensionales que no llegaban a conseguir ning¨²n resultado convincente, ocurrieron dos sucesos capitales para la soluci¨®n definitiva del problema. Por un lado, Watson y Crick encontraron los trabajos desarrollados durante la d¨¦cada de los cuarenta por el bioqu¨ªmico austriaco Chargaff, en los que se pon¨ªa de manifiesto que la composici¨®n del ADN estaba en relaci¨®n directa con la especie viva de la que proced¨ªa y que reforzaban la idea de que este ¨¢cido deb¨ªa ser el portador de los caracteres hereditarios.

Por otro, James Watson fue instado a dejar de investigar sobre el ADN y a dedicarse al estudio del virus del mosaico del tabaco. Sin llegar a saltarse la prohibici¨®n, Watson dirigi¨® su inter¨¦s hacia el material gen¨¦tico de este virus, el ¨¢cido ribonucleico o ARN. Lo que descubri¨® result¨® fundamental para el desentra?amiento posterior del ADN: la estructura cristalogr¨¢fica de aqu¨¦l era una h¨¦lice, lo que le hizo preguntarse si ¨¦sta pod¨ªa ser la configuraci¨®n del ADN.

Manejando esta hip¨®tesis, que parec¨ªa encajar con los datos que ya ten¨ªan, se lleg¨® a la conclusi¨®n de que la mol¨¦cula de ADN estaba constituida por dos cadenas lineales enrolladas helicoidalmente entre s¨ª. El modelo tridimensional presentado sobre el ADN no s¨®lo explicaba sus propiedades f¨ªsicas y qu¨ªmicas, sino que dejaba entrever el mecanismo por el que la informaci¨®n gen¨¦tica pod¨ªa replicarse con exactitud y perpetuar la transmisi¨®n de los caracteres hereditarios generaci¨®n tras generaci¨®n: la existencia de dos hebras complementarias, en funci¨®n de sus bases nitrogenadas, era la clave. Francis Crick, James Watson y Maurice Wilkins recibieron el Premio Nobel de Fisiolog¨ªa por sus descubrimientos 11 a?os m¨¢s tarde.