Las solicitudes de ¨®rdenes de protecci¨®n subieron un 55,2% en el primer trimestre de 2004

En los ocho primeros meses de aplicaci¨®n de la orden de protecci¨®n por violencia dom¨¦stica, que entr¨® en vigor en agosto de 2003, se han solicitado en Espa?a 15.107 ¨®rdenes, de las que se han concedido 11.642, seg¨²n datos facilitados hoy por el Observatorio de Violencia Dom¨¦stica y de G¨¦nero del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). No obstante, a los tres meses de ser acordada la orden de protecci¨®n el juez correspondiente debe ratificar o revocar las medidas dictadas de forma cautelar, por lo que no todas est¨¢n en vigor en la actualidad.

Un total de 7.577 personas solicitaron 7.238 ¨®rdenes de protecci¨®n durante el primer trimestre de 2004, lo que supone un incremento del 55,2% en la media mensual de solicitudes respecto a los primeros cinco meses de aplicaci¨®n de este nuevo instrumento procesa (de agosto a diciembre de 2003). La disparidad entre el n¨²mero de v¨ªctimas solicitantes y el n¨²mero de ¨®rdenes solicitadas se debe a que dentro de una petici¨®n de orden de protecci¨®n pueden estar contenidas dos o m¨¢s v¨ªctimas. As¨ª, entre enero y marzo de 2004, la media mensual de peticiones fue de 2.442, mientras que en el periodo anterior (entre agosto y diciembre de 2003) se solicitaron un total de 7.869 ¨®rdenes, lo que significa 1.574 peticiones al mes.

De estas peticiones, en 2004 los jueces acordaron un total de 5.638 ¨®rdenes de protecci¨®n, lo que significa, que han dictado un 77% del total de peticiones. Respecto a los solicitantes durante el primer trimestre de 2004, un 92% de las v¨ªctimas eran mujeres, frente a un 8% de los hombres. A su vez, un 78,5% de los peticionarios ten¨ªan nacionalidad espa?ola frente a un 19,5% de extranjeros. Adem¨¢s, el CGPJ cifra en 22.106 las denuncias por malos tratos realizadas en Espa?a durante el primer trimestre de este a?o. La media mensual de denuncias por malos tratos entre enero y marzo de 2004 fue de 7.369, es decir 975 denuncias m¨¢s que la media mensual durante 2003 -6.394-, a?o en el que se presentaron 76.732 denuncias, lo que supone un aumento de un 15,2%.

Una mayor confianza de las v¨ªctimas

Los jueces pueden acordar, dentro de la orden de protecci¨®n, medidas penales y civiles. Las medidas penales derivadas de las ¨®rdenes de protecci¨®n y de otras medidas cautelares que se pueden dictar al margen de la orden de protecci¨®n, por otra parte, superaron a las civiles. As¨ª, se acordaron 11.171 medidas penales, siendo la orden de

alejamiento la m¨¢s numerosa (6.124), seguida de la prohibici¨®n de comunicaci¨®n (3.186), la prohibici¨®n de volver al lugar (1.358), la privativa de libertad (341) y otras (166). De naturaleza civil, los jueces dictaron un total de 3.442 medidas, siendo las m¨¢s numerosas las que se refer¨ªan a custodia, visitas y comunicaci¨®n con los hijos (1.182), y atribuci¨®n de la vivienda (1.177). Le sigue la referida a prestaci¨®n por alimentos (937) y protecci¨®n del menor para evitar un peligro o perjuicio (74).

Por comunidades aut¨®nomas, Catalu?a, Andaluc¨ªa y Madrid son las tres que m¨¢s solicitudes de ¨®rdenes de protecci¨®n recibieron, en parte tambi¨¦n porque son las m¨¢s pobladas de Espa?a. En Catalu?a, se pidieron un total de 1.414, de las que se concedieron 1.134; en Andaluc¨ªa, 1.306, de las que 1.069 fueron concedidas; y en Madrid 1.022, de las cuales 650 recibieron luz verde. La comunidad aut¨®noma donde se presentaron menos solicitudes de ¨®rdenes de protecci¨®n fue Cantabria, con 64, de las que se concedieron 42.

La secretaria general de Pol¨ªticas de Igualdad, Soledad Murillo, ha valorado positivamente el incremento en un 55% de las solicitudes de orden de protecci¨®n durante el primer trimestre de 2004, porque refleja un aumento en la confianza de las v¨ªctimas hacia los sistemas de protecci¨®n. En este sentido, tambi¨¦n ha hecho referencia a que un 12% de las 22.106 denuncias por malos tratos presentadas en este periodo fueron finalmente retiradas, lo que pone de manifiesto que hay cautelas y filtros ante la utilizaci¨®n de esta violencia para hacer falsas acusaciones, en referencia a aquellos que aseguran que hay un importante n¨²mero de denuncias falsas en estos casos.