El ?bola ha matado a 5.500 gorilas en ?frica, seg¨²n un estudio

La variedad del Zaire del virus ?bola, el ZEBOV, ha matado desde 2001 a unos 5.500 gorilas de llanura africanos, el 25% del total, y es la responsable de la desaparici¨®n del 95% de los que hab¨ªa en el santuario de fauna de Lossi, en la Rep¨²blica del Congo, cantidad suficiente para que se produzca su extinci¨®n si los cazadores tambi¨¦n contin¨²an mat¨¢ndolos, seg¨²n un estudio realizado por investigadores espa?oles.

La revista Science publica ma?ana un resumen de la investigaci¨®n que Magdalena Bermejo, de la Universidad de Barcelona, realiza desde 1995, y que ella empez¨® como un proyecto de desarrollo del ecoturismo como alternativa a la caza comercial de gorilas en ?frica, ha explicado el coautor del trabajo, Jos¨¦ Domingo Rodr¨ªguez Teijeiro.

Bermejo hab¨ªa "catalogado" y estudiado a los grupos de gorilas que hab¨ªa en el santuario de Lossi -que ocupa una superficie de 320 kil¨®metros cuadrados entre Gab¨®n y Congo-, cuando, entre octubre de 2002 y enero de 2003, hubo un brote de Zebov que acab¨® con la vida de 220 de los 238 ejemplares de Gorilla gorilla.

Entonces, ella y su equipo recibieron una subvenci¨®n para ampliar el objeto de su estudio e investigar la incidencia del ?bola, un virus que provoca en 20 d¨ªas la muerte a uno de cada 8 infectados y que se detect¨® en humanos en 1976 a orillas del r¨ªo que le ha dado nombre. Entre 1976 y 2003 no se hab¨ªa asociado con los animales y no se sab¨ªa cu¨¢l era su reservorio, es decir, qu¨¦ organismo hospeda, sin que le afecte, al virus.

Hace tres a?os se supo que el ser humano enferma a trav¨¦s de la manipulaci¨®n, e incluso ingesta, de animales que encuentra muertos en la selva, y hace algo m¨¢s de un a?o se descubri¨® que el virus lo difunde un tipo de murci¨¦lago, que es el reservorio. Los gorilas se contagian chupando las mismas hojas o frutos que los murci¨¦lagos y a su vez infectan a los miembros de sus familias y de los grupos vecinos, seg¨²n ha constatado el equipo de Bermejo.

Los investigadores espa?oles tuvieron que vivir una segunda extinci¨®n de los ejemplares que estudiaban porque el virus salt¨® el r¨ªo Ambambara y entre octubre de 2003 y enero de 2004 acab¨® con 91 de los 95 gorilas del nuevo grupo con el que trabajaban.

Han recorrido desde 2002 m¨¢s de 5.000 kil¨®metros cuadrados en esa zona, y, por los datos que tienen, al menos han muerto por el ?bola 5.500 gorilas de llanura, aproximadamente el 25% de todos los que hay. Se trata de una mortandad "elevad¨ªsima" porque es una especie que tiene pocas cr¨ªas -una por parto- y alcanza su madurez sexual muy tarde.

La importancia de su trabajo radica en que adem¨¢s de establecer la cifra de muertos, han descubierto que es muy importante la transmisi¨®n entre familias, ya que hasta ahora solo se especulaba con la infecci¨®n a partir del reservorio. "Tenemos la evidencia de que una vez que el reservorio act¨²a, dejando, por ejemplo, saliva en una fruta que luego se come un gorila, hay transmisi¨®n familiar y tardan s¨®lo 11,2 d¨ªas en contagiarse unos a otros", ha explicado Rodr¨ªguez.