La calculadora humana
Alberto Coto, campe¨®n del mundo de c¨¢lculo mental, es capaz de sumar 100 d¨ªgitos en menos de 20 segundos... y no se considera un tipo raro
"A veces es una barrera social. Esperan que el campe¨®n del mundo en c¨¢lculo mental sea un tipo raro". El autor de la frase lo es, aunque ¨¦l no lo crea. Nadie multiplica dos n¨²meros de ocho d¨ªgitos en 56,5 segundos como Alberto Coto. Nadie tampoco es capaz de sumar 100 d¨ªgitos en 19,23 segundos. Son dos r¨¦cord Guinness que llevan su nombre. En el ¨²ltimo mundial de c¨¢lculo celebrado en Leipzig (Alemania) qued¨® campe¨®n en suma, en multiplicaci¨®n y en c¨®mputo global. Coto es, en verdad, un tipo raro, escaso en su especie.
Sobre todo porque, con su desmesurado talento para las cuentas, este asturiano de Sama de Langreo, de 38 a?os y soltero, no se ha encasillado en los n¨²meros. De hecho, dedica horas a deportes en los que no es el mejor ni de lejos y en los que, por supuesto, no hace falta ser un velocista. Al rev¨¦s de lo que pasa con su mente, para ejercitar el cuerpo prefiere pruebas de fondo: ciclismo y marat¨®n. Pero lo cierto es que no se permite olvidar del todo los n¨²meros. Mientras corre, controla autom¨¢ticamente la velocidad. ?Es atleta y cron¨®metro al mismo tiempo? "S¨ª", responde, y sonr¨ªe.
Admite que podr¨ªa ganar millones en un casino pero a?ade que "requerir¨ªa mucho entrenamiento" y que hay "mucha vigilancia"
"Pensaba que era algo com¨²n"
Coto naci¨® el 20 de mayo de 1970. "Un mi¨¦rcoles", a?ade. Saberlo le resulta f¨¢cil. Es capaz de decir instant¨¢neamente a qu¨¦ d¨ªa de la semana corresponde cualquier fecha antes de que cualquiera lo mire en un calendario. No es su truco m¨¢s complicado -"hay gente mejor en ello", asegura-, pero es el que m¨¢s popularidad le reporta en las conferencias que imparte sobre c¨®mo mejorar en las habilidades num¨¦ricas y en la capacidad de concentraci¨®n.
En un caf¨¦ cercano a la Gran V¨ªa madrile?a, Coto cuenta que descubri¨® su habilidad en familia, calculando los puntos obtenidos al final de una partida de cartas. "Es un talento natural. Hasta hace pocos a?os pensaba que era algo com¨²n". En 1998 fue la primera vez que Coto ense?¨® su capacidad al p¨²blico, en el programa de televisi¨®n ?Qu¨¦ apostamos? (TVE). Al a?o siguiente consigui¨® su primer r¨¦cord Guinness y viaj¨® por todo el mundo demostrando su habilidad. "De estudiante no sol¨ªa corregir al profesor ni exhibir este don entre mis compa?eros para no parecer diferente".
Al calcular tan r¨¢pido, ?no podr¨ªa ganar millones en un casino? "Podr¨ªa hacerlo, pero demandar¨ªa mucho tiempo de entrenamiento y adem¨¢s hay mucha vigilancia". El asturiano no ha sacado mucha ventaja econ¨®mica de su talento, aparte de no ser enga?ado en el supermercado (al llegar a la caja ya sabe lo que le tocar¨¢ pagar, incluso los c¨¦ntimos). Aunque empez¨® Econ¨®micas, se pas¨® a Empresariales y se licenci¨® en Ciencias del Trabajo. Es contable en una empresa de su pueblo (12.000 habitantes) y redacta libros sobre c¨¢lculo y concentraci¨®n (hay consejos en la p¨¢gina www.albertocoto.com).
Tambi¨¦n se dedica a dar charlas sobre sus t¨¢cticas, las que utiliza para presentarse en la televisi¨®n o ganar campeonatos. "No me pongo nervioso, trato de transformar mi ansiedad en energ¨ªa. Entro muy acelerado para competir", admite el hombre que suele calentarse escuchando heavy metal (le gustan sobre todo Dream On, de Aerosmith, y Stairway to Heaven, de Led Zeppelin). ?No es raro tener otras aficiones en este ambiente? "S¨ª, es dif¨ªcil no hablar de n¨²meros en los campeonatos. Y es verdad que hay gente rara y que muchos emiten sonidos curiosos mientras calculan. Yo procuro concentrarme".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.