Un director de orquesta brit¨¢nico acude a una cl¨ªnica suiza para suicidarse

Un destacado director de orquesta brit¨¢nico, que trabaj¨® para la Orquesta Filarm¨®nica de la BBC, muri¨® el pasado d¨ªa 10 junto a su esposa en una cl¨ªnica suiza especializada en el suicidio asistido, seg¨²n inform¨® ayer su familia. Se trata del director de orquesta Edward Downes, de 85 a?os y enfermo de c¨¢ncer, y de su esposa Joan, de 74, que viajaron juntos a Suiza para suicidarse en la cl¨ªnica Dignitas, indic¨® su familia en un comunicado divulgado ayer a trav¨¦s de la cadena brit¨¢nica BBC.

Downes, que estaba pr¨¢cticamente ciego, tuvo una larga y distinguida carrera como director, pues trabaj¨® para la citada filarm¨®nica durante 40 a?os, primero como director invitado, despu¨¦s como principal y finalmente em¨¦rito. En el a?o 1991, Downes recibi¨® de la reina Isabel II del Reino Unido el t¨ªtulo de caballero.

El comunicado divulgado por sus hijos Caractacus y Boudicca se?ala que la pareja muri¨® el 10 de julio "en circunstancias que ellos mismos eligieron". "Despu¨¦s de 54 felices a?os juntos, decidieron poner fin a la vida en vez de seguir luchando con serios problemas de salud. Murieron en paz y en circunstancias que ellos eligieron, con la ayuda de la organizaci¨®n suiza Dignitas en Zurich", agreg¨® la nota.

El caso ha avivado el debate sobre la eutanasia en Reino Unido. Acompa?ado de sus dos hijos, el matrimonio viaj¨® la pasada semana a la pol¨¦mica cl¨ªnica Dignitas para quitarse all¨ª la vida despu¨¦s de que Joan, una ex bailarina de 74 a?os, recibiera la noticia de que sufr¨ªa un c¨¢ncer terminal. Edward se encontraba fr¨¢gil de salud, o¨ªa mal y ten¨ªa mala vista, y decidi¨® que no quer¨ªa seguir viviendo sin su esposa despu¨¦s de 54 a?os de vida en com¨²n.

Downes, un especialista en Verdi, Wagner y el repertorio ruso, que trabaj¨® muchos a?os al frente de la orquesta de la Royal Opera House, hab¨ªa dado sus ¨²ltimos conciertos hace tres a?os con la Sinf¨®nica de Birmingham y la Filarm¨®nica de la BBC.

Seg¨²n Mike George, productor de esta ¨²ltima orquesta, "Joan viajaba a todas partes con ¨¦l, es como si fuera sus ojos. En los ¨²ltimos tiempos, le acompa?aba desde el camerino hasta el borde del escenario y ¨¦l segu¨ªa entonces por el pasillo abierto entre los primeros y segundos violines".

No es la primera pareja brit¨¢nica en acudir a la cl¨ªnica suiza, y as¨ª el pasado febrero tambi¨¦n recurrieron a sus servicios el matrimonio compuesto por Peter y Penelope Duff, de 80 y 70 a?os respectivamente, ambos enfermos de c¨¢ncer terminal. En ambas ocasiones fueron los hijos de los matrimonios quienes comunicaron lo sucedido a la prensa brit¨¢nica.

En este y otros casos, la polic¨ªa brit¨¢nica debe investigar si hubo delito y si los suicidas fueron acompa?ados de terceros, para informar a la Fiscal¨ªa de la Corona. Ayudar a una persona a suicidarse es un delito que puede ser castigado con un m¨¢ximo de catorce a?os de c¨¢rcel, aunque hasta ahora la Fiscal¨ªa no ha procesado a ning¨²n acompa?ante.

M¨¢s de 115 brit¨¢nicos se han quitado la vida en Dignitas, algunos de ellos en condiciones que los m¨¦dicos no consideran terminales. Entre ¨¦stos figura Daniel James, de 23 a?os, que qued¨® paral¨ªtico a consecuencia de un accidente sufrido en un partido de de rugby. Tras conocerse el suicidio de los Downes, los grupos a favor de la vida reiteraron sus llamamientos en contra de la eutanasia.

Seg¨²n Andrew Ferguson, de la organizaci¨®n "Care Not Killing" (Cuidar en vez de Matar), el caso de Edward Downes es conmovedor porque es sobre todo una historia de amor, de un hombre que no pod¨ªa continuar su vida sin su compa?era de tantos a?os.

Pero Ferguson dijo a Efe que mantener la actual legislaci¨®n tal como est¨¢ es importante porque se trata de proteger a la gente m¨¢s vulnerable de la sociedad, como los ancianos que sienten que son una carga emocional y financiera para la familia que les cuida. Agreg¨® que el pasado d¨ªa 7, la C¨¢mara de los Lores (alta) rechaz¨® -con una mayor¨ªa de 53 votos- cualquier modificaci¨®n a la ley brit¨¢nica referida a la ayuda a una persona que quiere suicidarse. Ferguson reconoci¨® que el debate religioso sobre el suicidio no acabar¨¢ nunca.

De la misma opini¨®n es el grupo Pro Vida, que se?al¨® en una nota enviada a Efe que el Reino Unido resiste todos los intentos de legalizar el suicidio asistido. "Tenemos que hacer todo lo posible para asegurar que nadie muere con dolor f¨ªsico o mental, pero no se puede aceptar la eutanasia o el suicidio asistido como la respuesta a una sociedad realmente justa", resalt¨® el comunicado.

A favor del suicidio asistido

Del otro lado del debate est¨¢n los grupos que apoyan la eutanasia. James Harris, del Dignity in Dying (Dignidad en la Muerte), dijo a Efe que el caso del director de orquesta pone de manifiesto la necesidad de que Reino Unido revise su legislaci¨®n cuando se da el caso de una persona que acompa?a a un familiar a una cl¨ªnica suiza para poner fin a su vida.

Harris resalt¨® que, en virtud de la actual ley brit¨¢nica, estas personas pueden ser condenadas a 14 a?os de c¨¢rcel por acompa?ar a otra al extranjero para suicidarse. Al ser preguntado sobre cu¨¢n lejos est¨¢ Reino Unido de modificar la legislaci¨®n, Harris afirm¨® que es "inevitable" y s¨®lo "cuesti¨®n de tiempo". Y record¨® que en los ¨²ltimos sondeos el 78 por ciento de los encuestados consider¨® que no se debe condenar a un individuo por ayudar a otro a viajar a Suiza para suicidarse.