Destino a Marte y a Europa, pero solo si hay dinero

Una gran misi¨®n a Marte para determinar si en ese planeta hubo alguna forma de vida, as¨ª como estudiar la historia geol¨®gica y clim¨¢tica all¨ª, deber¨ªa tener prioridad en los planes de la NASA, seguida por la exploraci¨®n de Europa, la luna de J¨²piter. Son las conclusiones de un informe del Consejo Nacional de Investigaci¨®n (NRC) sobre los planes espaciales para 2013-2022, pero los expertos advierten que si el presupuesto de la agencia espacial no puede hacer frente a estos planes ambiciosos, es preferible centrar sus programas de exploraci¨®n planetaria en misiones de menor escala y retrasar las mayores, todas ellas o algunas.

Las grandes misiones de exploraci¨®n que la NASA viene realizando desde hace d¨¦cadas son muy costosas y exigen muchos a?os de desarrollo, construcci¨®n y explotaci¨®n, a menudo restando fondos para otros proyectos menos ambiciosos pero no menos rentables cient¨ªficamente. El nuevo informe se denomina Visiones y viajes para las ciencias planetarias en la d¨¦cada de 2013-2022 y ha sido elaborado por un comit¨¦ de expertos presidido por Steven Squyres, cient¨ªfico de la Universidad de Cornell y l¨ªder de la misi¨®n de los dos robots Spirit y Opportunity en Marte,

Mars Astrobiology Explorer Cacher (MAX-C) ser¨ªa una misi¨®n a gran escala para buscar rastros de vida y, adem¨¢s, supondr¨ªa un primera paso de exploraci¨®n del planeta rojo a una escala mayor que la actual, en colaboraci¨®n internacional, lo que deber¨ªa culminar en un viaje con una nave autom¨¢tica que trajera muestra marcianas a la Tierra. Tal y c¨®mo est¨¢ planteada ahora, la misi¨®n costar¨ªa unos 3.500 millones de d¨®lares (unos 2.500 millones de euros) y se realizar¨ªa conjuntamente por la NASA y la ESA (Agencia Europea del Espacio). Los expertos del NRC se?alan que s¨®lo se deber¨ªa dar luz verde a la MAX-C si se bajase el costo en un mill¨®n de d¨®lares, as¨ª que los especialistas de ambas agencias deber¨ªan discutir c¨®mo reducir los objetivos de la misi¨®n.

"Hemos avanzado mucho en nuestro conocimiento de Marte en los ¨²ltimos 10 ¨® 15 a?os, pero nuestra comprensi¨®n ha alcanzado un punto ahora en el que hay que traer muestras marcianas a la Tierra para logran los grandes avances", ha explicado Squyres a space.com. "Lo que podemos hacer con los instrumentos miniaturizados que enviamos a ese planeta tiene sus limitaciones, siempre son mucho menos capaces que los mejores instrumentos y laboratorios que tenemos aqu¨ª, as¨ª que cuestiones fundamentales como si Marte fue habitable alguna vez en su historia o incluso si a¨²n hay vida all¨ª, exige traer muestras para estudiarlas a fondo".

El segundo objetivo prioritario de exploraci¨®n planetaria a gran escala es, seg¨²n el informe, el sat¨¦lite de J¨²piter Europa, centr¨¢ndose en sus probables oc¨¦anos del subsuelo, que suponen uno de los entornos aptos para la vida m¨¢s prometedores en el Sistema Solar. Tambi¨¦n en este caso son dominantes las restricciones financieras, por lo que la misi¨®n no deber¨ªa recibir luz verde a menos que, por un aparte, se incremente el presupuesto de la NASA de exploraci¨®n cient¨ªfica planetaria, y por otra, se hagan m¨¢s accesibles econ¨®micamente los objetivos de este viaje al planeta gigante. El precio de la misi¨®n, tal y como est¨¢ ahora planteada, rondar¨ªa los 4.700 millones de d¨®lares (.3.365 millones de euros). Si no se abarata este proyecto, concluyen los expertos del NRC, su ejecuci¨®n repercutir¨ªa negativamente en otras importantes misiones.

La tercera prioridad en la lista ser¨ªa Urano, compaginando en el mismo vuelo un artefacto que se pusiera en ¨®rbita all¨ª y otro de descenso para investigar la estructura interna del planeta, la atm¨®sfera y la composici¨®n. Esta f¨®rmula de t¨¢ndem result¨® enormemente exitosa en la actual misi¨®n en Saturno, donde la nave Cassini de la NASA se puso en ¨®rbita (y sigue all¨ª funcionando) del planeta de los anillos, mientras que el m¨®dulo Huygens de la ESA descendi¨® al suelo de la luna Tit¨¢n, en 2005. El viaje de exploraci¨®n a Urano costar¨ªa 2.700 millones de d¨®lares (casi 2.000 millones de euros), seg¨²n las estimaciones actuales, y los expertos consideran que en ning¨²n caso deber¨ªa superarse esa cantidad.

El informe se ha realizado a partir del trabajo de cinco comisiones de expertos y recabando informaci¨®n de la comunidad cient¨ªfica dedicada a la exploraci¨®n planetaria. Adem¨¢s, se han tenido en cuenta las evaluaciones sobre costes y an¨¢lisis t¨¦cnicos de las misiones realizados de la misiones en estudio por una consultora independiente, informa la Academia Nacional de Ciencias, bajo cuyos auspicios (junto con la Academia Nacional de Ingenier¨ªa y el Instituto de Medicina) funciona el NRC.

Misiones intermedias

Las misiones intermedias estudiadas por la comisi¨®n se inscriben en el programa Nuevas Fronteras de la NASA y ya se ha lanzado una: la New Horizons que parti¨® hacia Pluton y Caronte en 2006 (llegar¨¢ en julio de 2015). Su costo ronda los 650 millones de d¨®lares (465 millones de euros). Otra nave de este programa partir¨¢ el pr¨®ximo mes de agosto con destino a J¨²piter, la Juno. Actualmente est¨¢ en proceso de selecci¨®n una tercera, y los expertos recomiendan una cuarta y una quinta para su desarrollo en el marco temporal de 2013 a 2022. La elecci¨®n entre las diferentes propuestas para esas misiones a?adidas debe realizarse siguiendo los procedimientos de evaluaci¨®n habituales en la ciencia. Actualmente hay siete propuestas: una para tomar muestras del n¨²cleo de un cometa y traerlas a la Tierra, otra para hacer lo mismo pero en la cuenca Aitken de la Luna; una tercera plantea continuar la exploraci¨®n de Saturno enviando una nave que analice su atm¨®sfera; una misi¨®n propone ir a explorar los llamados asteroides troyanos y otra propone una nave de descenso en Venus; un observatorio del sat¨¦lite de J¨²piter Io y una red de sensores en el suelo de la Luna para explorar su interior mediante sismolog¨ªa completan la lista de propuestas para misiones intermedias.

Misiones peque?as

El ¨²ltimo cap¨ªtulo de la exploraci¨®n es el de las misiones peque?as englobadas en el Programa Discovery, y los expertos del informe se muestran muy favorables a continuar su desarrollo y mantener su financiaci¨®n, aunque no especifican prioridades entre ellas. Se han venido desarrollando varias de estas misiones de peque?a escala en los ¨²ltimos a?os, sobre todo en Marte, y su rendimiento cient¨ªfico es sobresaliente. El informe apoya el desarrollo del Mars Trace Gas Orbiter, que deber¨ªa ser lanzado en 2016 para evaluar en el planeta rojo las fuentes geol¨®gicas -y a lo mejor biol¨®gicas- de los gases traza, como el metano.

"Nuestras recomendaciones se basan en criterios cient¨ªficos y ofrecen una mezcla equilibrada de misiones grandes, medianas y peque?as que tienen el potencial de extender enormemente nuestro conocimiento del Sistema Solar", concluye Squyres en space.com. "Sin embargo, en estos tiempos econ¨®micos complicados, habr¨ªa que tomar decisiones dif¨ªciles y, con eso en mente, nuestras prioridades para las futuras misiones han sido cuidadosamente seleccionadas sobre la base de su potencial para obtener el m¨¢ximo beneficio cient¨ªfico por d¨®lar invertido".