"Si existe una alternativa a las c¨¦lulas embrionarias, debemos buscarla"

Shinya Yamanaka es un pionero. El director del centro IPS de Kioto fue el primer investigador que consigui¨® dar marcha atr¨¢s a los relojes y convertir c¨¦lulas adultas en c¨¦lulas madre de pluripotencia inducida (IPS) que, como las embrionarias, poseen la capacidad de convertirse en cualquier tipo de c¨¦lula especializada. Su descubrimiento abri¨® un nuevo camino hacia la medicina regenerativa sin necesidad de manipular embriones y esa es una de las razones por las que recibe hoy el Premio Fundaci¨®n BBVA Fronteras del Conocimiento. "La primera vez que observ¨¦ un embri¨®n por el microscopio no pod¨ªa dejar de pensar en que pod¨ªa desarrollarse y convertirse en un ser humano, como mis hijas. Esto no quiere decir que est¨¦ en contra de la utilizaci¨®n de c¨¦lulas embrionarias. Si fuera la ¨²nica manera de ayudar a personas enfermas, no dudar¨ªa en utilizarlas; pero si existe una alternativa, tenemos que buscarla", afirma con convencimiento.

El principal riesgo de estas c¨¦lulas es que se vuelvan cancer¨ªgenas debido al uso del oncog¨¦n c-Myc en el proceso de reprogramaci¨®n. Para evitarlo, Yamanaka lo ha sustituido por el factor de transcripci¨®n Glis-1

Este experto en reprogramaci¨®n celular asegura que las c¨¦lulas IPS son la clave para el desarrollo de la medicina personalizada, que impedir¨ªan los rechazos en trasplantes: "El objetivo es que un paciente que sufra una cardiopat¨ªa pueda donar c¨¦lulas cut¨¢neas para generar una IPS reprogramada. Esta nueva c¨¦lula se comportar¨ªa como un cardiomiocito de su coraz¨®n de ni?o, antes de que se desarrollase la enfermedad. As¨ª podr¨ªamos trasplantarle tejido sano generado con sus propias c¨¦lulas".

Esta tecnolog¨ªa tambi¨¦n permitir¨¢ trazar una hoja de ruta de c¨®mo se ha desarrollado y ha avanzado la enfermedad, lo que servir¨ªa para ajustar los tratamientos a medida, seg¨²n la efectividad y los efectos secundarios para cada paciente. "Las IPS de ¨²ltima generaci¨®n ya est¨¢n listas para que la industria farmacol¨®gica experimente en los laboratorios y busque soluciones al p¨¢rkinson o el alzh¨¦imer", proclama el galardonado, que comenz¨® su investigaci¨®n con este objetivo. "Le promet¨ª a mi padre que ser¨ªa doctor, pero me di cuenta de que no era lo suficientemente bueno como cirujano ortop¨¦dico. Entonces tuve la suerte de encontrarme con la reprogramaci¨®n celular y me di cuenta de que profundizar en la investigaci¨®n es la ¨²nica v¨ªa para ayudar a muchos pacientes. Todav¨ªa no lo he conseguido, pero este es el objetivo de mi vida". El doctor prev¨¦ que el desarrollo de esta tecnolog¨ªa en el futuro abaratar¨¢ los costes y permitir¨¢ el desarrollo de medicamentos eficaces para enfermedades raras que actualmente no tienen cura.

Uso en seres humanos

La aplicaci¨®n en quir¨®fano tendr¨¢ que esperar a que el equipo demuestre que las c¨¦lulas madre de pluripotencia inducida son seguras. El principal riesgo detectado es que se vuelvan cancer¨ªgenas debido al uso del oncog¨¦n c-Myc en el proceso de reprogramaci¨®n. Yamanaka ha analizado 1.400 genes para buscarle un sustituto y el escogido ha sido el factor de transcripci¨®n Glis-1. "Es un avance muy importante con respecto al m¨¦todo original. Se podr¨ªa decir que es un gen m¨¢gico", ha declarado entusiasmado, sin dar m¨¢s detalles.

El director del centro IPS de Kioto no ha sabido poner una fecha a la aplicaci¨®n de su trabajo en medicina regenerativa humana y reconoce que es "una tecnolog¨ªa incipiente", aunque ha anunciado que su equipo est¨¢ involucrado, en colaboraci¨®n con otro grupo de investigadores de la Universidad de Keio (Tokio), en un ensayo cl¨ªnico para tratar las lesiones medulares. "Queremos crear un banco de c¨¦lulas iPS", explica. "Muchos enfermos de leucemia mueren esperando una m¨¦dula ¨®sea compatible. Si pudi¨¦semos hacer c¨¦lulas medulares a partir de las IPS podr¨ªamos salvarles, pero todav¨ªa es muy dif¨ªcil". Yamanaka insiste en la necesidad de que aumenten los donantes y hace un llamamiento a voluntarios de todo el mundo para crear una base donde conservar sus iPS para que, a la hora de trasplantarlas, disminuya el riesgo de rechazo.