Responsabilizarse de la basura electr¨®nica
La vor¨¢gine del "No lo arregles, t¨ªralo" intoxica el planeta y eleva las cifras de 'e-waste' a records hist¨®ricos
En 1965, Gordon Moore, cofundador de Intel, public¨® un art¨ªculo sobre c¨®mo la capacidad de procesamiento de un ordenador se duplicaba m¨¢s o menos cada 18 meses. Su reflexi¨®n, conocida como Ley de Moore, ha tenido, tiene, una inquietante implicaci¨®n: todo lo que contenga un peque?o ordenador en su interior, es decir, pr¨¢cticamente cualquier aparato electr¨®nico, llega viejo al mercado, a un paso de irse a la basura. Total, en 18 meses quiz¨¢s menos, llegar¨¢ su versi¨®n mejorada. Hacemos el gesto de comprar y luego tirar sin plantearnos muchas veces ni los costes energ¨¦ticos, ambientales o de recursos durante la fabricaci¨®n, ni lo que contaminar¨¢ esa basura electr¨®nica, esa e-waste, una vez que la desechamos. "Dise?ar para el vertedero es t¨®xico para la gente y para el planeta", denunciaba la ambientalista estadounidense Annie Leonard en su Story of Electronics: el cuarto documental corto que lanz¨® online, hace un a?o, dentro de su proyecto The Story of Stuff, donde analiza las sombras "de un sistema productivo que es lineal y est¨¢ en crisis". Antes, Leonardhab¨ªa abordado el problema de las botellas de agua de pl¨¢stico, o la cosm¨¦tica. El ¨²ltimo de la serie se titula The Story of Broke y analiza c¨®mo se ha roto la econom¨ªa de su pa¨ªs, el m¨¢s rico del mundo.
Se compra y luego se tira sin pensar ni en los costes energ¨¦ticos o ambientales, ni en lo que contaminar¨¢ esa basura
La electr¨®nica produce entre 20 y 50 millones de toneladas de residuos en el mundo cada a?o, una cantidad en alza por el empuje de los pa¨ªses emergentes
A Leonard se le estrope¨® el dvd, as¨ª que fue a un taller de reparaciones. El t¨¦cnico le dijo que arreglarlo le costar¨ªa 50 d¨®lares. Un aparato nuevo le sal¨ªa por 38,99. ?Qu¨¦ har¨ªamos la mayor¨ªa? Comprar el nuevo, est¨¢ claro, m¨¢s moderno, y por menos dinero. La sociedad de consumo dice "No lo arregles, t¨ªralo" o "Tu m¨®vil se ha quedado obsoleto, consigue otro, flamante, de ¨²ltima generaci¨®n". Lo que se traduce en una horquilla de entre 20 y 50 millones de toneladas de e-waste en el mundo cada a?o, y subiendo (por el empuje de los pa¨ªses emergentes), seg¨²n recoge TakeBack Coalition, que engloba a 30 organizaciones ambientalistas y de salud p¨²blica estadounidenses: 4,5 millones de ciudadanos de aquel pa¨ªs esperaban adquirir un televisor nuevo para la Superbowl de 2011; esa cifra hab¨ªa sido de 3,3 millones en 2010, y de 2,6 millones en 2009. Los consumidores buscan pantallas cada vez m¨¢s grandes, y tel¨¦fonos m¨¢s inteligentes: en el planeta se vendieron 1.211 billones (americanos) de m¨®viles en 2009, de los cuales 174 millones fueron smartphones.
El problema es que la mayor¨ªa de aparatos electr¨®nicos contienen sustancias muy contaminantes, como plomo, mercurio, ars¨¦nico, cadmio o PVC. Story of Electronics, co-producida por TakeBack Coalition, cuenta c¨®mo los pa¨ªses desarrollados se desprenden de esta basura t¨®xica llev¨¢ndosela a pa¨ªses en v¨ªas de desarrollo, especialmente Ghana, Nigeria, Costa de Marfil, India o China; la ciudad china de Guiyu se conoce como la ciudad vertedero, o la ciudad veneno. Cuando estos equipos llegan a su destino, o se venden en el mercado de la segunda mano o son quemados por familias de recuperadores artesanales, por supuesto sin ning¨²n material o medida de protecci¨®n, para extraer metales valiosos. Los componentes t¨®xicos se expanden as¨ª por la atm¨®sfera, no sin antes llenar bien los pulmones de ni?os, que suelen ser los encargados de desempe?ar esta tarea.
El documental termina con un llamamiento a los consumidores para que demanden productos m¨¢s verdes y exijan a la industria que deje de externalizar estos costes ambientales y humanos, que redise?e sus productos para que sean m¨¢s seguros, duraderos, menos t¨®xicos. Para que se responsabilice de ellos, y de su correcto reciclaje.
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