No disparen al buf¨®n

?Puede un ministro replicar a un mo?igote? Uno no, dos. Jos¨¦ Manuel Garc¨ªa-Margallo, titular de Asuntos Exteriores, y Jos¨¦ Ignacio Wert, de Educaci¨®n, Cultura y Deporte, se han enzarzado en un conflicto diplom¨¢tico con Francia a cuenta de una parodia de los gui?oles de Canal Plus de ese pa¨ªs. El humor de los vecinos no ha hecho ninguna gracia en el Gobierno. Y tampoco entre los deportistas espa?oles, dianas de los ¨¢cidos sketches que ironizan ¡ªtras la sanci¨®n impuesta por ese motivo al ciclista Alberto Contador¡ª con que el dopaje pueda estar detr¨¢s de los logros de figuras como Rafael Nadal o Pau Gasol. Al coro de ministros se uni¨® ayer la voz de la vicepresidenta, Soraya S¨¢enz de Santamar¨ªa, que lament¨® los ¡°ataques¡±. Y algunas voces de la oposici¨®n, la primera la de Alfredo P¨¦rez Rubalcaba.

Sorprende esta protesta diplom¨¢tica por un programa de televisi¨®n extranjero y de una cadena privada. La oleada de quejas ha retratado a un pa¨ªs, o al menos a una clase pol¨ªtica, demasiado susceptible ante la s¨¢tira y la iron¨ªa de un programa de humor. ?Qui¨¦n fija los l¨ªmites sobre lo que se puede o no bromear? ?Hay intocables a la hora de hacer chistes? ?Cabe la censura de los c¨®micos? Re¨ªrse de uno mismo es un s¨ªntoma de autocr¨ªtica e intentar ponerle una mordaza al gracejo es lo m¨¢s pr¨®ximo a un ataque a la libertad de expresi¨®n.

A Joaqu¨ªn Reyes le parece ¡°rid¨ªculo¡± el revuelo montado en torno al programa franc¨¦s. El c¨®mico, creador de La hora chanante o Muchachada nui, cree que el humor es precisamente ironizar con la realidad. ¡°Te puede hacer m¨¢s o menos gracia, pero no lo puedes tener en cuenta. Es humor, no es que un pol¨ªtico franc¨¦s o una personalidad del deporte en Francia haya declarado que un deportista espa?ol se dope¡±, apunta. ¡°Es como juzgar al buf¨®n¡±, reclama.

¡°No imagino a Sarkozy quej¨¢ndose por
do?a Rogelia¡±, dice
Toni Mart¨ªnez

¡°Los l¨ªmites del humor no est¨¢n escritos en ning¨²n manual. Dependen de un pacto no escrito que se establece con el p¨²blico para transgredir las fronteras habituales de cortes¨ªa que permiten no atizarnos con garrotes (en general)¡±, opina Toni Mart¨ªnez, que fue director de Las noticias del gui?ol, un formato que se emit¨ªa en Canal +, y ahora est¨¢ al frente de Todo por la radio en la cadena SER. En general, cree que el humor en Espa?a transgrede esos l¨ªmites muy poco. ¡°Es posible que tenga que ver con una frase que siempre me ha gustado: ¡®Los primeros 300 a?os de democracia son los m¨¢s dif¨ªciles¡±.

En Vaya semanita (ETB) no hay lugar para cors¨¦s. ¡°El humor siempre intenta ir m¨¢s all¨¢, transgredir, y en ese juego puede que haya alguien a quien le disguste. Lo que cuenta es el contexto y la intenci¨®n¡±, asegura Luis Blanco Rad, director de Programaci¨®n de la televisi¨®n vasca. Cree que no debe haber ni personajes, ni situaciones intocables. Cuando Vaya semanita parodi¨® a los borroka muchos temieron un terremoto en la sociedad vasca. ¡°M¨¢s que pol¨¦mica, provocaron sorpresa, y esa fue la base de su ¨¦xito. Se empez¨® a hablar en clave de humor de situaciones cotidianas, que hasta entonces hab¨ªan sido tab¨²¡±.

Pero hay quienes piensan que esos l¨ªmites se han traspasado esta semana. La chispa ha saltado con las parodias que los gui?oles galos han hecho de los deportistas m¨¢s emblem¨¢ticos, aquellos que simbolizan lo que se ha dado en llamar marca Espa?a, con Nadal, Casillas y Gasol como estandartes. El programa ha mostrado a sus r¨¦plicas de l¨¢tex firmando con jeringuillas un manifiesto de apoyo al sancionado Contador. En uno de los sketches el tenista manacor¨ª llena con su orina el dep¨®sito de un potente coche. Tras repostar as¨ª, el veh¨ªculo adquiere velocidad supers¨®nica.

Joaqu¨ªn Reyes: ¡°Te puede hacer gracia
o no, pero no debes tenerlo en cuenta¡±

La broma ha sentado mal en el Ejecutivo. Tras la rueda de prensa del Consejo de Ministros la vicepresidenta Santamar¨ªa asegur¨®: ¡°Desde el Gobierno vamos a defender la autenticidad de los logros de nuestros deportistas¡±. Son ¡°gente que se lo gana a pulso¡±, muchos de ellos ¡°son ejemplo de superaci¨®n y de defensa de su pa¨ªs all¨¢ por donde van¡± y ¡°ayudan a hacer eso que se llama marca Espa?a¡±. Tambi¨¦n para Rubalcaba, la burla ha sido ¡°de mal gusto¡±.

La imagen de un Gobierno protestando contra un mu?eco es, para Toni Mart¨ªnez, chocante. ¡°No me imagino a Nicolas Sarkozy presentando una protesta en la embajada por algo que hubiera dicho do?a Rogelia en un programa de televisi¨®n en Espa?a. Tengo la impresi¨®n de que el Gobierno espa?ol, cuatro d¨ªas despu¨¦s de la emisi¨®n del v¨ªdeo, intenta hacer surf sobre la ola de indignaci¨®n popular, porque ning¨²n pol¨ªtico est¨¢ sobrado de popularidad, y menos en v¨ªsperas de una reforma laboral. Eso no convierte a ning¨²n deportista en dopado ni al chiste en bueno o malo, pero entre abandonar la tortilla francesa o invadir Francia, sugiero elegir la primera opci¨®n, y solo si no hay m¨¢s remedio¡±.

Las cr¨ªticas no provienen solo del Gobierno. Jos¨¦ Guerrero, Yuyu, el chirigotero que colabora en los programas deportivos de la SER, mantiene que la parodia de los gui?oles es ¡°exagerada¡±. ¡°En el humor no vale todo, se denuncia un caso concreto y se intenta extender a un colectivo de deportistas¡±. Pese a todo, cree que no debe convertirse en una cuesti¨®n de Estado. ¡°Hace da?o y mete el dedo en la llaga, aunque no vamos a hacer otra guerra contra los franceses¡±.

¡°La burla escuece porque
se mete con los nuevos
adalides¡±, dicen en ¡®El jueves¡¯

Federico de Juan, alma de Los clones (Intereconom¨ªa), lamenta que un pa¨ªs (Espa?a) que presume de sentido del humor no aguante las bromas del vecino, aunque sean ¨¢cidas. Pero reprueba que los chistes hayan salpicado a otros deportistas. ¡°Se les ha ido de las manos. El v¨ªdeo de la gasolinera tiene mucha gracia, pero los franceses han aprovechado la coyuntura de la sanci¨®n a Contador para darle a Nadal. Llevan mucho tiempo sin ganar nada y eso les duele. Les ha sentado muy mal que Espa?a ganara un Mundial. Encierran mucho rencor: ?si no nos han votado nunca en Eurovisi¨®n!¡±.

Los mu?ecos franceses se defienden de las cr¨ªticas. Esos gui?oles que ahora son vistos como el demonio en media Espa?a tuvieron ocasi¨®n de lucirse hace 15 a?os cuando Richard Virenque, entonces el gran ¨ªdolo franc¨¦s de la bicicleta, fue pillado con todo el equipo (Festina) en posesi¨®n de jeringuillas, bolsas de sangre y otros pertrechos en pleno Tour. El programa emiti¨® entonces (era 1998) la siguiente parodia: un mosquito picaba en un gemelo a Virenque, sal¨ªa volando hacia Am¨¦rica y en unos segundos arrasaba la Amazonia entera.

Pascal Aznar, el jefe de comunicaci¨®n de Los gui?oles de la informaci¨®n, recuerda que la reacci¨®n a aquel gag fue muy similar en Francia a la que se ha vivido ahora en Espa?a. ¡°Hubo la misma indignaci¨®n ultranacionalista. Suele pasarnos sobre todo en periodos de crisis, preelectorales o cuando hay problemas de autocensura en los medios. En esos casos, siempre se dispara sobre los humoristas o los caricaturistas. Esperemos que esta vez no lleguemos a lo que pas¨® con las caricaturas de Mahoma¡±, bromea. La publicaci¨®n de unas vi?etas del profeta por el diario dan¨¦s Jyllands-Posten en 2006 desat¨® un conflicto. El peri¨®dico sufri¨® amenazas, pero tambi¨¦n fue objeto de una demanda de varias organizaciones isl¨¢micas, que denunciaron que las caricaturas atacaban al islam. Tras un juicio, la publicaci¨®n fue absuelta.

Los gui?oles franceses
tambi¨¦n hacen bromas
¨¢cidas sobre su pa¨ªs

Pau Escribano, director del programa de humor de TV3 Crack¨°via, en el que hacen s¨¢tiras sobre el deporte, ve la pol¨¦mica desmesurada, aunque cree que los gui?oles son inofensivos. ¡°No me parece mal lo que ha pasado, es lo que toca, que el humor cabree a la gente. Tiene que chinchar, ser provocador¡±, dice. Asegura que si hubiera ocurrido lo mismo en Espa?a con deportistas franceses tambi¨¦n se hubieran hecho bromas. ¡°Unos gags me han hecho m¨¢s gracia y otros menos. Algunos incluso podr¨ªamos haberlos hecho en Crack¨°via. Entiendo que no guste, pero de ah¨ª a pensar que son un agravio para Espa?a hay un trecho¡±, dice. El lunes habr¨¢ un sketch en el programa dedicado al controvertido asunto.

El pr¨®ximo n¨²mero de El jueves ya est¨¢ cerrado. Si no, puede que hubiera alguna vi?eta sobre esta pol¨¦mica. Maite Qu¨ªlez, directora de esta publicaci¨®n, referente en el humor en Espa?a ¡ªy que vivi¨® en sus carnes la censura con el secuestro judicial del n¨²mero que llevaba en la portada una caricatura de los Pr¨ªncipes de Asturias manteniendo una relaci¨®n sexual¡ª cree que todo se ha sacado de contexto. ¡°Los espa?oles creemos que somos divertidos pero siempre que no toquen lo nuestro. Nos cuesta re¨ªrnos de nosotros. Es il¨®gico hacer una cuesti¨®n de Estado de esto¡±, considera. Qu¨ªlez apunta que la s¨¢tira ha molestado a muchos porque se burla de deportistas que se han convertido en parte de la marca Espa?a. ¡°Los deportistas son nuestros h¨¦roes modernos. La gente se siente reflejada en sus logros, como si tambi¨¦n hubieran ganado el Mundial. Es como si fueran nuestros h¨¦roes patrios¡±. Una opini¨®n que suscribe Joaqu¨ªn Reyes. ¡°Tenemos claro que juegan limpio, ?por qu¨¦ no se va a poder bromear con ellos? El humor tiene que forzar un poco los l¨ªmites¡±, reclama.

¡°Los pol¨ªticos tienen asumida su mala imagen mientras que los deportistas est¨¢n acostumbrados a ser tratados como ¨ªdolos. Parte importante de sus ingresos proviene de los contratos de imagen¡±, dice Toni Mart¨ªn. ¡°Es l¨®gico que los personajes p¨²blicos se quejen de sus caricaturas, porque las caricaturas por definici¨®n son subjetivas e injustas, pero sin duda mucha veces las quejas son infundadas¡±.

Hay quienes piensan
que se han traspasado
los l¨ªmites del humor

El franc¨¦s Aznar a?ade que los guionistas de los gui?oles y su director se han limitado a hacer lo mismo de siempre: exagerar la realidad, poner en solfa las proclamas patrioteras de los pol¨ªticos, mofarse hasta de su sombra. No pocas veces su s¨¢tira feroz ha sido vista en la chovinista Francia como un ejercicio antipatri¨®tico, pero ahora todo un pueblo se ha sentido ofendido al otro lado de los Pirineos, y esto es la prueba de que el esp¨ªritu cr¨ªtico y libertario de los gui?oles ha dado en el clavo, en el coraz¨®n de algunas creencias ancladas en el inconsciente colectivo, en un tab¨² que no se puede/debe analizar: la ret¨®rica ¨¦pica del deporte, su funci¨®n p¨²blica de opi¨¢ceo del malestar social y refugio del orgullo patrio, la moderna idolatr¨ªa rocanrolera que eleva a los deportistas a iconos y modelos intocables, y la rotunda negativa (pol¨ªtica, sentimental) a pensar lo peor: que los arrolladores triunfos de los espa?oles sean sospechosos, mucho menos limpios y bellos de lo que cre¨ªamos. La sombra de la duda.

Las bromas hay que tom¨¢rselas como lo que son: burlas, iron¨ªa, s¨¢tira... Por eso, Mart¨ªnez no cree que los gui?oles atenten contra la imagen de Espa?a. ¡°Si hubiera que estar preocupado por eso, yo lo estar¨ªa m¨¢s por los art¨ªculos en Le Monde. Si en Espa?a nos ponemos a hacer humor con nuestro estado de opini¨®n, es decir, sobre la envidia francesa de Espa?a, es muy probable que en Francia no nos entiendan. Lo mejor ser¨ªa asumir que discrepamos y seguir siendo vecinos, odi¨¢ndose a discreci¨®n quien as¨ª lo desee¡±.

Lo cierto es que quiz¨¢ en algo s¨ª se deber¨ªa envidiar (sanamente) a franceses y brit¨¢nicos. Ambos llevan a Espa?a a?os de ventaja en el humor. ¡°A pesar de que el mundo anglosaj¨®n es m¨¢s puritano, en el humor nos llevan ventaja. Nosotros somos bastante pacatos y timoratos. No tenemos esa imagen de nosotros mismos, pero lo somos¡±, dice Joaqu¨ªn Reyes. Ah¨ª est¨¢n programas como el ¨¢cido Spitting images o Little britain (Reino Unido), o el semanario sat¨ªrico Le Canard Encha?n¨¦ (Francia) que adem¨¢s de bromear cuenta noticias que han llegado a tumbar ministros.

Quiz¨¢ lo que falta en Espa?a sea autocr¨ªtica. Qu¨ªlez dice que el problema es que en Espa?a falla la autocr¨ªtica. ¡°Quiz¨¢ sea complejo de inferioridad¡±, mantiene. Explica que en Espa?a hay temas tab¨² que en otros pa¨ªses no existen. ¡°Pero tambi¨¦n somos muy crueles, aunque no con aquello con lo que nos sentimos identificados¡±, dice. ¡°Re¨ªrse y el humor son buenas maneras de desdramatizar las cosas y esa capacidad no deber¨ªamos perderla nunca¡±.

El director de Crack¨°via no cree que el humor espa?ol sea tan distinto, aunque matiza que en Catalu?a, por ejemplo, se est¨¢ m¨¢s acostumbrado a ser irreverente con los pol¨ªticos. Opina que hacen falta m¨¢s programas de humor provocador, en los que se chinche a los pol¨ªticos y a los personajes p¨²blicos. ¡°El humor tiene un papel fundamental, puede entretener y divertir, pero el m¨¢s sat¨ªrico es un espejo de lo que ocurre, espejo muchas veces deforme pero que dice m¨¢s cosas que la realidad misma. Hace que la gente se d¨¦ cuenta de cosas que hab¨ªan pasado desapercibidas¡±, dice.

Con informaci¨®n de Miguel Mora