Nueva York publica una clasificaci¨®n de profesores

Una decisi¨®n judicial ha obligado al Gobierno de la ciudad de Nueva York a publicar la clasificaci¨®n de los m¨¢s de 18.000 docentes de las escuelas p¨²blicas despu¨¦s de una batalla legal entre el sindicato de profesores de la ciudad y los medios de comunicaci¨®n locales, que reclamaron la publicaci¨®n de las evaluaciones.

La publicaci¨®n final de las listas, en las que el nombre y apellidos de cada profesor van acompa?ados de su nota y el colegio en el que trabajan, ha desatado un importante conflicto. El sindicato, que lidera a aquellos en contra de la publicaci¨®n, alega que se est¨¢ juzgando a profesionales de la educaci¨®n mediante un sistema imperfecto. Los defensores de este gesto valoran la transparencia de la Administraci¨®n y agradecen que padres y alumnos tengan una nueva herramienta para evaluar la efectividad de los profesores.

La revelaci¨®n de los datos, disponibles desde el viernes en las p¨¢ginas de varios medios de comunicaci¨®n, como el diario The New York Times, se produce en un momento de un intenso debate sobre la calidad de la educaci¨®n p¨²blica en Estados Unidos, la eficacia de los sistemas oficiales para evaluar la aptitud de los profesores y los mecanismos para determinar si estos merecen continuar en su puesto despu¨¦s del repetido fracaso escolar de sus alumnos.

Varios medios de comunicaci¨®n denunciaron al Gobierno de la ciudad reclamando la revelaci¨®n de las listas

El sistema inform¨¢tico empleado por las escuelas p¨²blicas locales clasifica a m¨¢s de 18.000 profesores en funci¨®n de las notas obtenidas por los alumnos en dos ex¨¢menes realizados a final de curso. Uno de ellos determina el nivel en matem¨¢ticas y el otro, en comprensi¨®n de lectura. El sistema establece qu¨¦ nota se espera que vaya a obtener el estudiante y, si la supera, el profesor obtiene una calificaci¨®n positiva o muy positiva. Si el alumno no alcanza las previsiones, el profesor ve devaluada su valoraci¨®n. El Sindicato de Profesores de Nueva York reaccion¨® a la publicaci¨®n de las listas con un anuncio a p¨¢gina completa en los mismos peri¨®dicos que revelaron los datos. El mensaje ¡ª¡°?Esta no es manera de evaluar a un profesor!¡±¡ª va acompa?ado de una carta en la que el presidente del sindicato, Michael Mulgrew, argumenta que el m¨¦todo de clasificaci¨®n es ¡°err¨®neo y poco fiable¡±. Seg¨²n explica el diario The New York Times, el sistema ignora si un alumno se cambia de clase a final de curso, el n¨²mero de estudiantes a cargo de un mismo profesor, si este es biling¨¹e e, incluso, si ha estado de baja.

La herramienta fue creada hace varios a?os por la Concejal¨ªa de Educaci¨®n de Nueva York para determinar los rangos salariales de los profesores, si obten¨ªan una plaza fija o eran despedidos. El alcalde de la ciudad, Michael Bloomberg, tambi¨¦n ha defendido este m¨¦todo en su reforma del sistema p¨²blico y mantiene la amenaza de cerrar hasta 33 centros escolares por falta de calidad.

Obama present¨® en 2009 un plan para reformar el sistema de educaci¨®n

El pasado mes de agosto, varios medios de comunicaci¨®n denunciaron al Gobierno de la ciudad reclamando la revelaci¨®n de las listas, que siempre hab¨ªan estado limitadas para uso interno. El juez acab¨® dando la raz¨®n a los medios y Nueva York se convirti¨® en la segunda ciudad de Estados Unidos con una clasificaci¨®n de profesores, despu¨¦s de que Los ?ngeles tomara una decisi¨®n similar en 2010. El secretario de Educaci¨®n Arne Duncan celebr¨® entonces la medida, alegando que el silencio en torno a la calidad del profesorado ¡°no es una opci¨®n¡±.

El presidente Barack Obama present¨® en 2009 un plan para reformar el sistema de educaci¨®n, imponer nuevas evaluaciones a los profesores, equiparar los salarios con la calidad de su trabajo y premiar a aquellas escuelas con los mejores resultados. El secretario de Educaci¨®n, adem¨¢s, ha amenazado al Gobierno de Nueva York con la retirada de 700 millones de d¨®lares (520 millones de euros) en ayudas p¨²blicas a las escuelas si las autoridades y el Sindicato de Profesores no alcanzan un acuerdo antes del pr¨®ximo mes de enero e imponen el control de calidad de los profesores que recomienda la Casa Blanca.