?LSD y ¨¦xtasis l¨ªquido contra el alcoholismo?
Una revisi¨®n de estudios rescata el posible uso del ¨¢cido lis¨¦rgico para dejar de beber En Italia se ha autorizado el ¨¦xtasis l¨ªquido para controlar el s¨ªndrome de abstinencia Especialistas en desintoxicaci¨®n recelan de la utilidad terap¨¦utica de estas sustancias
El debate sobre el uso terap¨¦utico del cannabis, especialmente para mitigar algunos de los efectos secundarios de la quimioterapia, es recurrente. Pero plantear el empleo de LSD (dietilamida de ¨¢cido lis¨¦rgico) o ¨¦xtasis l¨ªquido (gamma hidroxibutirato, GHB) para combatir el abuso del alcohol desde ¨¢mbitos cient¨ªficos, resulta mucho menos habitual y bastante m¨¢s controvertido.
A partir de una revisi¨®n de seis estudios elaborados en la d¨¦cada de los sesenta (entre 1966 y 1970), los investigadores noruegos Teri S. Krebs y Pal-Orjan Johansen defienden que una sola dosis de ¨¢cido (entre 210 y 800 microgramos) aporta ¡°beneficios significativos importantes¡± en pacientes sometidos a programas de abandono del alcohol. Sus conclusiones se han publicado en un reciente art¨ªculo del Journal of Psychofarmacology.
En los ensayos cl¨ªnicos analizados participaron personas que segu¨ªan programas de deshabituamiento y se compar¨® los efectos entre bebedores a quienes se les administr¨® LSD con el grupo de control. En t¨¦rminos generales, los autores del estudio observaron un efecto positivo en el descenso del consumo de los pacientes tratados con ¨¢cido, especialmente en el corto plazo (entre dos y tres meses despu¨¦s del tratamiento).
Los autores defienden que el LSD aporta "beneficios significativos importantes" en estos pacientes
Pero respecto la abstinencia, el resultado fue a¨²n mejor. El abandono del consumo, tambi¨¦n a corto plazo, se duplic¨® entre quienes tomaron LSD. Como conclusi¨®n, los autores consideran que la administraci¨®n regular de esta sustancia podr¨ªa aportar un ¡°beneficio sostenido¡± entre los pacientes. Pese a ello, admiten que sus resultados pueden ser discutidos. Entre otros aspectos, porque no existe informaci¨®n detallada sobre los criterios de selecci¨®n de los participantes en los ensayos o porque puede haber estudios que lleguen a resultados contrarios ¡°que se hayan perdido o no se publicaran¡±
De hecho, Benjam¨ªn Climent, responsable de la unidad de toxicolog¨ªa cl¨ªnica y desintoxicaci¨®n del Hospital General de Valencia, sostiene que plantear que el uso de una dosis ¨²nica de ¨¢cido lis¨¦rgico es capaz de disminuir el consumo de alcohol durante entre tres y seis meses ¡°es muy poco razonable¡±.
¡°Es dif¨ªcil dar validez a trabajos que se remontan a fechas comprendidas entre los a?os 1966 y 1970¡± a?ade. ¡°Y me extra?a que se ignore que el LSD presenta una toxicidad f¨ªsica relevante ya que el consumo est¨¢ asociado a hipertensi¨®n arterial, crisis epil¨¦pticas o arritmias cardiacas¡±.
"Es dif¨ªcil dar validez a trabajos realizados entre 1966 y 1970" Benjam¨ªn Climent, responsable de la unidad de toxicolog¨ªa cl¨ªnica del Hospital General de Valencia
El uso terap¨¦utico del ¨¦xtasis l¨ªquido en alcoh¨®licos ha llegado m¨¢s lejos comparado con el LSD. El GHB, prohibido en Espa?a, est¨¢ autorizado en Italia para tratar el s¨ªndrome de abstinencia de los bebedores cr¨®nicos como apunta Manuel Sanchis, ex subdelegado del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas y experto en alcoholismo.
¡°Esta sustancia desencadena procesos similares a los que provoca el alcohol en el sistema nervioso central¡±, explica Sanchis. El GHB es un anest¨¦sico con un uso recreativo a bajas dosis por sus efectos similares al de una intoxicaci¨®n et¨ªlica. Tiene mala fama por su empleo ¨Cdiluida en bebidas- para adormecer y cometer abusos sexuales. Pero sus propiedades sedantes han hecho que se use para las primeras fases del tratamiento de abandono del alcohol en pacientes cronificados. En el mono, son habituales las convulsiones, y las complicaciones ¡°tienen una incidencia elevada¡±. Hasta el punto de que existe un riesgo de mortalidad entre el 10% y el 15%, sostiene Sanchis, jefe de la unidad de desintoxicaci¨®n del Hospital Psiqui¨¢trico de B¨¦tera (Valencia) de la red p¨²blica valenciana.
En Espa?a se suelen usar las benzodiazepinas y, fundamentalmente, el clometiazol, ambos tambi¨¦n tranquilizantes. La desintoxicaci¨®n suele durar entre 10 y 12 d¨ªas a lo largo de los cuales se rebaja la dosis hasta que se tiene controlada la abstinencia.
El GHB es un anest¨¦sico con mala fama por su uso para cometer abusos sexuales
Un editorial publicado en Alcohol and Alcoholism hace unos meses por investigadores de la Universidad de Yale analiz¨® el papel del GHB en los pacientes con alcoholismo cr¨®nico. El trabajo hace referencia a una revisi¨®n de ensayos con datos de 650 pacientes y plantea que el GHB podr¨ªa superar a las benzodiacepinas en el control de determinados s¨ªntomas ligados al proceso de desintoxicaci¨®n. Como preventivo ante posibles reca¨ªdas ¡°su uso potencial es m¨¢s interesante¡±, a?ade. Aunque admite que es m¨¢s dif¨ªcil de trasladar a la pr¨¢ctica cl¨ªnica. En todo caso, sugiere la conveniencia de realizar m¨¢s ensayos para profundizar en el conocimiento del f¨¢rmaco.
Benjam¨ªn Climent alerta de la existencia de una corriente ¡°que intenta crear la opini¨®n de que drogas de abuso como el GHB, cannabis, ¨¦xtasis o LSD tienen un papel en la farmacolog¨ªa cl¨ªnica¡±. Este especialista admite que se ha avanzado en los cannabinoides (mol¨¦culas presentes en el cannabis), pero en general, ¡°existe el peligro de que se ofrezca una imagen de banalidad y seguridad por el uso de estas sustancias¡±.
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