Extirpado con ¨¦xito un tumor de 12 cent¨ªmetros a un feto

A Marc se le diagnostic¨® a las 26 semanas de gestaci¨®n un voluminoso tumor que se le extend¨ªa por el ment¨®n, el cuello y parte del t¨®rax. No solo se trataba de un teratoma maligno, sino que, debido a su enorme tama?o y peso (12 cent¨ªmetros de largo y 168 gramos al nacer), compromet¨ªa seriamente la supervivencia del peque?o. El tumor le obstru¨ªa la garganta, por lo que le hubiera impedido comer y respirar tras el parto.

La ¨²nica soluci¨®n pasaba por una delicada intervenci¨®n en dos etapas. Primero, antes de sacar al feto completamente del ¨²tero y cortar el cord¨®n, hab¨ªa que intubarle por la tr¨¢quea para garantizar que no se quedara sin ox¨ªgeno al interrumpir la conexi¨®n umbilical. Una vez en la incubadora, ya estabilizado con una v¨ªa de respiraci¨®n asistida abierta, se le podr¨ªa retirar el enorme quiste que ten¨ªa y liberar la compresi¨®n que sufr¨ªa en la garganta, de forma que se pudiera alimentar y respirar por sus medios.

Esta experiencia nos ha cambiado la vida Deliz Nieto, padre del paciente

De todo ello se encarg¨® un equipo del hospital La Fe de Valencia el pasado mes de diciembre. Ahora, Marc, que tiene cinco meses, evoluciona favorablemente y no presenta secuelas del tumor ni de la cirug¨ªa, m¨¢s all¨¢ de una cicatriz transversal en el cuello. ¡°Esta experiencia nos ha cambiado la vida¡±, explic¨® este lunes su padre, Deliz Nieto, en la rueda de prensa que ofreci¨® junto a su mujer y los cirujanos que dirigieron la intervenci¨®n. ¡°Lo dif¨ªcil¡±, recordaron los padres, fue la decisi¨®n de pasar por el quir¨®fano, debido a los riesgos que presentaba la intervenci¨®n, tanto para el peque?o como para la madre.

La primera fase de la operaci¨®n, cuando Marc ten¨ªa algo m¨¢s de siete meses de gestaci¨®n (31 semanas), consisti¨® en extraer la cabeza y los brazos del feto del vientre materno para intubarlo por la tr¨¢quea mientras el resto del cuerpo del peque?o segu¨ªa en el ¨²tero y permanec¨ªa unido a su madre a trav¨¦s del cord¨®n umbilical. Es un proceso delicado, no solo para el beb¨¦, sino para la madre. Hay que mantener el ¨²tero abierto y existe el riesgo de que se produzcan hemorragias importantes,destac¨® Carlos Guti¨¦rrez, uno de los miembros del servicio de cirug¨ªa pedi¨¢trica del hospital La Fe que intervino en la operaci¨®n.

El? tumor pesaba 168 gramos un 10% del total del beb¨¦ al nacer

De esta forma, el beb¨¦ pod¨ªa seguir recibiendo ox¨ªgeno por el cord¨®n hasta que se abriera un canal de respiraci¨®n y fuera capaz de usar los pulmones mediante el conducto abierto por la garganta. No hab¨ªa otra alternativa terap¨¦utica ya que, una vez separado de la madre, el ox¨ªgeno importado a trav¨¦s de la conexi¨®n umbilical se consume a los tres minutos. De hecho, antes de usar esta t¨¦cnica, lo habitual es que los ni?os murieran mientras se intentaba abrir una v¨ªa que permitiera respirar a los peque?os que sufr¨ªan este tipo de neoplasias. El proceso dur¨® una hora.

Un d¨ªa despu¨¦s, una vez estabilizado el beb¨¦ en la incubadora, se acometi¨® la segunda fase. Se extirp¨® el tumor, que pes¨¢ba casi el 10% de lo que pes¨® el ni?o (1,9 kilos). Tampoco fue f¨¢cil debido a la naturaleza del quiste, formado por una amalgama de distintos tejidos (nervios, m¨²sculos, hueso, pelo) muy vascularizada. El trabajo de quir¨®fano se prolong¨® a lo largo de cinco horas y requiri¨® la intervenci¨®n de especialistas de obstetricia, anestesiolog¨ªa, neonatolog¨ªa, cirug¨ªa pedi¨¢trica y otorrinolog¨ªa infantil del hospital La Fe. A pesar de que el tumor hab¨ªa comprimido y desplazado los tejidos que ten¨ªa alrededor (vasos sangu¨ªneos, nervios, la tr¨¢quea), no ha quedado ¡°ning¨²n deterioro nervioso, muscular o de cualquier otro tipo¡±, se?al¨® Carlos Guti¨¦rrez.

Esta t¨¦cnica de intervenci¨®n fetal en dos etapas (ex utero intrapartum treatment, Exit) se ha practicado en otros centros de Espa?a (en especial el Vall d'Hebron de Barcelona), a pesar de tener apenas cinco a?os de vida. Sin embargo, nunca hasta ahora se hab¨ªa extra¨ªdo un tumor tan grande. Tanto este procedimiento quir¨²rgico como la cirug¨ªa estrictamente intrauterina est¨¢n en pleno desarrollo. ¡°Es un tren que cada vez va m¨¢s r¨¢pido¡±, relat¨® el cirujano pedi¨¢trico del hospital La Fe.

El viernes pasado, m¨¦dicos estadounidenses anunciaron una intervenci¨®n intrauterina en la que, sin extraer al feto, extirparon un tumor en el quinto mes de gestaci¨®n.?