60 a?os bajo la amenaza de la presa

Jos¨¦ Fern¨¢ndez Fern¨¢ndez, alcalde de Navia de Suarna (Lugo), siempre ha escuchado hablar de ¡°la presa¡±. Cuando ¨¦l naci¨®, en 1958, el proyecto para construir un salto hidroel¨¦ctrico en el r¨ªo Navia llevaba ya siete a?os en boca de los vecinos. ¡°Siempre hemos vivido con la amenaza de la presa. En los sesenta, en los setenta, en los ochenta... el tema iba y ven¨ªa y nadie invert¨ªa aqu¨ª por miedo¡±, cuenta Fern¨¢ndez por tel¨¦fono. Por sorprendente que parezca, el proyecto, tras sucesivos cambios de dise?o, la obra muri¨® el jueves, cuando el Ministerio de Medio Ambiente public¨® en el Bolet¨ªn Oficial del Estado la declaraci¨®n de impacto ambiental negativa de la presa, promovida por Saltos del Navia, una sociedad al 50% de Endesa y HC.

La historia del salto del Suarna resume la de las obras hidr¨¢ulicas de Espa?a. Planteado en 1951 con una altura de 75 metros, fue elevado en 1956 al proyecto ¡°Gran Suarna¡±, con 130 metros, que fueron de nuevo ampliados en 1975 hasta los 150 metros. Entonces la obra iba a anegar cuatro poblaciones, entre las que est¨¢ Navia de Suarna. Era el momento de las grandes presas.

Las obras llegaron a empezar el 24 de diciembre de 1964, aunque fueron paralizadas por la fuerte oposici¨®n vecinal. El proyecto fue sufriendo distintos reveses hasta que en 1995, la firma lo plante¨® de nuevo y consigui¨® el permiso del Gobierno socialista. Para ello esgrim¨ªa que ten¨ªa una concesi¨®n de aguas del 9 de febrero de 1951 que hab¨ªa sido modificada el 1 de junio de 1963 y que le autorizaba a derivar ¡°todas las aguas del r¨ªo Navia¡±. El Ejecutivo entendi¨® entonces que esa concesi¨®n franquista era v¨¢lida y que no necesitaba declaraci¨®n de impacto ambiental.

El Ayuntamiento de Navia recurri¨® contra ese permiso y en 2004 el Tribunal Supremo le dio la raz¨®n. El fallo estableci¨® que ¡°la construcci¨®n del aprovechamiento hidr¨¢ulico del salto de Suarna debe ser sometido al procedimiento reglado de evaluaci¨®n de impacto ambiental¡±, como marcaba ya la normativa europea.

Pero la contumacia de la empresa le llev¨® a retomar el 22 de octubre de 2007 el proceso de evaluaci¨®n ambiental presentando un nuevo proyecto ante el Ministerio de Medio Ambiente, esta vez de 96 metros de altura que anegar¨ªa parte de los t¨¦rminos municipales de Ibias (Asturias) y Fonsagrada y Navia de Suarna (Lugo).

Como era previsible, un proyecto ideado en 1951 dif¨ªcilmente cumple con las normas ambientales actuales. As¨ª que la declaraci¨®n de impacto ambiental supone un varapalo a la documentaci¨®n presentada. El ministerio considera que

¡°la justificaci¨®n del proyecto basada en la lucha contra el cambio clim¨¢tico y generaci¨®n de energ¨ªa limpia no es adecuada¡±, que tendr¨ªa repercusiones en dos espacios protegidos y en poblaciones de especies amenazadas como el oso pardo cant¨¢brico, la nutria, el desm¨¢n de los Pirineos y la madreperla de r¨ªo. La presa pretend¨ªa inundar 15 yacimientos arqueol¨®gicos, a lo que la empresa replic¨® que ¡°la inundaci¨®n de los yacimientos no supone su destrucci¨®n, por lo que considera el impacto como moderado¡±, seg¨²n la declaraci¨®n. Este diario ha intentado, sin ¨¦xito obtener la versi¨®n de la firma.

En sus alegaciones, la Confederaci¨®n Hidrogr¨¢fica del Cant¨¢brico consider¨® que ¡°los efectos del proyecto deben calificarse como cr¨ªticos, ya que el resultado final del proyecto es la desaparici¨®n del r¨ªo, y por lo tanto, ambientalmente inadmisibles¡±. ¡°No es leg¨ªtimo alegar que se dispone de una concesi¨®n, y que se retrasen las obras durante 47 a?os¡±, se?alan las alegaciones contrarias.

El Navia cuenta ya a lo largo de su curso con tres presas consecutivas (Arb¨®n, Doiras y Salime) y, de haberse construido la cuarta, de 23,4 kil¨®metros de longitud justo a continuaci¨®n, r¨ªo arriba, de la de Salime, 80 de los 150 kil¨®metros del r¨ªo quedar¨ªan embalsados.

¡°Es otro Ria?o, pero con final feliz¡±, se?ala Pedro Brufao, presidente de la Asociaci¨®n AEMS-R¨ªos con Vida ¡ªque aleg¨® contra el proyecto¡ª en alusi¨®n al famoso pantano que simboliz¨® la infructuosa lucha ecologista.

El alcalde de Navia de Suarna, el socialista Jorge Fern¨¢ndez, admite que ¡°no tiene mucha explicaci¨®n¡± que la negativa llegue ahora, 61 a?os despu¨¦s, y lamenta el da?o causado: ¡°Durante mucho tiempo la gente se retra¨ªa y no invert¨ªa aqu¨ª. A la dificultad de vivir en un medio rural y monta?oso se un¨ªa la amenaza de la presa¡±. Y concluye con una pregunta sobre qui¨¦n va a compensar al pueblo: ¡°Durante estos a?os ha habido gente que no invirti¨® aqu¨ª por la inseguridad y eso ya no se va a recuperar¡±.