A 71 grados bajo cero en Marte

Las temperaturas son templadas en el cr¨¢ter Gale de Marte, con 71 grados cent¨ªgrados bajo cero de m¨ªnima y 11 grados, tambi¨¦n bajo cero, de m¨¢xima. No hace tanto fr¨ªo como se esperaba. La humedad es tambi¨¦n baja: 8%, hace sol, la presi¨®n es un poco m¨¢s alta de lo normal y sopla viendo del Noroeste. All¨ª, en el lugar pr¨®ximo al ecuador donde est¨¢ el robot de la NASA Curiosity desde hace un par de semanas, es el final del invierno. Estos son los primeros datos que se hacen p¨²blicos del tiempo que hace en Marte en esta misi¨®n y han sido tomados con la estaci¨®n meteorol¨®gica REMS, aportaci¨®n espa?ola al laboratorio rodante. Ayer fueron presentados por su responsable Javier G¨®mez Elvira. La REMS est¨¢ midiendo correctamente all¨ª la temperatura, la presi¨®n, la humedad... pero hay un problema con uno de los sensores de viento y se est¨¢ intentando solventar, explic¨® el ingeniero espa?ol desde el Jet Propulsion Laboratory (en California), durante la presentaci¨®n de las actividades diarias del nuevo robot en Marte.

?"Con los primeros datos [de la REMS] que nos llegaron vimos que uno de los dos sensores de viento no funcionaba correctamente, pero en la fase de viaje lo hab¨ªamos probado y estaba operativo¡±, explic¨® ayer G¨®mez Elvira a EL PA?S. La anomal¨ªa se detect¨® cuando el Curiosity estaba ya en el suelo de Marte.

¡°Hemos estado investigando el problema y la conclusi¨®n que consideramos m¨¢s probable, aunque no podremos verificarla en los pr¨®ximos meses, es que el sensor se haya da?ado durante el aterrizaje y posiblemente por el impacto de una de las peque?as rocas que se ven sobre el rover¡±, contin¨²a G¨®mez Elvira. ¡°Por lo dem¨¢s, el otro sensor de viento est¨¢ mandando datos, al igual que el resto de los sensores y seguimos en la fase de verificaci¨®n de instrumentos del robot¡±.

Mike Watkins, jefe de la misi¨®n del Curiosity, anunci¨® ayer que el robot dar¨¢ hoy sus primeros pasos en el suelo marciano, en un ensayo en el que se le ordenar¨¢ avanzar unos tres metros y retroceder casi otro tanto. Cuando acabe la fase actual de verificaci¨®n de equipos e instrumentos, y durante un cierto tiempo, el laboratorio rodante har¨¢ etapas cortas, de unos 30 metros diarios, dijo Watkins. La orden de marcha le llega al robot una vez que se ha comprobado el buen funcionamiento de los motores de las cuatro ruedas de los extremos (lleva seis en total este todoterreno).

Pero sin esperar a los primeros pasos, ya se han probado algunos de los instrumentos cient¨ªficos del Curiosity. El brazo de 2,1 metros de longitud, con cinco articulaciones, se ha extendido y funciona perfectamente, seg¨²n inform¨® la ingeniera Louise Jandura. ¡°El brazo es la herramienta con la que vamos a tomar muestras y ponerlas en los instrumentos de an¨¢lisis¡±, explic¨®. Adem¨¢s, en el extremo de este brazo va colocada una c¨¢mara, una perforadora y un espectr¨®metro.

Tambi¨¦n han ido bien las pruebas con el experimento del l¨¢ser para hacer an¨¢lisis qu¨ªmicos. Se estren¨® el pasado fin de semana con una roca situada cerca del veh¨ªculo.

Mientras el Curiosity se estrena en Marte, la NASA anunci¨® ayer una nueva misi¨®n de exploraci¨®n del planeta rojo, la InSight. Ser¨¢ una sonda de descenso en el suelo, pero fija en lugar de rodante. El objetivo es estudiar el interior del planeta y averiguar si el n¨²cleo es s¨®lido o l¨ªquido, como el de la Tierra. Insight, con un presupuesto de 350 millones de euros (es una misi¨®n de bajo coste), se lanzar¨¢ en 2016 y se inscribe en el plan de la NASA de enviar al planeta rojo una o dos misiones cient¨ªficas cada 26 meses, cuando las posiciones orbitales de la Tierra y Marte facilitan el viaje.

Antes de la Insight, en 2014, est¨¢ previsto que parta la pr¨®xima misi¨®n marciana de la NASA, la siguiente al Curiosity: una sonda orbital llamada Maven para investigar la atm¨®sfera y estudiar el clima all¨ª.