El 95% de los europeos en ciudades respira part¨ªculas muy nocivas
La contaminaci¨®n se ha reducido en la ¨²ltima d¨¦cada, pero en muchos pa¨ªses supera el l¨ªmite tolerable La Agencia del Medio Ambiente urge a tomar medidas
El 95% de la poblaci¨®n urbana europea respira peque?as part¨ªculas en suspensi¨®n en el aire nocivas para la salud y consideradas uno de los agentes contaminantes m¨¢s da?inos por su penetraci¨®n en el sistema respiratorio. ¡°En muchos pa¨ªses, la concentraci¨®n de contaminantes en el aire est¨¢ por encima de los l¨ªmites legales y recomendados para proteger la salud de los ciudadanos europeos y, de hecho, la contaminaci¨®n atmosf¨¦rica reduce la esperanza de vida en aproximadamente dos a?os en las ciudades y regiones m¨¢s afectadas¡±, se?ala Jacqueline McGlade, directora de la Agencia Europea del Medio Ambiente (EEA, siglas en ingl¨¦s), al presentar el ¨²ltimo informe sobre la calidad del aire elaborado por dicho organismo. ¡°Las pol¨ªticas de UE han logrado reducir las emisiones de muchos contaminantes en la ¨²ltima d¨¦cada, pero podemos avanzar m¨¢s¡±, a?ade.
Las part¨ªculas en suspensi¨®n en el aire, de diferente composici¨®n y origen, se emiten directamente en numerosos procesos (combusti¨®n, industrias, transformaci¨®n de materias primas, humo, etc¨¦tera), o indirectamente por las reacciones qu¨ªmicas de gases y de compuestos org¨¢nicos; sus concentraciones var¨ªan dependiendo de las fuentes y de las condiciones meteorol¨®gicas en distintos lugares y momentos. Se clasifican, seg¨²n explica el informe de la EEA, en dos tama?os: las grandes, de 10 micras de di¨¢metro m¨¢ximo, y las peque?as, de hasta 2,5 micras. Muchas son especialmente peligrosas para la salud porque pueden pasar a trav¨¦s de los pulmones al torrente sangu¨ªneo como si fueran mol¨¦culas de ox¨ªgeno. Este agente contaminante puede provocar o agravar enfermedades cardiovasculares y pulmonares, afectar al sistema nervioso central y al reproductivo e incluso provocar c¨¢ncer.
En el medio ambiente, el da?o es similar en los animales, pero las altas concentraciones de part¨ªculas tambi¨¦n afectan al crecimiento de las plantas y perjudican a los ecosistemas.
La esperanza de vida caer¨¢ dos a?os en las zonas m¨¢s afectadas
Este tipo de contaminaci¨®n se ha reducido en la UE en un 14% (part¨ªculas grandes) y 15% (peque?as) en una d¨¦cada, pero todav¨ªa los niveles son peligrosos para la salud de millones de personas. Un 81% de los habitantes de las ciudades en Europa est¨¢ expuesto a concentraciones de part¨ªculas grandes por encima de los estrictos l¨ªmites fijados por la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS), y un 95%, a las part¨ªculas peque?as. Sin embargo, la normativa de la UE es m¨¢s laxa: el 21% y el 30% de la poblaci¨®n urbana europea respira en el aire m¨¢s part¨ªculas nocivas, grandes y peque?as, respectivamente. ¡°Esto enfatiza la urgencia de revisar la legislaci¨®n europea del aire¡±, destaca la EEA.
Las ciudades y regiones industriales de Europa central y oriental, as¨ª como el Este de Francia y el Norte de Italia son las que registran un nivel mayor de esta contaminaci¨®n por part¨ªculas. Espa?a se sit¨²a en la franja media baja de la tabla.
Menci¨®n especial merece en el informe de la EEA la contribuci¨®n del tr¨¢fico local y urbano a la contaminaci¨®n por part¨ªculas de 10 micras de di¨¢metro. Las mediciones realizadas en 29 ciudades muestran concentraciones que van desde el 13% en Duisburg (Alemania) al 61% en Glasgosw (Reino Unido), con una media del 34%. Estos datos ¡°indican que las contribuciones del tr¨¢fico a las concentraciones urbanas de part¨ªculas deben ser abordadas al aplicarse medidas para reducir las concentraciones ambientales de estas part¨ªculas¡±, sugiere el estudio.
El aire es muy sucio en Europa oriental, el este de Francia y el norte de Italia
El Informe de la Calidad del Aire en Europa 2012 abarca un amplio rango de contaminantes y constata que se ha producido en la ¨²ltima d¨¦cada una notable ca¨ªda de las emisiones de muchos agentes, como el di¨®xido de azufre (ninguna poblaci¨®n urbana europea estaba en 2010 sometida a niveles superiores a los permitidos) y el mon¨®xido de carbono. En cuanto al di¨®xido de nitr¨®geno, el 7% de los europeos todav¨ªa viven en ciudades donde est¨¢n expuestos a niveles por encima de la regla de la UE. Por otra parte, junto a los niveles altos persistentes de las part¨ªculas, destaca tambi¨¦n el problema del ozono en las capas bajas de la atm¨®sfera. ¡°Son los dos contaminantes m¨¢s problem¨¢ticos en Europa en t¨¦rminos de salud humana¡±, se?alan los expertos.
El ozono troposf¨¦rico puede causar o agravar problemas respiratorios y la exposici¨®n a este agente en ciudades a¨²n es muy alta: el 97% de los habitantes urbanos en la UE, seg¨²n las recomendaciones de la OMS, o el 17% seg¨²n los objetivos de la UE.
Ocultas, inodoras e invisibles, pero no inocuas
Las part¨ªculas contaminantes (PM2,5, PM10, seg¨²n su di¨¢metro) se han mantenido casi siempre en un discreto segundo plano cuando se habla de lucha contra la contaminaci¨®n. Pero, poco a poco, van ganando protagonismo. La Organizaci¨®n Mundial de la Salud calcula que una reducci¨®n desde una media de 70 microgramos de PM10 a una media anual de 20 microgramos por metro c¨²bico se traducir¨ªa en una reducci¨®n del 15% de la mortalidad. En cambio, a niveles m¨¢s altos de contaminaci¨®n, reducciones similares no har¨ªan disminuir tanto la mortalidad, pero tendr¨ªan con todo importantes efectos beneficiosos para la salud.
Las part¨ªculas son un contaminante netamente urbano. Y su presencia (asociada al tr¨¢fico o a los humos de las calefacciones) ha sido un continuo dolor de cabeza para algunos Consistorios, empe?ados en soslayar un riesgo evidente para la salud de los ciudadanos. No por maldad, sino porque algunas de las medidas que se sabe que son m¨¢s efectivas, como restringir el tr¨¢fico en la almendra central de las ciudades, son claramente impopulares. En Madrid, por ejemplo, los proyectos del anterior alcalde, Alberto Ruiz-Gallard¨®n, en este sentido, nunca fueron puestos en pr¨¢ctica por su entonces concejal de Medio Ambiente y actual alcaldesa, Ana Botella.
En las ciudades, son los motores di¨¦sel los mayores responsables de la emisi¨®n de estas part¨ªculas. Esto contradice la fama de ¡°menos contaminantes¡± de estas m¨¢quinas, lo que junto al menor precio del combustible las ha convertido en las m¨¢s usadas del parque automovil¨ªstico espa?ol. Un informe de 2011 relacionaba las PM2,5 con el aumento de mortalidad e ingresos hospitalarios en Madrid.
La UE tambi¨¦n tiene estas part¨ªculas en su punto de mira. Pero los grandes Ayuntamientos espa?oles (Madrid, Barcelona) han pedido moratorias. Lo m¨¢s que han hecho ha sido cambiar algunos medidores de sitio para dar niveles m¨¢s bajos.
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