¡°Los lectores en Internet han dado valor a mi novela¡±
No parece que Antonia sea una mujer que se arredre con facilidad. Tiene toda la pinta de poner la directa cuando est¨¢ convencida de lo que tiene entre manos. Y algo pens¨® que ten¨ªa cuando sac¨® del caj¨®n una novela intimista y rom¨¢ntica escrita hace m¨¢s de 10 a?os, En un rinc¨®n del alma. ¡°Era el momento¡±, asegura convencida Antonia J. Corrales, que ha buscado un lugar en el centro de Madrid ¡ªella vive cerca del campo en alpargatas y camisas grandes encima de unos pantalones anchos y c¨®modos¡ª de sencillos muebles de madera y objetos antiguos, lejos de los pl¨¢sticos que tanto rechazo le provocan. El verdadero momento de En un rinc¨®n del alma lleg¨® cuando su autora decidi¨® colgar la obra en Amazon.es en el apartado de autores independientes al precio de 0,98 euros y con los royalties al 35%, despu¨¦s del relativo fracaso de ventas tras su publicaci¨®n con una peque?a editorial. ¡°Quer¨ªa que se divulgara la historia, necesitaba que llegara a las mujeres para las que est¨¢ escrita, muy por encima del dinero¡±.
Eso fue en febrero pasado y en solo 15 d¨ªas estaba ya en el n¨²mero uno de ventas en esa plataforma. A los dos meses, En un rinc¨®n del alma hab¨ªa superado las 25.000 descargas. Tal fue el ¨¦xito que Ediciones B la adquiri¨® para su plataforma electr¨®nica B de Books y ahora se ha decidido a sacarla en papel. Algo as¨ª como el mundo al rev¨¦s. ¡°Han sido los lectores de Internet los que le han dado el valor real a mi novela. Internet me ha dado la oportunidad de transmitir mis sentimientos¡±, dice mientras se alegra de la elecci¨®n del cusc¨²s compartido.
En un rinc¨®n del alma es, dice su autora, un libro para trayectos cortos, ya sea de metro o autob¨²s. De cap¨ªtulos muy cortos, ¡°justos y precisos¡± ¡ªa?ade ella¡ª, ¡°todo para que no canse al lector¡±. Perfeccionista hasta la extenuaci¨®n, Antonia Corrales se f¨ªa mucho de s¨ª misma, algo que reconoce con una naturalidad digna de envidia. Intuye lo que va a gustar o no a la gente. ¡°Si yo bostezo, el lector est¨¢ dormido hace d¨ªas¡±, asegura esta madre de tres hijas, que busca en su marido a su primer lector, aunque sin confiar excesivamente ¡ª¡°no me f¨ªo mucho porque me quiere demasiado y no puede ser objetivo¡±¡ª .
Su novela rom¨¢ntica se publicar¨¢ en papel tras su ¨¦xito en la web
Sus primeras lecturas comenzaron con los libros que compraba en los estancos. Hasta que apareci¨® el bibliob¨²s (las bibliotecas m¨®viles), que se convirti¨® en el verdadero ed¨¦n de su adolescencia. ¡°Era una ¨¦poca en la que no ten¨ªa dinero para libros y el bibliob¨²s fue mi salvaci¨®n; me lo le¨ª todo¡±, dice esta coleccionista de paraguas rojos ¡ªahora le han llegado algunos de sus lectores¡ª. Como con el que se protege su Jimena del libro, aquella que va narrando en una carta a su madre los avatares de su vida. ¡°El libro no es autobiogr¨¢fico, pero la realidad es que Jimena tiene mucho de todas las mujeres, de todas aquellas que buscan su sitio despu¨¦s de la maternidad, en la madurez¡±.
Sale a la calle con verdaderas ganas de fumar y confiesa que el ¨¦xito de su libro le ha abierto el camino al g¨¦nero rom¨¢ntico, algo que no aparec¨ªa en sus dos primeras obras, m¨¢s centradas en el suspense. As¨ª que de momento ya est¨¢ investigando sobre las mujeres que poblar¨¢n su pr¨®ximo proyecto. Es en ese momento cuando aparece la Antonia Corrales detective. Y una se siente observada.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.