Jap¨®n siembra dudas sobre su objetivo de emisiones por el apag¨®n nuclear

Jap¨®n ha sembrado dudas en la cumbre del clima de Doha sobre sus planes de reducci¨®n de emisiones para 2020. El pa¨ªs anunci¨® el mi¨¦rcoles que en 2011 sus emisiones de CO₂ aumentaron un 3,9% respecto al a?o anterior debido al apag¨®n nuclear y se?al¨® que revisar¨¢ el recorte del 25% de recorte al que se comprometi¨® en 2009. Aunque oficialmente esa cifra sigue vigente, es previsible que la suavice por la dificultad de sustituir la energ¨ªa nuclear por fuentes limpias. Rusia, otro de los grandes que ya ha anunciado que no seguir¨¢ en Kioto, hizo algo parecido: apuntar que su compromiso sigue abierto. La negociaci¨®n del clima languidece y en algunos casos incluso retrocede. Es probable que haya un segundo periodo del Protocolo de Kioto hasta 2020, pero cada vez con menos pa¨ªses con obligaciones.

Tras el tsunami y el posterior accidente en Fukushima, en marzo de 2011, Jap¨®n fue apagando uno a uno sus reactores en cuanto llegaban a una parada de recarga. As¨ª, en mayo pasado el pa¨ªs se qued¨® por primera vez sin nucleares, que poco m¨¢s de un a?o antes generaban el 30% de la electricidad del pa¨ªs. Solo en julio volvi¨® a conectar dos reactores, pero los 52 restante siguen parados.

Jap¨®n ha hecho una apuesta por las renovables y en julio estableci¨® un sistema de primas para fomentar las renovables. Pero a corto plazo, la energ¨ªa nuclear ha sido sustituida por gas natural y carb¨®n, algo que a su vez ha descontrolado el d¨¦ficit comercial de un pa¨ªs tradicionalmente exportador.

El ministro japon¨¦s de Medio Ambiente, Hiroyuki Nagahama, en su declaraci¨®n oficial en Doha se?al¨® inmediatamente da?o del tsunami y el posterior accidente de Fukushima: ¡°Incluso en una situaci¨®n tan dif¨ªcil el pueblo japon¨¦s no ha perdido su deseo de combatir el cambio clim¨¢tico¡±. A?adi¨® que el pa¨ªs manten¨ªa su objetivo de reducir sus emisiones un 80% en 2050 y que hace falta una ¡°revoluci¨®n energ¨¦tica¡± para que ¡°cada ciudadano japon¨¦s se convierta en un agente en el ahorro al producir y vender su propia energ¨ªa¡± (algo que, de ser cierto, puede tener una implicaciones enormes al cambiar de una generaci¨®n de electricidad centralizada a una distribuida en los hogares mediante peque?as instalaciones fotovoltaicas, por ejemplo).

Sin embargo, Nagahama eludi¨® el objetivo a medio plazo, el que se fijaron los pa¨ªses voluntariamente despu¨¦s de la cumbre de Copenhague en 2009. Entonces, Jap¨®n se comprometi¨® a reducir sus emisiones un 25% en 2020 respecto a 1990.

Las dudas no se disiparon cuando el embajador japon¨¦s para el medio ambiente, Masahiko Horie, se?al¨® ante la prensa que el objetivo sigue vigente: ¡°El Gobierno japon¨¦s no ha retirado ese objetivo e intentaremos mantenerlo¡±. Pero inmediatamente a?adi¨® que ¡°el Gobierno piensa formular un plan global contra el cambio clim¨¢tico antes de final de a?o¡±, donde estar¨¢ la meta final de emisiones.

Si el dato de emisiones de 2011 es malo el de 2012 ser¨¢ peor, porque ha sido ahora cuando se ha culminado y mantenido el apag¨®n at¨®mico en Jap¨®n. Tokio insiste en que a¨²n no puede saber si cumplir¨¢ el primer periodo de cumplimiento de Kioto ¨Cque expira a final de este a?o-. Jap¨®n estaba obligado a reducir sus emisiones un 6% en el periodo 2008-2012 respecto a 1990. Hasta ahora, el descenso es del 9,2%, pero habr¨¢ que ver el a?o 2012, cuyos datos a¨²n tardar¨¢n meses en salir, seg¨²n Horie.

Es probable que haya un segundo protocolo de Kioto, pero con menos pa¨ªses

Jap¨®n ya anunci¨® en 2010 que de ninguna manera iba a firmar un segundo periodo del Protocolo de Kioto (con lo simb¨®lico que supone que se quede fuera el pa¨ªs que alberg¨® la concepci¨®n del tratado). Y ahora ensombrece su objetivo voluntario para 2020.

A Jap¨®n se le sum¨® Rusia, el cuarto emisor del planeta, que hab¨ªa anunciado que reducir¨ªa sus emisiones un 25% en 2020 respecto a 1990. Eso en la pr¨¢ctica supon¨ªa que aumentar¨ªan respecto a lo que emite actualmente, ya que el desplome de la industria comunista ha hecho que actualmente emita entre un 30% y 35% menos que en 1990. Sin embargo, Mosc¨² volvi¨® ayer a su anterior meta: un rango de entre el 15% y el 25% de recorte, seg¨²n anunci¨® Alexander Bedritsky, el enviado especial de Putin. Rusia tampoco firmar¨¢ el segundo periodo del Protocolo de Kioto para el periodo 2012-2020.

En este, si finalmente se aprueba en Doha, solo tendr¨¢n obligaciones la UE, Australia, Noruega, Suiza y alguno m¨¢s, que representan un 15% de las emisiones totales de gases de efecto invernadero del planeta. Aun as¨ª, la comisaria Europea de Acci¨®n para el Clima, Connie Hedegaard, se?al¨® que hay muchos pa¨ªses que quieren ¡°elevar la ambici¨®n¡± para conseguir el objetivo de que el calentamiento no supere los dos grados cent¨ªgrados.