J¨®venes due?os de su destino
La Fundaci¨®n Telef¨®nica potencia la cantera nacional de emprendedores apoyando 120 proyectos sociales y culturales
Una mir¨ªada de camisetas blancas va de un lado a otro en el edificio de la Fundaci¨®n Telef¨®nica. Unos atienden a los medios, otros acaban de llegar y siguen con la mochila al hombro, otros charlan tranquilamente con otros compa?eros. En todos brilla una sonrisa y un orgullo que no se esfuerzan en esconder. Telef¨®nica va a impulsar sus proyectos, 120, con el objetivo no solo de mejorar su entorno, sino tambi¨¦n de impulsar la actitud emprendedora.
Cristina Balb¨¢s tiene 25 a?os, estudi¨® biolog¨ªa molecular y ahora est¨¢ haciendo un doctorado en el Centro Nacional de Investigaciones Oncol¨®gicas. Su proyecto consiste en acercar a los alumnos de educaci¨®n Primaria la investigaci¨®n contra el c¨¢ncer: contarles c¨®mo funciona el organismo con esta enfermedad, explicar en qu¨¦ consisten los tratamientos y dejar bien claro ¨Ccon un experimento basado en el ADN del tomate- que la investigaci¨®n es fundamental en nuestro pa¨ªs. El objetivo final es despertar pasiones por la ciencia y crear vocaciones; a corto plazo, divulgar su trabajo. Le interesa la divulgaci¨®n, cree que si la gente sabe que un f¨¢rmaco tarda en estar listo 10 a?os, la poblaci¨®n estar¨¢ m¨¢s en contra de los recortes en ciencia.
Telef¨®nica le va a dar una ayuda de 400 euros durante seis meses. No le van a sacar de pobre, pero los desplazamientos en cercan¨ªas o la elaboraci¨®n de materiales did¨¢cticos m¨¢s elaborados dejar¨¢n de ser un problema.
Por su parte, Ossian de Leyva, va a emplear casi todo ese dinero en gasolina. ?ste licenciado en Ambientales de 25 a?os vuelve a su pueblo, Molina de Arag¨®n, porque en la ciudad ya no es posible trabajar y no quiere desaprovechar toda la formaci¨®n que ha recibido. Innovar es posible tambi¨¦n en un marco rural. Su idea es recopilar un cat¨¢logo con las especies de ¨¢rboles en su zona y contar su historia mediante el contacto con los ancianos de la comarca. Proteger el medio y recuperar la identidad de su comarca son las bases de su iniciativa, que se plasmar¨¢ en un cat¨¢logo en Internet. Pero de Leyva avisa: ¡°Hay un boom del emprendimiento, hay mucha competencia de talentos y poca estabilidad de financiaci¨®n, pero hay que intentar que se podamos vivir de esto¡±.
David de San Benito es el responsable del proyecto Think big en Espa?a. Explica que los proyectos seleccionados son peque?as ideas de j¨®venes de entre 15 y 25 a?os y todos tienen un marcado car¨¢cter social, no hace falta un plan de negocio. La idea es que alrededor del 40% del total pase a la siguiente fase de financiaci¨®n, que se har¨¢ con aquellos proyectos que muestren su eficacia. San Benito explica que cada emprendedor va a contar con la ayuda de un mentor que le va a formar para maximizar las posibilidades de su iniciativa. Para la pr¨®xima edici¨®n, que arranca en marzo, se convocar¨¢n 300 ayudas.
Estos j¨®venes son especialistas en detectar peque?as necesidades y buscarle soluciones
Casi todos los proyectos tienen un componente de nuevas tecnolog¨ªas, como el de Manuel Marti?o, ingeniero de Obras P¨²blicas y estudiante de un m¨¢ster, que pretende poner en contacto a los propietarios de fincas urbanas sin edificar con personas interesadas en plantar un huerto urbano mediante una p¨¢gina web. En principio, est¨¢n operando en A Coru?a, pero su ambici¨®n es que se aprovechen esos espacios en toda Espa?a. ¡°Las nuevas tecnolog¨ªas son una herramienta muy potente para las empresas, pero no debemos olvidarnos de que hay vida m¨¢s all¨¢ de Internet¡±, defiende.
Estos j¨®venes emprendedores son especialistas en detectar peque?as necesidades y buscarles soluciones. Pronto empezar¨¢ a patrullar el Ej¨¦rcito de Dumbledore, la propuesta de Pilar Carmona, que con solo 16 a?os es una de las emprendedoras m¨¢s j¨®venes. Estudia 1? de Bachillerato en Pozuelo de Alarc¨®n. Regularmente, su instituto organiza visitas a residencias de ancianos, pero 30 personas a la vez resultan poco efectivas. La soluci¨®n de Pilar y sus amigas es sencilla: dividir a los voluntarios en patrullas que se repartan las labores de voluntariado en residencias, centros de d¨ªa y comedores sociales. ¡°Internet nos va a servir para atraer a m¨¢s gente¡±, conf¨ªa. Tambi¨¦n conf¨ªa en poder seguir adelante con el proyecto y que, quiz¨¢, un d¨ªa sea su trabajo.
Cristina, Ossian, Manuel y Pilar van a pasarse todo el fin de semana en Guadarrama, junto con el resto de sus 116 compa?eros y tutores en la jornada inaugural del proyecto. Puesta en com¨²n, creatividad, entusiasmo y lluvia de ideas, ser¨¢n la clave para estas jornadas. Los que apuestan por el emprendimiento dicen que ser¨¢n los mismos ingredientes que nos sacar¨¢n de la crisis. Habr¨¢ que verlo. Tiempo al tiempo.
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