Nuevas drogas para burlar la ley

Las drogas est¨¢n experimentando una revoluci¨®n gradual y alarmante. El Observatorio Europeo de las Drogas y Toxicoman¨ªas (OEDT) alert¨® ayer de la profusi¨®n de drogas sint¨¦ticas de nuevo cu?o, producidas a gran escala en China e India (entre otros pa¨ªses), y distribuidas luego en Europa, muchas veces a trav¨¦s de Internet. Cada semana aparece una nueva en alg¨²n pa¨ªs europeo. En concreto, 73 en 2012, casi el doble que las de 2011. Mediante peque?as variaciones en sustancias ya conocidas, los traficantes mantienen sus propiedades estupefacientes, pero, al tratarse de mol¨¦culas nuevas, consiguen un producto que a¨²n no est¨¢ en las listas de los psicoactivos prohibidos. Son sustancias m¨¢s baratas y demandadas en tiempos de crisis. En una web se puede comprar, por ejemplo, a menos de 10 euros la pastilla sustitutiva de las anfetaminas o el ¨¦xtasis o a 40 el gramo de la alternativa a la coca¨ªna, alrededor de un 20% menos que los originales, aunque a esto habr¨ªa que sumar gastos de env¨ªo; hay m¨²ltiples variedades y ofertas.

Es un cambio paso a paso. El mercado de la droga est¨¢ ya copado y orientado, con unos consumidores bastante fieles, aunque en descenso. Se trata de ofrecer anfetaminas o cannabinoides legales (o, al menos, alegales). Peque?as variantes con unos efectos similares a los de las sustancias que ya se conocen, aunque en ocasiones el experimento se va de las manos. ¡°La gente no sabe a veces lo que se est¨¢ tomando¡±, denuncia Ana Gallegos, responsable del Sistema de Alerta R¨¢pida de detecci¨®n del OEDT. Sucedi¨® con una variante de la anfetamina que caus¨® 21 muertes.

En Europa, Espa?a incluida, los estupefacientes se persiguen solo si est¨¢n registrados en la lista correspondiente, explica Julia Gonz¨¢lez, responsable del Observatorio Espa?ol sobre Drogas. Son los ¡°productos bajo fiscalizaci¨®n¡±, y el sistema funciona por medio de listas cerradas. ¡°Si algo no est¨¢ en esa lista, no es ilegal¡±, a?ade Gonz¨¢lez.

Y aqu¨ª entra la picaresca de los traficantes. De las 73 drogas artificiales detectadas en el ¨²ltimo a?o, 30 eran cannabinoides sint¨¦ticos. Otras pertenec¨ªan al grupo de las anfetaminas, indica Gonz¨¢lez, y, por ¨²ltimo, est¨¢n las sustancias a las que se encuentra un uso psicoactivo pero que tienen otra utilidad, como ha pasado recientemente con fertilizantes o sales de ba?o. El truco de los dos primeros grupos est¨¢ en que basta con cambiar un ¨¢tomo de la mol¨¦cula para que se obtenga una sustancia oficialmente distinta, y que por tanto, ya no est¨¢ en la lista de las prohibidas. ¡°Las posibilidades son, por tanto, casi infinitas¡±, dice N¨²ria Calzada, coordinadora de la ONG Energy Control. Y los fabricantes aprovechan el tiempo que pasa desde que las producen hasta que entran en las listas de sustancias prohibidas para comercializarlas.

¡°El mercado es ilegal, pero no es idiota¡±, dice Gonz¨¢lez, quien afirma que en 2012 no se detect¨® ninguna de estas nuevas sustancias en Espa?a como novedad, pero que este a?o ya han notificado una. Luego el proceso es informar al Observatorio Europeo, que lo transmite a los pa¨ªses. Tras evaluar su efecto, cada pa¨ªs debe incluirlo en su lista de sustancias fiscalizadas, pero tiene un a?o para hacerlo. Durante ese tiempo la nueva droga se desarrolla en una especie de limbo legal, ya que no est¨¢ oficialmente prohibida.

Los datos europeos no determinan cu¨¢ntas personas toman estas sustancias, ya que, adem¨¢s, muchas se venden por su nombre gen¨¦rico (anfetaminas, cannabis) o, a veces, como adulterantes de las ya conocidas. Pero, mientras se sistematiza su situaci¨®n, nadie las controla. Y, como dice Calzada, nadie encuentra en un an¨¢lisis algo que no se busca.

El a?o pasado, una nueva sustancia, denominada 5-IT o 5-2-aminopropilindol, derivada de la anfetamina, caus¨® la muerte a 21 personas en seis meses en cuatro pa¨ªses distintos: Inglaterra, Alemania, Suecia y Hungr¨ªa. De ah¨ª la cautela y el celo que los expertos emplean a la hora de describir y perseguir estas nuevas drogas. ¡°El problema es que no se sabe lo que est¨¢n tomando y tampoco, claro est¨¢, en qu¨¦ dosis: algo que en una dosis puede no ser mortal lo es en otra¡±, explica la especialista Ana Gallegos.

El caso de Marta, una madrile?a en la treintena, no es una excepci¨®n. Compr¨® una c¨¢psula de Seex. Se vend¨ªa a 10 a los amigos y a 15 a los desconocidos. ¡°Ni se me ocurre volver a pillarla. Es una puta mierda. De hecho me sobr¨® y creo que lo voy a llevar a Energy Control a que lo analicen¡±, dice. ¡°Es la antidroga, muy malrollera, desapasionada, chunga, tensa...¡±.

El estudio alerta de que el consumo de drogas ¡°es una de las principales causas de mortalidad entre j¨®venes en Europa, tanto directamente (sobredosis) como por enfermedades relacionadas, accidentes, actos de violencia o suicidios¡±. En 2011, en Europa, se registraron cerca de 6.500 casos de muerte por sobredosis. Es algo menos que en 2010. En estas muertes, en tres de cada cuatro casos, hay siempre un componente de hero¨ªna, mezclado con m¨¢s sustancias t¨®xicas. El n¨²mero va bajando porque tambi¨¦n se reduce el n¨²mero de personas que se inyectan y aumenta el de aquellos que acuden a tratamientos. De media, en Europa se producen 20 muertes por sobredosis cada mill¨®n de personas. Aunque hay pa¨ªses, como Estonia, Noruega, Finlandia o Reino Unido que est¨¢n por encima de esa media. En Espa?a, por debajo de esta media siniestra, murieron por sobredosis 390 personas en 2011, casi 50 menos que el a?o anterior.

La alegalidad permite que las sustancias sean m¨¢s baratas

En estas estad¨ªsticas no se incluyen las muertes por ingesta de drogas de ¨²ltima generaci¨®n. Por ejemplo, no est¨¢n incluidas estas 20 muertes por 5-IT. ¡°Cuando hablamos de sobredosis nos referimos a muertes por sustancias conocidas. Estas nuevas sustancias, en muchos casos, son indetectables, y a veces, nos tememos que no quedan registradas en las autopsias. Es un problema al que estamos prestando mucha atenci¨®n ahora¡±, explica Jo?o Matias, especialista en mortalidad del Observatorio de Drogas.

Esta fabricaci¨®n de nuevas sustancias se realiza sobre todo en laboratorios de India o China, que los producen a gran escala para distribuirlas luego en Europa. Y los laboratorios en los que se analiza y se detectan van por detr¨¢s de los fabricantes. Internet, adem¨¢s, se ha convertido en un eficaz medio de compra y de adquisici¨®n de estupefacientes. ¡°El mundo de las drogas se ha vuelto mucho m¨¢s din¨¢mico y complejo¡±, afirma el director del Observatorio, Wolfgang G?tz.

Las sustancias artificiales no se reparten por igual. Gonz¨¢lez, indica que al norte se env¨ªan las sustancias similares a las anfetaminas, y al sur, las de los cannabinoides, buscando al p¨²blico m¨¢s acostumbrado al original.