El hambre se cuela en el colegio
Emergen casos de ni?os con alimentaci¨®n deficiente. Un 16% de los menores vive en hogares con pobreza severa. Los pediatras avisan de los riesgos sanitarios y escolares de la malnutrici¨®n
El comisario para los Derechos Humanos del Consejo de Europa, Nils Muiznieks, visit¨® Espa?a la semana pasada y se volvi¨® a casa contrariado. Tras una estancia de cinco d¨ªas y m¨²ltiples reuniones con autoridades y responsables pol¨ªticos, ofreci¨® una rueda de prensa antes de marchar, el viernes 6 de junio, en la que dijo: ¡°He escuchado con preocupaci¨®n historias de ni?os que se desmayan en clase porque no han comido, que acuden dos y tres semanas con la misma ropa al colegio o que est¨¢n en una situaci¨®n de vulnerabilidad tras un desahucio¡±.
Ese mismo d¨ªa se daba a conocer el dato de que 2.865 escolares de Barcelona reciben una alimentaci¨®n deficiente. Tres d¨ªas antes, la Junta de Andaluc¨ªa hab¨ªa dado el pistoletazo de salida al reparto de bolsas con desayuno y merienda entre 11.000 menores. Se empezaba a hablar del problema en m¨¢s ciudades. Canarias anunciaba acciones de abasto. La crisis empezaba a mostrar una de sus caras m¨¢s feas.
El 44% de los pediatras consideran que la disminuci¨®n de ingresos de las familias est¨¢ afectando a la correcta alimentaci¨®n de los ni?os. El ¨²ltimo informe sobre la infancia de Unicef se?ala que el 16,7% de los peque?os viven en hogares que sufren pobreza severa. La crisis, el desempleo galopante y los desahucios generan un panorama en que las situaciones desesperadas emergen. Y entre sus m¨²ltiples v¨ªctimas, est¨¢n los ni?os.
Memorias de leche en polvo
La distribuci¨®n de refuerzos alimenticios en las escuelas, como la que est¨¢ llevando a cabo la Junta de Andaluc¨ªa, tiene precedentes. La primera ayuda alimenticia destinada a los ni?os espa?oles provino del plan de Ayuda Social Americana. Fue gestionado por Unicef y la distribuy¨® C¨¢ritas Espa?ola, seg¨²n se?ala un estudio del catedr¨¢tico de Historia Contempor¨¢nea Antonio Ni?o. En 1954 llegaron los primeros cargamentos de leche en polvo. Fueron m¨¢s de 300.000 toneladas, entre 1954 y 1968. ¡°A partir de 1959, con el Plan de Estabilizaci¨®n, empez¨® el desarrollo del pa¨ªs y hab¨ªa que subsanar las diferencias sociales¡±, explica Alejandro Tiana, profesor de Pol¨ªtica de la Educaci¨®n en la UNED, ¡°que es lo que pasa ahora: hay sectores de la poblaci¨®n que viven ajenos al problema y un porcentaje que vive por debajo del nivel de la pobreza¡±.
¡°En Espa?a en aquellos a?os hab¨ªa subnutrici¨®n y malnutrici¨®n muy grave¡±, indica Federico Mayor Zaragoza, presidente de la Fundaci¨®n Cultura de Paz. En el a?o 1964, el exdirector general de la Unesco era profesor de Bioqu¨ªmica en Granada e hizo un estudio sobre discapacidad intelectual infantil y malos h¨¢bitos alimenticios. Mayor Zaragoza considera intolerable que se est¨¦n dado casos de malnutrici¨®n en Espa?a.
¡°La pobreza infantil ya era grave en tiempos de bonanza¡±, dice Gabriel Gonz¨¢lez Bueno, responsable de Pol¨ªticas de Infancia de Unicef, ¡°pero ahora llega a extremos de incapacidad del hogar para asumir las necesidades b¨¢sicas, como comer¡±. Y prosigue: ¡°Si las becas comedor han bajado entre un 20% y un 30%, no nos alarmemos con los datos: esa es una de las claves para explicar lo que est¨¢ pasando¡±. Ana Lima, presidenta del Consejo General del Trabajo Social, que representa a 40.000 trabajadores sociales, tambi¨¦n se?ala que la supresi¨®n de las becas comedor es uno de los factores que ayudan a explicar la situaci¨®n. ¡°Cuando las quitaron ya sab¨ªamos que hay familias que no iban a poder dar tres comidas diarias a sus hijos¡±. Lima, con 22 a?os de experiencia como trabajadora social, asegura que desde el inicio de la crisis el incremento de la demanda de emergencia en los servicios sociales de los Ayuntamientos, que incluye la entrega de alimentos o ayudas para pagar recibos, ha crecido m¨¢s del 250%.
Son tiempos de recortes y sin embrago, la ayuda es m¨¢s necesaria que nunca. As¨ª lo se?ala una trabajadora social que pide ocultar su identidad y que trabaja en los servicios sociales de un municipio madrile?o. ¡°Llegan casos de malnutrici¨®n, vemos familias que no tienen dinero para comprar leche, huevos, carne o verdura. La situaci¨®n es de emergencia continua¡±, describe.
El diccionario de la Real Academia ayuda entender de qu¨¦ hablamos cuando hablamos de malnutrici¨®n: ¡°Condici¨®n causada por una dieta inadecuada o insuficiente, o por un defecto en el metabolismo de los alimentos¡±. Nada que ver con la desnutrici¨®n, que es un estadio mucho m¨¢s grave. Para algunos m¨¦dicos que trabajan en zonas desfavorecidas o con mucha inmigraci¨®n, la mala nutrici¨®n infantil no es una novedad. ¡°Lo ve¨ªamos en algunos ni?os extranjeros cuando llegaban aqu¨ª de sus pa¨ªses¡±, dice la pediatra Inma Sau, que trabaja en un centro de atenci¨®n primaria de Santa Coloma de Farners, un pueblo de 10.000 habitantes de la provincia de Girona con presencia de inmigrantes. Sau conoce a los ni?os (unos 1.300) que visita y sabe lo que est¨¢n pasando las familias por culpa de la crisis. ¡°Algunas madres hacen las papillas del beb¨¦ con agua porque no pueden permitirse la leche¡±, explica. De todos sus ni?os, ¡°unos 15 o 20¡± est¨¢n en situaci¨®n de riesgo o sufren problemas de malnutrici¨®n. Sau est¨¢ familiarizada con los s¨ªntomas: ¡°Si enferman demasiado, sufren frecuentes diarreas o no ganan el peso que deber¨ªan, hay un problema¡±, relata. ¡°Algunos est¨¢n hinchados pero, al hacerles unos an¨¢lisis, sale que tienen anemia. Los padres les dejan llenos con lo que pueden: pan, pasta, arroz¡±.
Las becas de comedor han bajado entre el 20% y el 30%, dice Unicef
Los pediatras consultados coinciden en que los casos de d¨¦ficit de alimentaci¨®n son todav¨ªa ¡°puntuales¡±, pero s¨ª empiezan a ser m¨¢s frecuentes los de menores que comen mal porque las familias tienen que prescindir de alimentos frescos, incluidos carne y pescado. Los precocinados y congelados que hace siete a?os llenaban los est¨®magos de los peque?os porque era lo m¨¢s r¨¢pido de preparar para unos padres que corr¨ªan de casa al trabajo, siguen siendo ahora alimentos frecuentes porque resultan m¨¢s baratos. ¡°Se est¨¢ dando la paradoja de que coexisten los ni?os que viven casi en situaci¨®n de pobreza con los ni?os que presentan obesidad por malos h¨¢bitos diet¨¦ticos. Los dos tienen problemas por mala nutrici¨®n, aunque las causas son distintas¡±, cuenta Pedro Mart¨ªn, pediatra en un centro de salud del barrio de Palmete, una zona obrera de Sevilla.
¡°Se percibe que ha bajado la calidad de los alimentos que se consumen¡±, advierte este m¨¦dico. En su consulta no se ha encontrado con casos de ni?os desnutridos, pero s¨ª alg¨²n padre apurado pidiendo muestras de leche de un laboratorio para alimentar a un beb¨¦ o que admite haber cambiado las marcas de leche de las farmacias por las de los supermercados, que son m¨¢s econ¨®micas.
Si los padres no piden ayuda, los pediatras advierten de que no es f¨¢cil detectar estos casos. ¡°Nadie lleva a su hijo al centro de salud porque no desayune¡±, se?ala Jaume Dalmau, coordinador del comit¨¦ de nutrici¨®n de la Asociaci¨®n Espa?ola de Pediatr¨ªa (AEP). Pero hay s¨ªntomas que pueden encender las alertas de profesores o m¨¦dicos: ni?os con poca energ¨ªa, alica¨ªdos, con dificultades para atender en clase o que encadenan resfriados e infecciones. ¡°Puede ser consecuencia directa de falta de hierro o de prote¨ªnas¡±, se?ala el coordinador de nutrici¨®n de la AEP.
La falta de hierro o de prote¨ªnas puede provocar dificultad de atenci¨®n en clase
Una dieta incompleta, explican los m¨¦dicos, puede tener efectos futuros si las carencias se sufrieron, sobre todo, en los dos o tres primeros a?os de vida del ni?o. ¡°Pero para que influya en el crecimiento, por ejemplo, tiene que haber un d¨¦ficit de calor¨ªas y prote¨ªnas muy agudo. De momento no parece que eso est¨¦ ocurriendo¡±, aclara Dalmau. En la edad infantil, a partir de los cuatro o cinco a?os, la mala alimentaci¨®n influye, sobre todo, en el rendimiento escolar.
Desde hace dos semanas, el hijo de Vanesa Arias llega a casa desde el colegio con una bolsa cargada con una pieza de fruta, un batido o un zumo, un paquete de galletas, una o dos piezas de pan, y un d¨ªa s¨ª y uno no, un par de tipos de chacina, sobre todo chorizo y pechuga de pavo. Los d¨ªas que no hay chacina, la bolsa incluye un tarrito con tomate triturado y otro con aceite. El ni?o, que tiene siete a?os y padece s¨ªndrome de Down, es uno de los 11.000 beneficiarios del plan puesto en marcha por la Junta de Andaluc¨ªa para garantizar tres comidas al d¨ªa a 11.000 menores de familias en riesgo de exclusi¨®n social. Los ni?os tienen servicio gratuito de comedor y en las bolsas llevan la merienda para la tarde y el desayuno del d¨ªa siguiente. ¡°Para m¨ª es una ayuda importante. Con eso le doy al ni?o el desayuno y la cena¡±, cuenta Vanesa, que vive en la corrala La Utop¨ªa, un edificio de Sevilla propiedad de Ibercaja ocupado desde hace un a?o por 36 familias, la mayor¨ªa desahuciadas de su anterior vivienda. ¡°Mi marido y yo recogemos chatarra y con eso vamos tirando¡±.
Juan y ?ngela, un matrimonio de treinta?eros que vive en la barriada de Antonio D¨ªaz, una zona desfavorecida en las faldas del castillo de Santa Catalina de Ja¨¦n, admiten que las tres comidas que les da la Junta a sus hijos les est¨¢ salvando el d¨ªa a d¨ªa. Tambi¨¦n viven de recoger chatarra.
Tres de los cuatro hijos de Juan ¡ªel otro a¨²n no est¨¢ escolarizado¡ª se benefician del nuevo plan andaluz. El almuerzo del mediod¨ªa en el comedor del colegio, es, por regla general, la ¨²nica comida caliente que hacen al d¨ªa sus ni?os, que ahora tambi¨¦n traen a casa el bocadillo para la merienda y el desayuno.
Cruz Roja va a poner en marcha el plan de emergencia de alimentaci¨®n
Aunque todav¨ªa no hay datos sobre la magnitud del problema, algunas cifras han emergido en las ¨²ltimas semanas. En Barcelona, por ejemplo, hay 2.800 ni?os que presentan ¡°indicios de alimentaci¨®n inadecuada o ineficiente¡±, seg¨²n cifras del Ayuntamiento. El consistorio pidi¨® a los colegios de la ciudad que hicieran un esfuerzo extra por detectar casos de alumnos ¡°con dificultades para cubrir su alimentaci¨®n¡±, comenta ?ngels Canals, gerente del Instituto de Servicios Sociales. Las cifras no hablan de un problema de salud, puesto que la detecci¨®n no la han realizado m¨¦dicos ni especialistas en salud p¨²blica, sino los propios profesores junto con los servicios sociales. Hay ni?os que han entrado en la lista porque sus padres no pagan la cuota del comedor, otros que ¡°manifiestan que tienen hambre¡± y otros que proceden de entornos en riesgo de exclusi¨®n. El consistorio detect¨® que de los 2.865 chavales malnutridos, 703 no recib¨ªan suficiente ayuda, por lo que les ha otorgado distintas prestaciones: les paga parte del comedor ¡ªlas becas solo cubren la mitad del coste del men¨², un m¨¢ximo de 6,2 euros diarios¡ª o concede una ayuda en met¨¢lico a las familias. Santa Coloma de Gramenet tambi¨¦n ha anunciado que destinar¨¢ 1,8 millones para pagar el comedor escolar a 2.300 alumnos de la ciudad. En Valencia, los directores de los colegios dicen que cada vez notan m¨¢s casos de menores con grandes carencias pero no saben cuantificar el n¨²mero de ni?os malnutridos. La Diputaci¨®n de Valencia aprob¨® el pasado 12 de junio una inversi¨®n de medio mill¨®n de euros para mantener las becas comedor durante los meses de verano.
¡°Hace mucho tiempo que en casa no tenemos un filete de ternera o pescado para comer¡±, cuenta Llu?sa Alarc¨®n, barcelonesa de 44 a?os. Esta madre de cuatro hijos est¨¢ preocupada porque con los 600 euros que gana no tiene ni para un cart¨®n de leche. La Cruz Roja subvenciona las becas de comedor de dos de sus hijos y, cada dos semanas, le dan una cesta de alimentos b¨¢sicos. ¡°En los ¨²ltimos dos a?os que recibimos ayuda de los bancos de alimentos, los ni?os han engordado mucho porque es verdad que no tienen una alimentaci¨®n equilibrada. El ¨²nico pescado que ven es el at¨²n y las sardinas enlatadas y de fruta, solo pi?a o melocot¨®n, tambi¨¦n en lata y con alm¨ªbar, que engordan mucho m¨¢s¡±.
Cruz Roja reforzar¨¢ su campa?a alimentaria durante el verano con la puesta en marcha de un plan de emergencia de alimentaci¨®n infantil. La entidad subvencionar¨¢ con 22 euros a la semana la compra de alimentos para las familias de los ni?os becados por la entidad. Un portavoz de la secretar¨ªa de Estado de Servicios Sociales e Igualdad se?ala que en el reparto de los 211 millones recaudados v¨ªa del IRPF para fines sociales, se dar¨¢ prioridad a la ayuda a familias vulnerables.
La Junta de Andaluc¨ªa reparte bolsas de merienda y desayuno
La falta de variedad y el escaso consumo de productos perecederos son problemas con los que se encuentran, a menudo, los profesionales que trabajan con ni?os de familias pobres. La entidad que dirige Ignasi Sagal¨¨s (Asociaci¨®n Educativa Integral del Raval) trabaja en el coraz¨®n del barrio antiguo de Barcelona, una zona desfavorecida y con muchos inmigrantes (47% censados). En los centros abiertos que gestionan y donde dan de merendar a ni?os que en su casa no podr¨ªan hacerlo, han detectado que hay peque?os ¡°que comen mucho, pero solo alimentos muy cal¨®ricos y con mucha grasa¡±, cuenta Sagal¨¨s.
Las organizaciones caritativas tambi¨¦n se est¨¢n encontrando de frente con el problema de la mala nutrici¨®n. ¡°Hay una necesidad real¡±, dice Juli¨¢n Cabezas, que lleva 25 a?os en Aldeas Infantiles. ¡°En los ¨²ltimos tres a?os la situaci¨®n se ha agravado¡±, se?ala Eva Alonso, secretaria general de C¨¢ritas Toledo, que lleva 20 a?os en el puesto. Y se?ala que el perfil de los que acuden a C¨¢ritas en Toledo ha cambiado. Antes se trataba, fundamentalmente, de inmigrantes. Ahora, la poblaci¨®n inmigrante es un 40% de los que acuden en busca de ayuda.
Con informaci¨®n de Gin¨¦s Donaire, Pilar Almenar y Jessica Mouzo.
N¨²meros de salud y pobreza
El 55% de los pediatras estima que la disminuci¨®n de ingresos de las familias est¨¢ afectando a la salud de los ni?os. Casi uno de cada cuatro encuestados consideran que est¨¢ afectando "bastante" o "mucho".
El 44% cree que la crisis implica que se est¨¢n incumpliendo los consejos sobre alimentaci¨®n infantil.
En las conclusiones de la encuesta, la Asociaci¨®n Espa?ola de Pediatr¨ªa ya advert¨ªa de que los recortes pueden generar un repunte de enfermedades infecciosas y deficiencias nutricionales a corto y largo plazo.
El 84% de los pediatras constata un aumento de los problemas de salud mental en las familias derivados de la crisis, como ansiedad, depresi¨®n o adicciones. Y el 80% cree que esta circunstancia est¨¢ influyendo en los ni?os.
En Espa?a, 2,2 millones de ni?os viven en hogares que est¨¢n por debajo del umbral de la pobreza. Es el 29,8% de la poblaci¨®n menor de 18 a?os.
El ¨²ltimo Eurostat (2013) ampl¨ªa el porcentaje de menores en riesgo de pobreza al 30,6%. La cifra es superior a la media europea (27%) y similar a la de Grecia, Italia o Lituania.
El 16,7% de los ni?os vive en hogares que sufre pobreza severa.
En el hogar, la falta de ingresos o su reducci¨®n se puede constatar en un empeoramiento de la calidad de la alimentaci¨®n (relacionada con el menor consumo de productos frescos) y de las condiciones del hogar (hacinamiento, fr¨ªo en la vivienda, etc¨¦tera). Tambi¨¦n afecta a la calidad de la convivencia y a las relaciones entre padres hijos.
Fuentes: Encuesta realizada el a?o pasado por la Asociaci¨®n Espa?ola de Pediatr¨ªa, que representa a m¨¢s de 9.000 pediatras. Se hicieron 1.058 encuestas (uno de cada diez asociados). Realizada entre julio y septiembre de 2012. Informe de Unicef sobre la Infancia en Espa?a 2012 / 2013.
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