Abejas para detectar metal

Dos colmenas con 40.000 abejas mel¨ªferas y un an¨¢lisis del material biol¨®gico (n¨¦ctar y polen) que recolectan en su devenir de flor en flor han sido suficientes para saber que el terreno donde la empresa Asturgold quiere reabrir la mina de oro Salave, en el concejo de Tapia de Casariego (Asturias), no est¨¢ contaminado.

La idea parti¨® de la ONG Fondo para la Protecci¨®n de Animales Salvajes (Fapas). ¡°Es un mecanismo sencillo, r¨¢pido, natural y eficaz¡±, describe Roberto Hartas¨¢nchez, su director. Y barato. La anal¨ªtica completa, que determina partes por trill¨®n de part¨ªculas de metales pesados, ha costado 300 euros. As¨ª se ha obtenido una muestra que se utilizar¨¢ de patr¨®n para comparar con an¨¢lisis posteriores, en el caso de que la mina se ponga en marcha, y evaluar posibles afecciones al territorio, de gran valor medioambiental y paisaj¨ªstico.

Asturgold plante¨® a Fapas si era factible encontrar modelos de conservaci¨®n de la biodiversidad para su mina. Quiz¨¢ en un intento m¨¢s de contener el reguero de cr¨ªticas que ha levantado entre parte de la poblaci¨®n la posible puesta en marcha del yacimiento aur¨ªfero, que lo considera una actividad muy contaminante. Fapas pens¨® que ser¨ªa una buena oportunidad de que Asturias tuviera por fin una mina que considerara aspectos ambientales. ¡°Porque tenemos ejemplos terror¨ªficos como los yacimientos de carb¨®n¡±, explica Hartas¨¢nchez.

Con la ayuda de las laboriosas obreras, se han estudiado los niveles de litio, molibdeno, plata y de metales pesados como aluminio, antimonio, ars¨¦nico, bario, berilio, boro, cadmio, cobalto, cobre, cromo, esta?o, estroncio, hierro, manganeso, mercurio, n¨ªquel, plomo, selenio, titanio, vanadio y zinc. ¡°Son elementos que est¨¢n presentes en el medio natural y ahora sabemos que en esta zona est¨¢n dentro de los valores normales¡±, explica.

En julio del a?o pasado, Fapas instal¨® dos colmenas en la parcela de trabajo. Ambas proceden de n¨²cleos reproducidos con nuevas reinas y sin miel, para garantizar que toda la que fabriquen procede del ¨¢rea de estudio. Se estima que los insectos recogen el n¨¦ctar de las flores que se encuentran hasta a cinco kil¨®metros de distancia. Para que la garant¨ªa fuera absoluta, Fapas tom¨® como referencia una distancia de 3.000 metros en torno a las colmenas, lo que supone una superficie m¨ªnima de unos 28 kil¨®metros cuadrados.

Dos meses despu¨¦s, en septiembre, se introdujeron en los habit¨¢culos cajones para recoger el polen. Hartas¨¢nchez explica que esperaron al oto?o para aprovechar la floraci¨®n de esa ¨¦poca que en la zona es m¨¢s homog¨¦nea que la de primavera. ¡°As¨ª evit¨¢bamos que las abejas acudieran solo a la parte que hubiera florecido, porque se nos habr¨ªa escapado el resto del terreno¡±, explica. Como las plantas obtienen los nutrientes del suelo, si este se encuentra contaminado se refleja de forma proporcional en las flores. Con este m¨¦todo tambi¨¦n se detecta la contaminaci¨®n a¨¦rea.

Las colmenas y las abejas contin¨²an en Tapia de Casariego, y la intenci¨®n de Asturgold es que la iniciativa perdure en el tiempo. La empresa recuerda no es el ¨²nico control del que disponen. ¡°Se ha establecido un programa de vigilancia ambiental que tiene que autorizar la Administraci¨®n. Este plan, que se ha complementado con el m¨¦todo pionero de las abejas, cubre aguas, aire y ruidos¡±, indican por escrito.

La apertura del yacimiento, uno de los dep¨®sitos de oro sin explotar m¨¢s grandes de Europa Occidental en el que ya trabajaron los romanos, obtuvo una evaluaci¨®n de impacto ambiental favorable en diciembre pasado, menos para la planta de tratamiento y el dep¨®sito de lodos y est¨¦riles. La empresa asegura tambi¨¦n que el proceso de cianuro lo har¨ªan fuera de Espa?a. Mientras se decide si el yacimiento se abre o no, el ej¨¦rcito de abejas, ajeno a la pol¨¦mica, seguir¨¢ informando puntualmente.