Per¨² estudia si permite la explotaci¨®n gas¨ªstica en una reserva ind¨ªgena

La reserva ind¨ªgena Kugapakori, Nahua, Nanti es objeto de debate y de posiciones enfrentadas en Per¨². Mientras un par de entidades exigen proteger la vida e integridad de estas poblaciones vulnerables, como establece la ley, otras tres aprueban nuevas actividades de exploraci¨®n s¨ªsmica y perforaci¨®n de pozos en el Lote 88 del complejo gas¨ªfero de Camisea, que abarca un 23% de la reserva.

Per¨² enfrenta el dilema de cuidar de poblaciones que ya fueron arrasados por las olas del caucho, la madera y las primeras exploraciones de Schell en los a?os 80. La promesa del presidente Ollanta Humala de gas barato colisiona, en este caso, con quienes esperan que el Estado respete a los vulnerables, dada la poca capacidad de la burocracia de fiscalizar los protocolos de las empresas. ¡°Estas nuevas exploraciones son muy importantes porque del Lote 88 justamente proviene el gas para el consumo local y tiene un precio regulado¡±, ha dicho el ministro de Energ¨ªa y Minas, Jorge Merino.

La zona, en la selva de Cusco -departamento del sur del pa¨ªs- surgi¨® como reserva del Estado en 1990. En el a?o 2003 se elev¨® el nivel de protecci¨®n design¨¢ndola reserva territorial para estas tres etnias a ra¨ªz de los perjuicios causados a esos pueblos durante el inicio de las operaciones gas¨ªsticas. Las nuevas operaciones previstas por Pluspetrol en el Lote 88 se intersectan tambi¨¦n con la zona de amortiguamiento del Parque Nacional del Manu, una reserva medioambiental. La concesi¨®n del Lote 88 fue otorgada en el 2000 al Consorcio Camisea, que integra Pluspetrol y que busca la aprobaci¨®n del estudio de impacto ambiental. La reserva ind¨ªgena tiene m¨¢s de 456.000 hect¨¢reas.

Camisea, a 430 kil¨®metros al este de Lima, es el principal complejo gas¨ªfero del pa¨ªs y se estima que tambi¨¦n tiene las mayores reservas. ¡°El factor de ¨¦xito geol¨®gico es mayor en esta zona comparando con otras ¨¢reas en Per¨²¡±, explica Daniel Guerra, jefe de relaciones institucionales de Pluspetrol en sus oficinas de Lima.

El estudio de impacto ambiental (EIA) de la exploraci¨®n s¨ªsmica -mediante detonaci¨®n debajo de la superficie- y la perforaci¨®n de pozos debe recibir cuatro opiniones vinculantes. Hasta la fecha ha pasado por tres rondas de observaciones del Ministerio de Energ¨ªa y Minas, que la empresa ha subsanado, seg¨²n Nelson Soto, gerente de medio ambiente de Pluspetrol. En julio, el Servicio Nacional de ?reas Naturales Protegidas (Sernanp) emiti¨® una opini¨®n t¨¦cnica en la que cuestionaba varios aspectos de la operaci¨®n, pero al d¨ªa siguiente la entidad aclar¨® que envi¨® ese documento por error y lo reemplaz¨® por una nueva versi¨®n positiva.

El viceministerio de Interculturalidad tambi¨¦n emiti¨® el mes pasado una opini¨®n t¨¦cnica que indicaba los severos da?os que podr¨ªa producir la operaci¨®n a los pueblos ind¨ªgenas, lo cual impedir¨ªa la aprobaci¨®n del documento y la demora del proyecto. Sin embargo, a los pocos d¨ªas, por instrucciones del Ejecutivo la entidad retir¨® su informe que conten¨ªa 83 observaciones a los planes de la empresa. Interculturalidad, que es el responsable de velar por la existencia e integridad de los pueblos en aislamiento y en contacto inicial, debe emitir nuevamente un informe que apruebe o no el estudio presentado por Pluspetrol.

La ampliaci¨®n de actividades en las ¨¢reas donde vive el pueblo kirineri en aislamiento y el nahua en contacto inicial ¡°conllevan un impacto de cr¨ªtico a severo en la salud de dichas poblaciones¡±, recuerda la antrop¨®loga peruana Beatriz Huerta, una de las pocas investigadoras de campo de estos pueblos de la Amazon¨ªa. La experta tambi¨¦n destaca que el documento de Interculturalidad alude a impactos severos y moderados en la caza, pesca y recolecci¨®n. ¡°El riesgo es muy grande, puede causar extinci¨®n. En el norte pueden afectar territorio de nahuas en aislamiento voluntario que pescan en Serjali. Por otro lado, quienes est¨¢n en contacto inicial son vulnerables no solo inmunol¨®gicamente, sino que no conocen ese medio con el que se relacionan y pueden tomar decisiones que no les convienen¡±, a?ade.

Durante la entrevista, Huerta muestra en un mapa, un ¨¢rea amarilla de poblaci¨®n en aislamiento kirineri. Sin embargo, los representantes de Pluspetrol no reconocen la existencia de estas personas. ¡°En los ¨²ltimos cinco a?os no hay evidencia directa, solo evidencias de huellas de paso¡±, asegura Nelson Soto. ?Y eso no significa que est¨¢n cerca?, se le consulta. El funcionario responde que no: ¡°No sabemos qui¨¦nes son, podr¨ªan ser personas de las comunidades nativas o de contacto inicial que entran a la reserva¡±. Los representantes de la empresa agregan que sus trabajadores entran con vig¨ªas que hablan las lenguas nativas y que si ocurriera un encuentro con poblaci¨®n en aislamiento pueden disponer el retiro de la cuadrilla.

El Defensor del Pueblo, Eduardo Vega, envi¨® una carta al primer ministro Juan Jim¨¦nez para solicitar que el Poder Ejecutivo ¡°cumpla con establecer y proteger las reservas ind¨ªgenas¡± e implemente un plan nacional para ello". El documento pide que se tomen en cuenta las observaciones del Ministerio de Interculturalidad y que dos entidades p¨²blicas garanticen el cumplimiento del estudio de impacto ambiental y la protecci¨®n de estos grupos vulnerables. El primer ministro ha reaccionado indicando que el proyecto sigue con normalidad.

En julio, dos dirigentes de la comunidad Santa Rosa de Serjali, una de las comunidades beneficiarias de la reserva Kugapakori, Nahua, Nanti, escribieron una carta al viceministerio de Interculturalidad quej¨¢ndose del ¡°abandono y olvido¡± en que se encuentran y de la propagaci¨®n de tuberculosis, que no ha sido atendida. Tambi¨¦n expresaron su rechazo a la ampliaci¨®n de las actividades de Camisea. ¡°No vamos a pronunciarnos sobre declaraciones de terceros¡±, dijo Daniel Guerra sobre esta comunicaci¨®n.

Soto, de Pluspetrol, conf¨ªa en que los protocolos de vacunaci¨®n de sus trabajadores -los 28 o 30 vig¨ªas biling¨¹es para 490 hect¨¢reas de operaciones-, las compensaciones que han ofrecido por afectar la vida de estas poblaciones y el ingreso a la zona solo por helic¨®ptero ser¨¢n algunas de las garant¨ªas para recibir el visto bueno.?