La ca¨ªda de Canal 9 sit¨²a a las auton¨®micas en una encrucijada

El apag¨®n de Canal 9 ha puesto en la encrucijada el modelo auton¨®mico de televisi¨®n. El presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio Gonz¨¢lez, lo dej¨® este mi¨¦rcoles muy claro, cuando amenaz¨® con que no le temblar¨¢ el pulso y cerrar¨¢ Telemadrid si el Supremo declara nulo ¡ªcomo ha hecho el Tribunal Superior de Justicia de Valencia¡ª el expediente de regulaci¨®n de empleo (ERE) que ha causado la salida de m¨¢s 800 trabajadores del ente p¨²blico regional. Gonz¨¢lez asegur¨® que no tendr¨¢ m¨¢s alternativa que hacerlo si los sindicatos ¡°lo hacen inviable¡± y la cadena sigue siendo deficitaria. El resto de cadenas auton¨®micas vive tambi¨¦n una situaci¨®n cr¨ªtica pero cuentan con un respaldo pol¨ªtico que, de momento, les permite mantenerse. Eso s¨ª, con fuertes reestructuraciones.

El presidente valenciano, Alberto Fabra, comunic¨® a La Moncloa el martes sus planes para cerrar Canal 9. Nadie le fren¨® en su decisi¨®n. El Gobierno de Rajoy ha dejado claro que no mover¨¢ un dedo para impedir que otros puedan seguir los pasos del l¨ªder valenciano. Este es un asunto especialmente delicado y el Ejecutivo se cuida mucho de mostrarse abiertamente a favor del cierre. Oficialmente se dice solo que el Gobierno respeta las decisiones de los presidentes auton¨®micos en su intento de cumplir los compromisos de d¨¦ficit. Sin embargo, Rajoy lleva a?os repitiendo en su entorno de confianza que a ¨¦l le parece un derroche la proliferaci¨®n de televisiones p¨²blicas en Espa?a.

La Generalitat de Catalu?a asumi¨® la deuda de 1.000 millones de TV3

Hasta ahora, muchas televisiones han recurrido un a?o tras otro a aportaciones extraordinarias de sus respectivos Parlamentos para terminar los ejercicios. Pero el cambio de la legislaci¨®n audiovisual en 2012, que abre la puerta a la privatizaci¨®n y proh¨ªbe tajantemente el endeudamiento, ha obligado a todos los entes a acometer ajustes de gran calado. ¡°Nosotros solo podemos mantener medios de comunicaci¨®n p¨²blica, tal y como dice la ley, si no son deficitarios, y eso es lo que pretendemos hacer¡±, explic¨® ayer Gonz¨¢lez. Para este a?o, el ente regional cuenta con un presupuesto de 86 millones de euros, de los que 70,9 corresponden a aportaciones de la comunidad y el resto a ingresos comerciales. Para el a?o pr¨®ximo, la subvenci¨®n, a trav¨¦s del contrato programa, bajar¨¢ a 69,9 millones (de un gasto total de 72,6).

Con esta rebaja, Telemadrid asegura que es la televisi¨®n p¨²blica m¨¢s barata de Espa?a (10,7 euros por habitante y a?o). Pero si el Supremo mantiene la sentencia del TSJM, que declar¨® improcedente el ERE, el ente tendr¨ªa que desembolsar unos 22 millones extra. La posibilidad de que los trabajadores sean readmitidos no se contempla. Si el fallo es favorable a los empleados, Telemadrid estar¨ªa condenada a seguir los mismos pasos que Canal 9.

El resto de las auton¨®micas no temen por su futuro inmediato. Han menguado de tama?o para poder sobrevivir y cuentan con el respaldo institucional (y econ¨®mico) de los respectivos Parlamentos.

Todas las compa?¨ªas, desde la modesta televisi¨®n asturiana hasta la gigantesca catalana, se han ajustado el cintur¨®n en los ¨²ltimos a?os. En 2010, por ejemplo, la Corporaci¨®n Catalana de Medios Audiovisuales ten¨ªa un presupuesto de 456 millones de euros y para este a?o se ha reducido a 295. Su presidente, Brauli Duart, asegura que en Catalu?a ning¨²n Gobierno ha puesto en duda el actual modelo de medios de comunicaci¨®n. ¡°Nos han pedido que nos ajustemos a la realidad. Desde hace dos a?os estamos tomando medidas para garantizar la viabilidad de un proyecto que consideramos necesario como medio de proximidad y para reforzar la lengua¡±. En este tiempo, TV-3 ha renegociado con las productoras y ha cerrado un canal de televisi¨®n, fusionado dos y pasado a Internet la emisora internacional. Adem¨¢s, ha abordado un plan, consensuado con los sindicatos, para adelgazar en un 10% una plantilla que en septiembre de este a?o era de 2.544 trabajadores.

Feij¨®o respald¨® ayer sin fisuras la existencia de entes de las autonom¨ªas

Tambi¨¦n televisiones de menos dimensi¨®n defienden su papel como elemento integrador de la poblaci¨®n. ¡°Asturias tiene una zona rural amplia y atomizada. Nosotros no contamos con una lengua cooficial, pero la televisi¨®n permite que la informaci¨®n llegue igual a los ciudadanos de los pueblos y a los de la ciudad¡±, dice un dirigente de la televisi¨®n del Principado, que estuvo al borde de la extinci¨®n en la etapa de Gobierno del Foro Asturias, liderado por Francisco ?lvarez Cascos. El Ejecutivo dej¨® de transferir los fondos (11 millones de euros) que deb¨ªa recibir el ente y eso provoc¨® una grave crisis en la televisi¨®n regional y en el propio Gobierno. Ahora, se mantiene con un presupuesto de 23 millones, uno de los m¨¢s bajos de la Forta. Cascos admiti¨® m¨¢s tarde que hab¨ªa equivocado su estrategia pol¨ªtica, porque la gente percib¨ªa la televisi¨®n como algo propio.

Otros presidentes, como el gallego Alberto N¨²?ez Feij¨®o, respaldan sin fisuras la existencia de medios p¨²blicos auton¨®micos. TVG est¨¢ saneada y tiene audiencia, como Arag¨®n TV, que en octubre fue la m¨¢s vista. La andaluza Susana D¨ªaz tambi¨¦n ha defendido Canal Sur y ha destacado la diferencia entre la deuda de Canal 9, que ronda los 1.200 millones de euros, frente a los 80 de Canal Sur.

Distinta es la posici¨®n que ha mantenido Mar¨ªa Dolores de Cospedal, quien ha insistido en su voluntad de vender la televisi¨®n de Castilla-La Mancha si encuentra un comprador. El presidente de Murcia, Ram¨®n Luis Valc¨¢rcel, no se ha atrevido a cerrar el canal regional, aunque ahora emite una programaci¨®n de muy bajo coste.

La Forta defendi¨® ayer estos peque?os espacios propios frente a ¡°la masiva presi¨®n de los medios globales¡± y abog¨® por mantener el objetivo de ¡°servicio al ciudadano en todos y cada uno de los miembros de la federaci¨®n¡±. En un comunicado que no fue suscrito por Telemadrid, la Forta confi¨® en que ¡°el proceso en el que est¨¢ inmersa actualmente la RTVV desemboque en una soluci¨®n satisfactoria, basada en un modelo sostenible, que mantenga su esp¨ªritu y su misi¨®n como servicio p¨²blico¡±.