Las c¨¢rceles son los psiqui¨¢tricos de Estados Unidos
Hace cuatro a?os hab¨ªa tres veces m¨¢s poblaci¨®n con alg¨²n trastorno en prisi¨®n que en el hospital, ahora, son 10 veces m¨¢s, seg¨²n un informe nacional
El aumento de los enfermos psiqui¨¢tricos en las c¨¢rceles de Estados Unidos ha sido continuo en las ¨²ltimas d¨¦cadas, desde el cierre de cientos de hospitales en los a?os setenta, medida que comenz¨® bajo la presidencia de Jimmy Carter y que se justific¨® por la falta de presupuesto. La situaci¨®n ha ido dejando a muchos de los pacientes abandonados, deambulando por las calles, sin casa, sin tratamiento y sin empleo, convirti¨¦ndose en diana f¨¢cil para terminar en prisi¨®n. Pero la subida del n¨²mero de reclusos con alguna enfermedad mental ha sido alarmante en los ¨²ltimos cuatro a?os.
Si en 2010, hab¨ªa tres veces m¨¢s poblaci¨®n con este tipo de enfermedades en las c¨¢rceles que en los hospitales, ahora, en 2014, son 10 veces m¨¢s los enfermos mentales que llenan las celdas del pa¨ªs que los que son atendidos en centros m¨¦dicos especializados, seg¨²n revela un informe nacional. Aproximadamente, el 5% de la poblaci¨®n total estadounidense padece alguna enfermedad mental grave, seg¨²n un informe elaborado por el Departamento de Salud de EE UU.
Se estima que las prisiones y c¨¢rceles acogen a 356.268 enfermos mentales, mientras que los hospitales psiqui¨¢tricos atienden a 35.000, seg¨²n concluye el informe, denominado Treatment of Persons with Mental Illness in Prisons and Jails: A State Survey (Tratamiento de Personas con Enfermedad Mental en c¨¢rceles y prisiones: un estudio estatal) y elaborado por Treatment Advocacy Center, grupo que promueve el acceso al tratamiento psiqui¨¢trico a nivel nacional y que est¨¢ ubicado en Arlington (Virginia), y la National Sheriffs Association.
¡°Hoy en 44 Estados de EE UU, la gente que padece una enfermedad psiqui¨¢trica vive en las c¨¢rceles o prisiones¡±, explica el estudio, que revisa las pol¨ªticas correctivas para el tratamiento de enfermedades mentales en los Estados y condados del pa¨ªs. Seg¨²n sus conclusiones, este tipo de tratamiento no es accesible y los reclusos abandonan la c¨¢rcel m¨¢s enfermos que cuando entraron, entre otras razones, ¡°por el excesivo uso de las celdas de aislamiento¡±.
Como ejemplo, en las prisiones del Distrito de Columbia se dan muchos suicidios, contin¨²a el informe, ¡°a pesar de los esfuerzos de la ciudad por mejorar sus servicios¡±. ¡°La calidad del tratamiento psiqui¨¢trico es mediocre, debido al excesivo n¨²mero de personas con este tipo de enfermedades sin hogar y al gran n¨²mero de reclusos que las padecen¡±. En Virginia, la prisi¨®n m¨¢s grande estatal que acoge a 3.006 reclusos, cerca de un 15% -451 reclusos- sufre un trastorno mental.
Las c¨¢rceles definen la enfermedad mental por el hecho de que un prisionero requiera medicaci¨®n por presentar problemas que ¡°pueden variar, desde la depresi¨®n, hasta el padecimiento de esquizofrenia -alteraci¨®n grave de la percepci¨®n y descripci¨®n de la realidad-, o trastorno bipolar, tambi¨¦n conocido como enfermedad man¨ªaco-depresiva, y que se caracteriza por experimentar cambios de ¨¢nimo inusuales, seg¨²n la definen los Institutos Nacionales de Salud (NIH)¡±. Pero en la misma categor¨ªa tambi¨¦n se incluye a aquellos reclusos con problemas de comportamiento, tanto consigo mismos como con los dem¨¢s.
Los expertos en salud mental, informa The Washington Post, aseguran que las c¨¢rceles no est¨¢n provistas ni del equipo ni de los recursos necesarios para tratar las enfermedades mentales, a pesar de que muchos de los que los padecen acaben ¡°entre rejas¡±. ¡°El mayor problema es que las comunidades no cuentan con las herramientas necesarias para cuidar a estos enfermos¡±. Por su parte, un portavoz de prisiones, JoEllen Smith, asegura que ofrecen a estos reclusos los recursos necesarios.
Aunque el problema no se refiere solo a aquellos que est¨¢n internos en las c¨¢rceles, sino tambi¨¦n a aquellos que habiendo cumplido su condena, salen de nuevo a las calles, sin casa, sin empleo y sin nadie que les proporcione tratamiento. ¡°Un c¨ªrculo vicioso que requiere m¨¢s atenci¨®n por parte del Gobierno¡±, solicitaban hace varios meses diversas asociaciones en NPR.
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