La Iglesia pide derogar la norma de aborto terap¨¦utico en Per¨²
Luego de 90 a?os, el Estado aprob¨® un protocolo para el procedimiento cuando la vida de la madre peligra, pero los jerarcas cat¨®licos la rechazan
Mientras este martes en Ginebra el Comit¨¦ de Naciones Unidas para la eliminaci¨®n de la Discriminaci¨®n de la mujer (CEDAW, sigla en ingl¨¦s) salud¨® al Estado peruano por la reciente aprobaci¨®n ¡ªel ¨²ltimo s¨¢bado ¡ª del protocolo para el aborto terap¨¦utico, contin¨²an las cr¨ªticas del arzobispo de Lima, Juan Luis Cipriani, quien pide la derogatoria de dicha norma, y de la Conferencia Episcopal que sostiene que la norma ¡°abre las puertas al aborto por primera vez en la historia del Per¨²¡±.
En Per¨², el C¨®digo Penal de 1924 autoriza el aborto terap¨¦utico, es decir, la interrupci¨®n del embarazo cuando est¨¢ en riesgo la vida de la madre o para evitar un mal grave y permanente. Sin embargo, ante la falta de un protocolo que estandarice el procedimiento, en algunos establecimientos esta opci¨®n era denegada por temor a posibles incriminaciones, dada la falta de un procedimiento regulado por el ministerio de Salud. De m¨¢s de 100 hospitales, solo 15 ten¨ªan su propio protocolo, precis¨® la ministra de la Mujer, Carmen Omonte, a la prensa.
Seg¨²n la Encuesta Demogr¨¢fica y de Salud Familiar de 2012, el aborto es la tercera causa de muerte materna en Per¨², con un 17% de los casos: 93 mujeres fallecen por cada 100.000 nacidos vivos. Un reporte de la Federaci¨®n Latinoamericana de Asociaciones de Obstetricia y Ginecolog¨ªa (FLASOG) indic¨® en 2008 que cada a?o se realizan 400.000 abortos, la mayor¨ªa clandestinos.
Aunque durante el gobierno del presidente Alejandro Toledo, en 2005 el ministerio de Salud ya hab¨ªa elaborado una gu¨ªa para el aborto terap¨¦utico, el entonces primer ministro, el m¨¦dico Luis Solari, impidi¨® su aprobaci¨®n. Solari es un portavoz de los cat¨®licos m¨¢s conservadores en Per¨² y tambi¨¦n ha condenado en estos d¨ªas el protocolo.
En abril de 2013, el Ministerio de Justicia prepar¨® un informe legal sobre el protocolo de aborto terap¨¦utico y afirm¨® que su aprobaci¨®n ¡°no solo resulta constitucionalmente permitida, sino constitucionalmente obligatoria¡±. Las organizaciones feministas y las ONG de salud reproductiva protestaron desde entonces porque interpretaban que la demora en la aprobaci¨®n del protocolo se deb¨ªa a motivos pol¨ªticos.
Seg¨²n la Encuesta Demogr¨¢fica y de Salud Familiar de 2012, el aborto es la tercera causa de muerte materna en Per¨².?
Cipriani calific¨® este martes la norma como ¡°una gu¨ªa para eliminar la vida de una criatura¡±, en declaraciones a una radio local. El protocolo incluye diez diagn¨®sticos precisos en los que una junta m¨¦dica puede evaluar la posibilidad de interrumpir el embarazo. Adem¨¢s agrega la siguiente posibilidad: ¡°cualquier otra enfermedad materna que ponga en riesgo la vida de la gestante o genere en su salud un mal grave y permanente, debidamente fundamentada por la Junta M¨¦dica¡±. Para el arzobispo y la Conferencia Episcopal es esa la ventana abierta al aborto.
El s¨¢bado, cuando la norma fue publicada en el diario oficial, Cipriani critic¨® la decisi¨®n del Gobierno y reclam¨® al presidente Ollanta Humala el no haber cumplido con su palabra, pues en 2011, cuando el militar en retiro era candidato presidencial, sostuvieron una reuni¨®n en privado, de la cual ¨¦l y su esposa salieron con un rosario de regalo.
¡°La conversaci¨®n hab¨ªa tratado el tema del aborto, del matrimonio de los homosexuales y de la educaci¨®n cat¨®lica. En esos tres casos me dijo: ¡®Mi gobierno no tiene esto¡¯. La palabra se cumple. Hab¨ªa un compromiso de no ir adelante en ning¨²n aspecto que era promover el aborto¡±, reclam¨® el jerarca cat¨®lico.
La ministra de la Mujer, Carmen Omonte, se ofreci¨® a dialogar con el arzobispo de Lima para limar asperezas, pero este martes Cipriani rechaz¨® la propuesta y dijo que espera abordar el asunto con el primer ministro, Ren¨¦ Cornejo. El aludido, consultado por la prensa, se limit¨® a responder que tomaba nota de las palabras del cardenal.
Cipriani ha propuesto que el primer ministro convoque a una ¡°reuni¨®n por la salud al m¨¢s alto nivel¡± para abordar este tema con la participaci¨®n de universidades y la Academia Peruana de Medicina. Cree adem¨¢s que las juntas m¨¦dicas se dejar¨¢n sobornar para dar su opini¨®n favorable a cualquier aborto.
En la misma l¨ªnea, la Conferencia Episcopal divulg¨® el martes un comunicado en el que rechaza el protocolo del aborto terap¨¦utico por ¡°inmoral, inconstitucional e ilegal¡±.
Dos mujeres a quienes el Estado peruano impidi¨® el aborto terap¨¦utico han acudido a instancias de Naciones Unidas para exigir sanci¨®n. En 2001, una adolescente de 17 a?os gest¨® un feto anencef¨¢lico y un hospital p¨²blico le neg¨® la interrupci¨®n del embarazo pese a que su m¨¦dico lo recomend¨®. El Comit¨¦ de Derechos Humanos de la ONU dispuso que el Estado la indemnizara. Por otro lado, el Comit¨¦ para la Eliminaci¨®n de la Discriminaci¨®n contra la Mujer de la ONU emiti¨® en 2011 un dictamen contra Per¨² debido a que, en 2007 a una ni?a de 13 a?os se le neg¨® el aborto terap¨¦utico pese a que ten¨ªa riesgo de discapacidad permanente luego de intentar suicidarse al saberse embarazada debido a sucesivas violaciones sexuales. Han pasado siete a?os y la joven LC sigue exigiendo al Gobierno el pago de la reparaci¨®n debido a sus fuertes gastos en medicinas, transporte y tratamiento.
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