Una terapia g¨¦nica produce marcapasos biol¨®gicos en corazones de cerdo

La introducci¨®n de un gen en c¨¦lulas cardiacas permite que estas asuman la tarea de marcar el ritmo de los latidos en corazones enfermos, convirti¨¦ndose en unos marcapasos biol¨®gicos. El trabajo, dirigido por Eduardo Marb¨¢n, del Instituto del Coraz¨®n Cedars-Sinai de EE UU, lo ha publicado Science Translational Medicine.

El ensayo, realizado en cerdos, parte de corazones en los que no funciona el nodo sinoauricular, que es el grupo de c¨¦lulas especiales que se encargan de crear el impulso nervioso que hace que el coraz¨®n lata. La soluci¨®n que se ha encontrado es inyectar en otra zona del coraz¨®n un virus que lleva un gen, el TBX18. Cuando este gen se integra en el n¨²cleo de las c¨¦lulas infectadas, genera una prote¨ªna que se encarga de transformar la funci¨®n de las c¨¦lulas. De ser cardiomiocitos o fibroblastos normales, se convierten en c¨¦lulas que generan el impulso nervioso. Es decir, se transforman en un marcapasos biol¨®gico. ¡°Esencialmente hemos creado un nuevo nodo sinoauricular en una parte del coraz¨®n que normalmente distribuye el impulso el¨¦ctrico, pero no lo crea¡±, explica Marb¨¢n.

Francisco Ruiz Mateas, presidente de la Secci¨®n de Estimulaci¨®n Card¨ªaca [MARCAPASOS]de la Sociedad Espa?ola de Cardiolog¨ªa se muestre muy esperanzado ante este trabajo. ¡°Hace a?os que se busca un marcapasos biol¨®gico¡±, dice. El hecho de que se haya ensayado en cerdos, el animal m¨¢s parecido al ser humano en muchos aspectos m¨¦dicos, es prometedor.

El ensayo podr¨ªa aplicarse a fetos, ni?os? o personas con infecciones

El cardi¨®logo explica que los marcapasos son necesarios en dos casos: en la enfermedad del nodo sinusal, que supone que este no mande la se?al el¨¦ctrica que hace que el coraz¨®n lata, o cuando estas c¨¦lulas funcionan, pero el canal de comunicaci¨®n est¨¢ bloqueado, y el impulso nervioso no llega a su destino. ¡°Desde los sesenta, esto se soluciona con los marcapasos¡±, afirma.

Pero ¡°hay dos casos en que el uso de los marcapasos no es posible¡±, dice Ruiz Mateas. ¡°Una es cuando se produce una infecci¨®n en el marcapasos y hay que quitarlo¡±. La contaminaci¨®n de los dispositivos y pr¨®tesis es ¡°muy infrecuente¡±, explica, pero supone un grave problema ya que hay que extirpar el implante para sanear la zona. En este caso se podr¨ªa probar la terapia g¨¦nica para sustituir de manera biol¨®gica el funcionamiento del marcapasos extra¨ªdo.

El otro caso es a¨²n m¨¢s complicado. Y tambi¨¦n muy raro. Se trata de ni?os o incluso fetos con bloqueo aur¨ªculo-ventricular (con la se?alizaci¨®n nerviosa del latido interrumpida). En este caso, como sus cuerpos est¨¢n en constante cambio, el empleo de marcapasos mec¨¢nicos es complicado, ya que habr¨ªa que irlos adaptando cada cierto tiempo, indica Ruiz Mateas. ¡°Incluso podr¨ªa aplicarse la terapia g¨¦nica intrafetalmente¡±, a?ade, a la vez que recuerda que Espa?a est¨¢ entre los pa¨ªses m¨¢s avanzados en cirug¨ªas fetales.

El m¨¦dico, sin embargo, tambi¨¦n muestra cautelas. La terapia g¨¦nica es todav¨ªa una t¨¦cnica en ciernes. ¡°Habr¨¢ que ver cu¨¢nto dura el efecto o si hay una respuesta inmunitaria¡±, indica. ¡°Adem¨¢s, para introducir los genes se suelen usar vectores, virus, que en este caso hay que inyectar directamente al coraz¨®n¡±. Esos son parte de los aspectos que habr¨¢ que revisar en futuros ensayos en humanos.