¡°Ahora la Iglesia es culpable de ocultar. ?Y las v¨ªctimas, por qu¨¦ se han callado?¡±
Las grabaciones al obispo de Salamanca revelan los argumentos y las t¨¢cticas de la jerarqu¨ªa eclesi¨¢stica para acallar a los denunciantes de abusos
Las conversaciones grabadas en 2013 entre el obispo de Salamanca, Carlos L¨®pez, y una v¨ªctima de abusos Javier Paz, a las que ha tenido acceso EL PA?S, son reveladoras de los argumentos de la Iglesia para silenciar el esc¨¢ndalo y de su falta de empat¨ªa con quienes denuncian. Uno de los momentos m¨¢s llamativos de los audios es cuando el prelado responde a las quejas de su interlocutor sobre la actitud de la Iglesia. El obispo pregunta por otras v¨ªctimas que conoce Paz, para saber si se quieren unir a su denuncia contra Isidro L¨®pez, el cura de Salamanca que fue finalmente condenado por el Vaticano en 2014.
Estas personas no se f¨ªan de la Iglesia porque creen que ha ocultado el caso. El obispo reacciona con contrariedad: ¡°Pero, ?qui¨¦n tiene la culpa? ?por qu¨¦ no lo han denunciado? Es que es muy f¨¢cil decir¡ ?Estos se?ores por qu¨¦ no lo han denunciado a su debido tiempo? Ahora la Iglesia es culpable de haberlo ocultado ?y ellos por qu¨¦ lo han ocultado?¡±. La v¨ªctima le explica que no es f¨¢cil asimilar los abusos y denunciar, que pasan muchos a?os. El obispo contin¨²a: ¡°Si en el caso de Isidro no ha habido un castigo es por culpa de todos. Lo que no vale decir es que los obispos no han hecho nada. No, vamos, a ver ?las v¨ªctimas por qu¨¦ se han callado? ?Por qu¨¦ todav¨ªa las v¨ªctimas no quieren decir nada?¡±. El obispado de Salamanca, que durante d¨¦cadas se neg¨® a investigar a este sacerdote por no creer "veros¨ªmiles" las denuncias contra ¨¦l, se ha negado en todo momento a responder a EL PA?S sobre el caso.
Es m¨¢s, el propio Carlos L¨®pez admite que ya en 2003, cuando lleg¨® a la ciudad, conoci¨® rumores sobre el cura, luego condenado, en la parroquia donde estaba entonces, en el barrio de Tejares, aunque sostiene que no encontr¨® pruebas concluyentes. De modo que el sacerdote sigui¨® ocho a?os m¨¢s de p¨¢rroco, y aun as¨ª cuando el obispo recibi¨® en 2011 la denuncia de Javier Paz, ¡°considerando la buena fama del sacerdote, juzg¨® que no hab¨ªa suficientes elementos para proceder¡±, tal como afirma la sentencia del Vaticano que revel¨® este peri¨®dico la semana pasada. Mientras se llevaba a cabo el proceso can¨®nico permaneci¨® a¨²n tres a?os m¨¢s prestando ayuda en otra parroquia.
No obstante, el obispo admite a su interlocutor que podr¨ªa haber hecho m¨¢s y tomar medidas: ¡°Habl¨¦ con don Isidro, y el conocimiento que he tenido de eso ha sido despu¨¦s. Si en 2003 hubieran estado en vigor las normas can¨®nicas que est¨¢n ahora [Benedicto XVI orden¨® en 2010 elaborar protocolos contra los abusos], yo hubiera actuado de otra manera, claro, me hubiera sentido obligado a actuar. Pero entonces las normas eran distintas". Carlos L¨®pez ha sido una autoridad en la Iglesia espa?ola en cuestiones legales, porque desde 1994 form¨® parte de la Junta de Asuntos Jur¨ªdicos de la Conferencia Episcopal, y de 2002 a 2017 fue su presidente.
En otro pasaje el responsable de la di¨®cesis salmantina vuelve a atribuir el papel de v¨ªctima a la Iglesia, cuando debe pagar indemnizaciones: ¡°Si no hubiera prescrito y condenan a don Isidro y el juez civil le impone una indemnizaci¨®n, y al final si ¨¦l no tiene dinero, ?qui¨¦n lo tiene que pagar? Lo paga la di¨®cesis. ?Qui¨¦n es la v¨ªctima entonces? Porque claro, la di¨®cesis es tambi¨¦n tu madre, y son los pobres¡±.
En todo caso, su principal inter¨¦s en gran parte de las charlas es convencer al denunciante de que es mejor mantener el asunto en secreto. En una conversaci¨®n del 15 de marzo de 2013, por ejemplo, Javier Paz se est¨¢ planteando presentar una denuncia en los tribunales, aunque est¨¢ prescrito, para que salga a la luz. Pero el obispo intenta convencerlo de que no va a conseguir nada. Solo el esc¨¢ndalo, porque est¨¢ prescrito y ¡°la v¨ªa civil est¨¢ cerrada¡±. En cambio, le razona, en el juicio can¨®nico no hay prescripci¨®n: ¡°Solo van a conseguir hacer da?o, nada m¨¢s, hacerse da?o a s¨ª mismos y a su familia, y todos los dem¨¢s¡±. Y luego a?ade: ¡°Ya bastante has sufrido para que salgas tambi¨¦n en la prensa¡±. Las cr¨ªticas a los medios son recurrentes.
Paz replica que tambi¨¦n cree que con la denuncia p¨²blica pueden salir otras v¨ªctimas a la luz, cuyos casos no hayan prescrito, pero el obispo le desanima: ¡°?Si eso fue hace montones de a?os! Si todos esos hechos acontecieron cuando estaba en San Juli¨¢n, despu¨¦s estuvo ocho o diez a?os en Tejares. Est¨¢ superprescrito¡±. Sin embargo, se hab¨ªan recibido denuncias en esta segunda parroquia, donde permaneci¨® hasta 2003, tal como consta en la sentencia del Vaticano revelada por este peri¨®dico. Los casos de abusos de menores prescriben hasta 15 a?os despu¨¦s de la mayor¨ªa de edad, y por tanto en 2013 no se pod¨ªa descartar que alg¨²n caso no hubiera prescrito.
Cuando la v¨ªctima insiste en que el objetivo es llegar a que m¨¢s gente pueda denunciar, el obispo argumenta: ¡°No se hace m¨¢s justicia por el hecho de que absolutamente todos los que puedan considerarse perjudicados, abusados, comparezcan en el proceso. Si ellos llegan a saber, y sabr¨¢n, porque la condena tendr¨¢ que ser p¨²blica, y saben que ha sido culpable, que ha sido condenado, pues ya est¨¢. Lo mismo da que sea por da?ar a cuatro que a catorce¡±. De todos modos le promete que al final la sentencia se har¨ªa p¨²blica. No fue as¨ª. El obispado solo difundi¨® un breve comunicado que ocult¨® los detalles del caso y de la condena, como que hab¨ªa dos v¨ªctimas m¨¢s, no solo Javier Paz, que ya lo hab¨ªa hecho p¨²blico.
Si conoce alg¨²n caso de abusos sexuales que no haya visto la luz, escr¨ªbanos con su denuncia a abusos@elpais.es
El obispo se lav¨® las manos y se remiti¨® al arzobispo de Toledo: "Lo que sea de antes yo no lo s¨¦"
Carlos L¨®pez, obispo de Salamanca, se lava las manos sobre las denuncias ignoradas durante a?os contra Isidro L¨®pez, el cura apartado en 2014, y en las conversaciones grabadas pasa la responsabilidad de aclararlo a su predecesor, Braulio Rodr¨ªguez, actual arzobispo de Toledo, que ocup¨® el cargo entre 1995 y 2003. En su charla con una v¨ªctima, Javier Paz, el obispo asegura que nunca tuvo noticia de denuncias en el pasado y la primera que recibi¨® fue la suya, en 2011. ¡°Lo que pueda haber sucedido fue anterior, antes de venir yo¡±, explica. Y en otro momento: ¡°Lo que sea de antes yo no lo s¨¦. Lo que supo o no supo don Braulio yo no lo s¨¦. No lo s¨¦ si alguien supo algo¡±. El actual arzobispo de Toledo y primado de Espa?a, que tambi¨¦n ha ocupado altos cargos en la Conferencia Episcopal, no ha querido aclarar a este peri¨®dico lo que supo y c¨®mo actu¨® durante su etapa en Salamanca. Por otro lado, el propio Carlos L¨®pez admite en las grabaciones que ya conoci¨® rumores en 2003, cuando lleg¨® a la ciudad, sobre posibles abusos de este cura en el barrio de Tejares.
La sentencia de la Santa Sede que en 2014 conden¨® a Isidro L¨®pez, revelada por este peri¨®dico, descubre que en el pasado hubo denuncias contra ¨¦l que no se consideraron ¡°veros¨ªmiles¡±, aunque no precisa el n¨²mero ni la fecha, solo el periodo, que abarca varias d¨¦cadas. Ni el obispado de Salamanca, ni la Conferencia Episcopal, requeridos por este peri¨®dico, han querido aclarar los detalles ni aportar transparencia sobre este caso. Tambi¨¦n surge la duda, a ra¨ªz de estos datos, de si los obispos entrantes y salientes comparten la informaci¨®n acerca de casos de abusos sobre menores. "La causa se ha tratado entre la di¨®cesis y la Santa Sede, son ellos los competentes para dar explicaciones", responden en la Conferencia Episcopal.
Las denuncias, precisa la resoluci¨®n vaticana, se recibieron durante el paso de Isidro L¨®pez por la parroquia de San Juli¨¢n y San Mart¨ªn, de 1974 a 1996, y en San Pedro Ap¨®stol de Tejares, entre 1996 y 2003. En ese periodo tambi¨¦n era profesor de religi¨®n en dos institutos, el Fray Luis de Le¨®n y el Torres Villarroel, as¨ª como capell¨¢n del club de f¨²tbol de la ciudad, la Uni¨®n Deportiva de Salamanca. El cambio de parroquia de este cura en 1996, ya bajo el mandato de Rodr¨ªguez, fue ¡°an¨®malo¡±, seg¨²n un sacerdote que conoci¨® de cerca el traslado. Pas¨® de una importante del centro de la ciudad a Tejares, un barrio de las afueras. ¡°Todos pensamos que hab¨ªa pasado algo¡±, explica.
El actual obispo asegura a la v¨ªctima en su conversaci¨®n que ¨¦l no supo nada: ¡°Yo vine en el a?o 2003 y yo te puedo garantizar, y te garantizo, que el tiempo que he estado aqu¨ª en Salamanca no he tenido conocimiento de ninguna actuaci¨®n de don Isidro que haya sido sospechosa". S¨ª admite que al llegar a la ciudad conoci¨® los rumores sobre el posible caso de abusos del sacerdote en Tejares pero, afirma, "hice las investigaciones oportunas y no saqu¨¦ nada en claro¡±. Aunque luego a?ade lo que averigu¨® despu¨¦s, "porque me he plantado claro, en el transcurso del proceso, qu¨¦ hacer con las cosas de Tejares¡±.
Las ¡°cosas de Tejares¡±, descubri¨® el obispo finalmente, seg¨²n su relato, fueron al menos una denuncia penal, no al obispado. La present¨® un vecino de ese barrio, ¡°padre de las supuestas v¨ªctimas¡±, seg¨²n la expresi¨®n utilizada por Carlos L¨®pez. Por tanto, se tratar¨ªa de m¨¢s de un menor. Pero fue archivada, en la versi¨®n del responsable de la di¨®cesis, y por eso dio por cerrado el asunto. Javier Paz interviene entonces para apuntar que los rumores apuntan que se pudo producir un acuerdo econ¨®mico con la di¨®cesis. ¡°No me consta que haya habido ning¨²n acuerdo extrajudicial¡±, replica el obispo.
El obispo reconoce que los rumores sobre don Isidro ¡°como proclive al abuso de los ni?os¡± se hicieron p¨²blicos por este episodio de Tejares, y de hecho causaron al sacerdote ¡°una depresi¨®n fort¨ªsima¡±. As¨ª se lo encontr¨® cuando lleg¨® al cargo en 2003, asegura el obispo, que lo traslad¨® a la parroquia de San Sebasti¨¢n, junto a la catedral. De 2003 a 2011 el cura luego condenado sigui¨® teniendo contacto con menores. Una persona ha testimoniado a este peri¨®dico que, por ejemplo, le vio una vez solo con dos ni?os de excursi¨®n en el campo en Arapiles, cerca de Salamanca, en ese periodo.
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