Facebook, Twitter y YouTube act¨²an contra el odio: borran m¨¢s mensajes que nunca
Casi tres de cada cuatro publicaciones detectadas incitando al odio por motivos racistas, xen¨®fobos o sexistas se eliminan de la Red
En mayo de 2016 Bruselas puso a las grandes empresas de Internet ante una disyuntiva: o se empleaban a fondo para eliminar los contenidos ilegales racistas, xen¨®fobos y sexistas que campan por la Red, o la UE les apretar¨ªa las tuercas con un reglamento ante el que habr¨ªan de responder legalmente. La v¨ªa voluntaria se abri¨® paso entonces a trav¨¦s de un c¨®digo de conducta al que se adhirieron Facebook, Microsoft, Twitter y YouTube.
M¨¢s de dos a?os y medio despu¨¦s, se han unido a la lista otras cinco compa?¨ªas ¡ªInstagram, Google+, Dailymotion, Snapchat y Webedia¡ª, y la Comisi¨®n Europea afirma estar satisfecha con el resultado: seg¨²n la cuarta evaluaci¨®n del c¨®digo, el 72% de las publicaciones de este tipo fueron eliminadas por las empresas due?as de las redes donde fueron subidas, una cifra muy superior al 28% de diciembre de 2016 o el 59% de mayo de 2017, pero solo ligeramente superior al 70% de diciembre del a?o pasado.
Las leyes europeas definen el discurso de odio ilegal como la incitaci¨®n p¨²blica a la violencia o al odio a determinados grupos o individuos debido a su raza, religi¨®n, origen u orientaci¨®n sexual. El potente altavoz de las redes sociales ha permitido lanzar al ciberespacio una cantidad ingente de contenidos ofensivos contra estos grupos. Y la Comisi¨®n cree que los propietarios de esos foros p¨²blicos no pueden eludir su responsabilidad. "Vivimos un momento crucial para el sector de las nuevas tecnolog¨ªas. O nos demuestran que pueden hacer cumplir las reglas que existen en el mundo offline, o deber¨¢n hacer frente a iniciativas reglamentarias", ha advertido este lunes la comisaria de Justicia, Vera Jourov¨¢.
La pol¨ªtica checa mantiene un contacto regular con los ministros de Justicia de la UE para informarles de los avances del c¨®digo de conducta. Su balance es por ahora positivo. No solo se eliminan m¨¢s publicaciones, sino que tambi¨¦n ha mejorado el tiempo de reacci¨®n: casi el 89% de las notificaciones recibidas son atendidas en un plazo inferior a 24 horas. Hace poco m¨¢s de dos a?os eran solo el 40%, menos de la mitad. Facebook est¨¢ a la cabeza en la velocidad de respuesta: un 92,5% de las alertas que recibe las ha tramitado en menos de un d¨ªa, y ha eliminado el 82% de ellas, solo por detr¨¢s de YouTube, que elimin¨® el 84%. Twitter con un 42,5%, queda rezagada frente al resto, aunque ha ganado en agilidad.
Como explica la Comisi¨®n, para que se borre un mensaje no basta con decir un simple "te odio" u otra expresi¨®n equivalente: ha de estar combinada con la amenaza de emplear la violencia o referencias a la raza, la religi¨®n, el origen o la condici¨®n sexual. De los contenidos suprimidos, los m¨¢s comunes se incluyeron en las categor¨ªas de xenofobia (17%), orientaci¨®n sexual (15,6%) y odio contra los musulmanes (13%). Tambi¨¦n destacan las publicaciones contra gitanos, jud¨ªos o africanos.
Bruselas ha pedido a las multinacionales due?as de las redes contundencia contra la masiva presencia de exabruptos, pero les exige ser cuidadosas para no convertirlo en un instrumento de censura y vulnerar la libertad de expresi¨®n. Ese esp¨ªritu lo resumen en una frase: en caso de duda, mejor no eliminar. La Comisi¨®n tambi¨¦n ha implicado en la tarea a 35 organizaciones sociales de todo el continente. En Espa?a, la Fundaci¨®n Secretariado Gitano, la Federaci¨®n Estatal de Lesbianas, Gais, Transexuales y Bisexuales y el Observatorio Espa?ol del Racismo y la Xenofobia han sido las entidades designadas para comprobar si las tecnol¨®gicas cumplen de verdad con su compromiso de limpiar la Red de agravios contra las minor¨ªas.
El asunto se ha vuelto especialmente delicado en medio del auge de la extrema derecha en numerosos parlamentos europeos, un ascenso que ha ido acompa?ado de un endurecimiento de la ret¨®rica antiinmigraci¨®n, no solo desde el teclado an¨®nimo, sino alimentada desde p¨²lpitos p¨²blicos de Ejecutivos como el italiano.
La UE ha optado por ahora por el acuerdo con los gigantes de Internet y no ha promovido una legislaci¨®n comunitaria, sin embargo, avisa de que puede emprender esa v¨ªa en cualquier momento si hay una relajaci¨®n de la vigilancia. Entre las exigencias del Ejecutivo comunitario est¨¢ que ese control no sea tarea de algoritmos, y corresponda a equipos humanos. "Las empresas han contratado a miles de empleados para hacerlo. He ido a uno de esos centros en Dubl¨ªn y puedo decir que tienen uno de los empleos menos agradables del mundo. Son h¨¦roes de la era digital", se?al¨® Jourov¨¢.
Bruselas ha sido en todo momento partidaria de la unidad de acci¨®n ante un problema que parece haber llegado para quedarse, pero la unanimidad no es total. Alemania no ha esperado a sus socios y ha aprobado por su cuenta leyes propias contra los discursos de odio en Internet. Berl¨ªn multa con hasta 50 millones de euros a aquellas compa?¨ªas que no hayan eliminado contenidos ilegales en un plazo m¨¢ximo de 24 horas.
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