Las mujeres de la m¨²sica chilena se unen contra el machismo
Distintos colectivos de profesionales discuten y denuncian el maltrato que sufren en una industria controlada por los hombres

El 17 de febrero de 2019, al final de su espect¨¢culo en la ciudad de Puerto Varas (sur), la cantante chilena Camila Gallardo, de 22 a?os, recibi¨® sobre el escenario el saludo del alcalde Ram¨®n Bahamonde. El pol¨ªtico le entreg¨® un galvano de recuerdo, pero tambi¨¦n la tom¨® de la cabeza para besarla en la mejilla izquierda. Los testigos del hecho dicen que Bahamonde intent¨® darle un beso en la boca y ella, sin aludir directamente a la maniobra, public¨® en redes sociales mensajes que conten¨ªan frases como "no son tiempos f¨¢ciles para nosotras las mujeres" y "nadie, absolutamente nadie -no importa su autoridad- est¨¢ m¨¢s all¨¢ de nuestra dignidad. La violencia la vivimos todas y en todos lugares".
El video del beso fallido del alcalde se viraliz¨® en redes sociales y fue tema de debate nacional. Mientras el alcalde Bahamonde negaba la acusaci¨®n y ped¨ªa disculpas de la int¨¦rprete -a qui¨¦n se refiri¨® como ¡°la ni?ita¡±- el Gobierno se sum¨® a la discusi¨®n. La ministra de la Mujer y la Equidad de G¨¦nero, Isabel Pl¨¢, respald¨® a "Camila y a cualquier mujer que se haya sentido ofendida o agredida en su integridad f¨ªsica o emocional por un acto de connotaci¨®n sexual que no ha sido consentido¡±. Aunque d¨ªas despu¨¦s fue opacada por la exitosa presentaci¨®n de Cami -como tambi¨¦n se le conoce- en el Festival de Vi?a del Mar, la an¨¦cdota muestra que el mundo del espect¨¢culo no es una excepci¨®n dentro de las distintas formas de violencia que enfrentan las mujeres chilenas d¨ªa a d¨ªa.
Con esa idea como centro, una veintena de trabajadoras de la m¨²sica independiente chilena se junt¨® a conversar durante un domingo de 2017. En el grupo hab¨ªan periodistas, fot¨®grafas, dise?adoras e int¨¦rpretes que fueron contando una a una las malas experiencias que les hab¨ªan ocurrido mientras ejerc¨ªan sus labores en tocatas (conciertos de p¨²blico reducido). Parte de las conversaciones derivaron en una serie de cinco reportajes publicadas por la revista POTQ bajo el t¨ªtulo Cuando ella habla, escucho la revoluci¨®n. All¨ª se leen crudos relatos de abuso y machismo cotidiano protagonizado por hombres de la escena underground que semana a semana organizan eventos en Santiago. B¨¢rbara Carvacho -periodista y una de las asistentes al encuentro- define la conversaci¨®n como un proceso en que se dieron cuenta de que ¡°est¨¢bamos tapadas de violencia sistem¨¢tica¡±. ¡°Nos fuimos dando cuenta de que el aliado de una era el agresor de otra¡±, dice.
Red Muchacha
La jornada de di¨¢logo entre mujeres que se ve¨ªan seguido, pero sin conocerse mayormente, deriv¨® luego en Muchacha, una red conformada por trabajadoras de la m¨²sica. ¡°No pod¨ªamos estar llorando todos los fines de semana y esperando respuestas que nadie nos iba a dar¡±, explica Carvacho. Con poco m¨¢s de un a?o de vida, el trabajo ha servido para reflexionar sobre las manifestaciones del machismo recurrentes, como la falta de mujeres en cargos directivos en la industria de la m¨²sica y otros asuntos m¨¢s cotidianos.
¡°Es sumamente dif¨ªcil ir a cubrir (o trabajar) en una tocata que va a empezar a las 2 de la ma?ana y no saber c¨®mo volver a mi casa¡±, dice Carvacho. Tambi¨¦n se aborda el miedo de las chicas que deben entrar al estudio de grabaci¨®n, un reducto mayoritariamente masculino: ¡°No sabes si vas a salir viva de all¨ª o vas a salir sin ninguna huella de abuso... m¨¢s all¨¢ del mansplaining constante que hay en la m¨²sica, como si no nos perteneciera¡±, reflexiona.
La red Muchacha dedica su esfuerzo a la primera encuesta sobre acoso y abuso en espect¨¢culos de m¨²sica en vivo que se hace en Chile. La idea es que los resultados sirvan de insumo para elaborar despu¨¦s un protocolo que ser¨¢ entregado a las productoras de grandes conciertos y as¨ª evitar episodios como el que ocurri¨® en el Lollapalooza del a?o pasado, cuando varias j¨®venes -muchas de ellas menores de edad- denunciaron haber sido toqueteadas en la antesala de la presentaci¨®n de Camila Cabello.
El machismo tambi¨¦n tiene respuesta desde la m¨²sica chilena masiva. Desde 2016, la cantante pop Francisca Valenzuela produce Ruidosa, un festival que incluye foros de discusi¨®n, talleres de baile, stand up comedy y conciertos en torno a la participaci¨®n de la mujer en la industria. Adem¨¢s de Chile, el evento se ha celebrado en Estados Unidos y M¨¦xico. El 11 de abril, en tanto, debut¨® en Per¨² con la participaci¨®n del colectivo ruso Pussy Riot. En una entrevista de 2017, la artista explic¨® a EL PA?S que el objetivo de la actividad es ¡°que se compartan testimonios que nos permitan diagnosticar problem¨¢ticas de g¨¦nero y terminar con el machismo. El envoltorio seductor de un festival da lugar a poder aterrizar estos conflictos¡±.
Dentro de ese envoltorio, Ruidosa aborda verdades duras, como en el an¨¢lisis que se hizo sobre 66 de los principales festivales musicales celebrados en Am¨¦rica Latina entre 2016 y 2018 : la participaci¨®n femenina alcanza s¨®lo un 10,1% y el apartado de "bandas mixtas" donde participa al menos una mujer es de 13,9%.
En medio de todos estos esfuerzos, la m¨²sica femenina chilena pasa por un buen momento. A figuras reconocidas internacionalmente como Javiera Mena, Mon Laferte o la propia Francisca Valenzuela se suman de a poco estrellas emergentes como Camila Gallardo o Paloma Mami, la ¨²ltima sensaci¨®n del trap latinoamericano. Eso s¨ª, la periodista B¨¢rbara Carvacho hace una observaci¨®n: ¡°Aunque se hable de buenos discos de m¨²sicas, actualmente los est¨¢n produciendo hombres¡±.
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