La Audiencia Nacional investiga a Johnson & Johnson por sus pr¨®tesis de cadera defectuosas

La Audiencia Nacional est¨¢ investigando a la multinacional norteamericana Johnson & Johnson, una de las mayores farmac¨¦uticas del mundo, por haber comercializado pr¨®tesis de cadera defectuosas que llegaron a implantarse en pacientes en decenas de pa¨ªses, entre ellos Espa?a, y que le han costado a la firma, solo en EE UU, 120 millones de d¨®lares en indemnizaciones. Las pr¨®tesis, seg¨²n se ha dado por probado en otras causas, liberan sustancias met¨¢licas da?inas para la salud. El Juzgado Central de Instrucci¨®n n¨²mero 6 de Madrid acaba de hacer p¨²blicas sus actuaciones, que se originan en una querella presentada en agosto de 2017.?

Las pr¨®tesis, conocidas como ASR y comercializadas a trav¨¦s de la filial DePuy, se distribuyeron en 70 centros repartidos por casi todas las comunidades aut¨®nomas espa?olas y se implantaron al menos a 3.000 personas hasta 2010, cuando la empresa las retir¨® del mercado nacional. Un a?o antes, en 2009, la Agencia del Medicamento de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en ingl¨¦s) ya hab¨ªa ordenado dejar de comercializar este producto en su pa¨ªs. La empresa ha vendido alrededor de 93.000 pr¨®tesis ASR en todo el mundo.

Las actuaciones del juzgado central nacen de una querella criminal que un grupo de 63 afectados?(inicialmente 43, a los que se sumaron otros 20) present¨® hace dos a?os. El juez ya ha llamado a declarar a tres expresidentes y a un representante legal de?Johnson & Johnson en Espa?a. Todos ellos se han acogido al derecho a no declarar. Entre los otros investigados se encuentran, adem¨¢s, ingenieros que dise?aron las pr¨®tesis y otros altos cargos de la firma. Los querellantes piden que se les juzgue por delitos de fraude en productos sanitarios y estafa agravada.

Los pacientes, representados por el abogado Emilio Ortiz, defienden que hab¨ªa defectos de fabricaci¨®n en las pr¨®tesis que les provocaron da?os irreversibles tras la retirada de las mismas. Bas¨¢ndose en varios documentos que est¨¢n resultando clave en procesos judiciales contra la multinacional en otros pa¨ªses, aseguran que los problemas ya se conoc¨ªan antes de 2000. Seg¨²n la documentaci¨®n, a la que ha tenido acceso este peri¨®dico, la compa?¨ªa sab¨ªa desde antes de 2010 que las pr¨®tesis del modelo ASR XL pod¨ªan causar da?o a las personas. Un 12% de ellas fallaba y se aconsejaba retirarlas.

Primer caso criminal

Es la primera vez que en Espa?a los tribunales investigan a?Johnson & Johnson por una querella criminal. Los pacientes afectados han conseguido ya dos sentencias favorables, ratificadas por sendas audiencias provinciales, con las han logrado cerca de medio mill¨®n de euros en indemnizaciones.

Uno de los problemas comunes de este tipo de pr¨®tesis es la liberaci¨®n de iones met¨¢licos de cromo y cobalto, da?inos para la salud. As¨ª lo establece una sentencia dictada en Vigo, en 2018, en la que un afectado reclam¨® a?Johnson & Johnson una indemnizaci¨®n por las consecuencias de su operaci¨®n. El juez establece como hechos probados que ¡°las part¨ªculas met¨¢licas presentes eran producto del desgaste abrasivo producido por terceros cuerpos y consecuencia de un defectuoso proceso de fabricaci¨®n¡±. Una situaci¨®n que se produce en parte por el rozamiento entre la parte que sustituye el hueso del f¨¦mur (la cabeza femoral) y la pieza que sirve de enganche con la cadera (el cotilo). De ah¨ª que el roce genere dolor e imposibilite los movimientos.

Un problema global

Las causas contra DePuy, propiedad de?Johnson & Johnson desde 1998, se han repetido en decenas de pa¨ªses del mundo. En Estados Unidos, la tecnol¨®gica sanitaria ha alcanzado acuerdos de compensaci¨®n con m¨¢s de 9.800 pacientes, seg¨²n desvel¨® The Implant Files, una investigaci¨®n period¨ªstica liderada por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigaci¨®n (ICIJ).

En enero de este a?o, la empresa ha sido condenada a pagar 120 millones de d¨®lares de indemnizaci¨®n a 46 Estados de Estados Unidos por comercializar de forma enga?osa implantes de cadera con dispositivos met¨¢licos. El proceso judicial lo lider¨® la fiscal de Nueva York, quien anunci¨® que su oficina y la de otros 45 fiscales generales de todo el pa¨ªs lograron un fallo de consentimiento de 120 millones de d¨®lares con?Johnson & Johnson y DePuy para resolver las acusaciones de que la compa?¨ªa promovi¨® ilegalmente sus implantes de cadera con dispositivos met¨¢licos, concretamente los modelos ASR XL y el Pinnacle Ultamet.