El fiscal general de EE UU denuncia ¡°graves irregularidades¡± en la muerte de Epstein
Los investigadores advierten de que las pesquisas sobre el caso de explotaci¨®n sexual contin¨²an y apuntan a posibles c¨®mplices del financiero y a su entramado fiscal tras su aparente suicidio
La muerte del multimillonario Jeffrey Epstein, un aparente suicidio en su celda?de la prisi¨®n de m¨¢xima seguridad de Manhattan donde esperaba juicio, no impedir¨¢ que contin¨²e la investigaci¨®n contra el financiero de 66 a?os por tr¨¢fico sexual. Lo pidieron las v¨ªctimas durante el fin de semana?y lo ha confirmado este lunes el fiscal general de EE UU, William P. Barr, que ha anunciado que el foco se traslada ahora a los posibles conspiradores del millonario. ¡°Este caso continuar¨¢ contra quienquiera que actuara como c¨®mplice de Epstein¡±, ha dicho este lunes en Nueva Orleans. ¡°Ning¨²n conspirador deber¨¢ descansar tranquilo. Las v¨ªctimas merecen justicia, y la tendr¨¢n¡±. En paralelo a la investigaci¨®n del caso discurren las pesquisas sobre las circunstancias de la muerte de Epstein: ¡°Estamos conociendo irregularidades graves en la c¨¢rcel que son profundamente preocupantes y que demandan una investigaci¨®n a fondo¡±, ha dicho el fiscal general, sin detallar a qu¨¦ se refer¨ªa.?
Al multimillonario se le aplic¨®, tras un aparente intento de quitarse la vida hace tres semanas, un protocolo de cuidado especial por riesgo de suicidio. Se le retir¨® a los seis d¨ªas, pero se estableci¨® que no deb¨ªa estar solo en la celda y que los agentes le vigilar¨ªan cada media hora. La noche antes de que fuera hallado muerto, se encontraba solo en la celda (el preso con quien la compart¨ªa hab¨ªa sido trasladado) y no se hab¨ªan realizado las visitas peri¨®dicas preceptivas. ¡°Estoy consternado, y el departamento [de Justicia] entero lo est¨¢, al saber del fracaso del Centro Correccional Metropolitano del sur de Manhattan a la hora de asegurar adecuadamente a este preso¡±, dijo Barr en Nueva Orleans. El domingo se llev¨® a cabo la autopsia de Epstein, pero a¨²n no se ha hecho p¨²blicas las conclusiones.
En el caso por tr¨¢fico sexual, como record¨® el fiscal del distrito sur de Nueva York, Geoffrey Berman, los cargos a los que se enfrentaba el financiero, y que podr¨ªan haberle costado hasta 45 a?os en prisi¨®n, inclu¨ªan el de conspiraci¨®n. ¡°A todas esas mujeres j¨®venes valientes que ya han dado un paso adelante y a muchas otras que a¨²n tienen que hacerlo, perm¨ªtanme reiterarles que seguimos comprometidos a defenderlas, y nuestra investigaci¨®n sobre la conducta objeto del procesamiento, que incluye un cargo de conspiraci¨®n, permanece en marcha¡±, dijo Berman.
A¨²n no est¨¢ claro si otras personas ser¨¢n imputadas. Pero las declaraciones de Berman y Barr apuntan a que el Gobierno ya ha identificado a algunos de sus objetivos. Los fiscales y los agentes federales que armaron la causa contra Epstein tienen ya la vista puesta en un c¨ªrculo de personas que, seg¨²n los testimonios de las demandantes, participaron en la trama de explotaci¨®n sexual de menores, ya sea reclutando o coaccionando a j¨®venes para ponerse al servicio de la red que estuvo activa durante m¨¢s de diez a?os.
En concreto, en un acuerdo entre Epstein y el Estado en 2007 en Florida, por el que el financiero se declar¨® culpable y acept¨® una pena de 13 meses, los fiscales aceptaron no imputar a cuatro mujeres a las que se refer¨ªan como ¡°potenciales conspiradoras¡±. Pero el acuerdo alcanzado en Florida no ata a la fiscal¨ªa de Nueva York.
En ese c¨ªrculo de mujeres destaca Ghislaine Maxwell, a quien las supuestas v¨ªctimas definen como protectora de Epstein, novia, conseguidora y proxeneta. Nacida en Par¨ªs y educada en Oxford, fue una pieza clave en la operaci¨®n, seg¨²n los testimonios de las demandantes.
Otro de los caminos de la investigaci¨®n sobre el caso ser¨¢ el complej¨ªsimo entramado financiero de Epstein, que incluye constantes y extra?os flujos de dinero entre numerosas empresas, organizaciones supuestamente ben¨¦ficas y bancos en para¨ªsos fiscales. Las demandantes pueden seguir adelante con reclamaciones civiles contra su vasto patrimonio, que supuestamente asciende a 500 millones de d¨®lares pero que, sospechan los abogados de las v¨ªctimas, podr¨ªa incluir una cantidad a¨²n mayor oculta en ese turbio entramado financiero. Las cuentas en para¨ªsos fiscales, los socios de Epstein y su ¨²nico pariente cercano vivo, su hermano Mark, tambi¨¦n due?o de un importante patrimonio, est¨¢n en el punto de mira de los investigadores en esta v¨ªa de las reclamaciones civiles.
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