¡°Un paciente puede pedir la eutanasia aunque no vaya a morir a corto plazo¡±
La presidenta de la asociaci¨®n belga por el derecho a morir dignamente constata un aumento de extranjeros que viajan a B¨¦lgica para pedir la eutanasia
B¨¦lgica ha integrado la eutanasia en su d¨ªa a d¨ªa sin traumas. 18 a?os despu¨¦s de la aprobaci¨®n de la ley que legaliza la muerte con ayuda m¨¦dica, las voces discordantes apenas son audibles fuera de peque?as organizaciones autodenominadas provida. El n¨²mero de enfermos que ha elegido voluntariamente acabar con su vida bajo tutela sanitaria creci¨® con fuerza desde sus inicios para estabilizarse en los ¨²ltimos a?os por encima de los 2.000 anuales, un 2% de las muertes en todo el pa¨ªs. Jacqueline Herremans, presidenta de la Asociaci¨®n por el Derecho a Morir Dignamente ya ha empezado a recabar testimonios para conmemorar el 20 aniversario de la ley. Mientras tanto, acoge con sorpresa la pregunta de para qu¨¦ sirve su organizaci¨®n en un pa¨ªs donde cualquier enfermo incurable que reciba la aprobaci¨®n de dos m¨¦dicos puede recurrir a la eutanasia. "No todo se soluciona con la ley. Una vez que existe, hay que vigilar su aplicaci¨®n", puntualiza.
Pregunta. Van casi dos d¨¦cadas de eutanasia en B¨¦lgica. ?Hay algo mejorable en la aplicaci¨®n de ley?
Respuesta. Nos preocupa la formaci¨®n de m¨¦dicos y enfermeras. La ley todav¨ªa no es lo suficientemente conocida. Aunque hablamos de la muerte de una forma m¨¢s abierta que en otros pa¨ªses, algunos m¨¦dicos nunca se han enfrentado a una petici¨®n de eutanasia en su carrera. Y eso dificulta que est¨¦n preparados cuando les toque. Nuestra mayor preocupaci¨®n es la formaci¨®n de especialistas, pero tampoco hay que olvidar la del p¨²blico. Soy abogada y puedo decir que en el mundo judicial hay un gran desconocimiento de esta ley.
P. ?Qu¨¦ carencias nota?
R. En general, se sabe que la enfermedad debe ser grave e incurable y el paciente debe pedir la eutanasia repetidamente. Pero a veces escuchamos que solo sirve para personas en estado terminal, lo cual es mentira. El paciente puede formular una petici¨®n aunque su muerte no sea previsible a corto plazo.Tomemos el caso de un accidente de carretera en el que la v¨ªctima queda tetrapl¨¦jica. Puede formular una solicitud. Habr¨ªa que examinar si re¨²ne condiciones como la posibilidad de rebajar su sufrimiento f¨ªsico o ps¨ªquico y si hay alternativas. Est¨¢ claro que la decisi¨®n no se tomar¨¢ en el hospital cuando se le anuncia que queda tetrapl¨¦jico. Hay que dejar tiempo para adaptarse a la nueva situaci¨®n. Pero en un caso bien conocido en Espa?a, como el de Ram¨®n Sampedro, se sab¨ªa que no habr¨ªa mejora, aunque haya progresos m¨¦dicos puntuales.
P. ?Ram¨®n Sampedro recibir¨ªa la eutanasia si viviera en la B¨¦lgica de hoy?
R. S¨ª, Ram¨®n Sampedro sin ninguna duda.?
P. En Espa?a todav¨ªa no es posible someterse a una eutanasia. ?Son bienvenidos los espa?oles en hospitales belgas?
R. [Se lo piensa]. S¨ª y no. Para alguien que viene de Par¨ªs no es un problema. Pero un espa?ol ?c¨®mo llama a la puerta adecuada? En ocasiones, la condici¨®n f¨ªsica del paciente puede hacer el viaje extremadamente duro y no se recomienda volar. Es lo mismo que sucede con los italianos. Pero en su caso pueden recurrir a Suiza, donde hay tres asociaciones: Dignitas, Life Circle y Exit International, que aceptan pacientes extranjeros. Venir a B¨¦lgica desde Espa?a o Italia es m¨¢s complicado. Y quedan excluidos los casos de problemas psiqui¨¢tricos, que se descartan de oficio para los extranjeros porque hace falta m¨¢s tiempo.?Debe haber contacto y proponer todos los tratamientos posibles antes. Es necesario vivir en B¨¦lgica al menos un a?o, no se puede hacer a distancia.?
P. ?Siguen recibiendo muchas peticiones de Francia?
R. S¨ª, much¨ªsimas. Y eso genera un grave problema. Ya hay hospitales que no los aceptan, y lo que pasar¨¢ al final es que si muchos hospitales los rechazan, los orientaremos sistem¨¢ticamente sobre los minoritarios que los aceptan, lo que aumentar¨¢ su carga y puede terminar en un rechazo general a los pacientes extranjeros. La ley no les excluye de obtener la eutanasia. No hay condicionantes de nacionalidad ni residencia, pero evidentemente es m¨¢s dif¨ªcil. ?Por qu¨¦? Porque el m¨¦dico suele aceptar a los pacientes que suele seguir, y hay que establecer una relaci¨®n terap¨¦utica que no puede hacerse por correspondencia, tel¨¦fono o WhatsApp. Pero lo que s¨ª puede hacerse es preparar un dosier. Eso implica para el paciente que vive fuera varios ir y venir a B¨¦lgica para ver al m¨¦dico que le seguir¨¢ y le tratar¨¢ igual que a cualquier otro paciente local siempre que cumplan con los requisitos. Hay que asegurarse de que la persona no recibe presi¨®n exterior ni hay elementos que hagan que la demanda no pueda ser considerada voluntaria, reiterada y bien reflexionada. Y la palabra reiterada quiere decir que es necesario m¨¢s de un encuentro.
P. Los alemanes recurren muy poco a sus servicios pese a que su pa¨ªs tambi¨¦n es fronterizo.
R. Es cierto que podr¨ªan tomar contacto con los hospitales de la regi¨®n german¨®fona, pero lo hacen muy poco. Hay un cierto desconocimiento, por suerte para los m¨¦dicos, de que la tercera lengua de B¨¦lgica es el alem¨¢n. Todos los textos de la ley y declaraciones de muerte anticipada est¨¢n disponibles tambi¨¦n en alem¨¢n.
P. ?Puede suceder un caso como el de Vincent Lambert en B¨¦lgica?
R. No puedo negar esa posibilidad, pero es altamente improbable. Cuando digo que no es evitable al 100% es porque no podemos evitar que haya quien tome medidas que, aunque no tienen ninguna posibilidad de prosperar, retrasen el proceso. En todo caso, hay una cosa clara: cuando en un pa¨ªs puedes hablar de eutanasia tienes m¨¢s libertad de expresarte y puedes nombrar las cosas de forma m¨¢s precisa. En Francia no es as¨ª.
P. ?Ve a los belgas contentos con la ley?
R. En general, s¨ª. Hay cada vez m¨¢s testimonios de gente que conoce a un amigo, alguien de su familia, de su entorno¡ Los casos de eutanasia, aunque parezcan pocos respecto al total de fallecimientos, tocan a muchas personas. Desde equipos m¨¦dicos a allegados. Recibimos muchos testimonios positivos de amigos y familiares. Nos llegan muchos casos en los que el paciente da las gracias al m¨¦dico justo antes de que se practique la eutanasia. Recuerdo una declaraci¨®n en la que el m¨¦dico anot¨® que la persona se durmi¨® con una sonrisa en los labios. Hay cr¨ªticas, pero siempre vienen del mismo sitio: Euthanasie Stop y el llamado Instituto Europeo de Bio¨¦tica, un fraude que se opone a todo lo que no sea la vida desde la concepci¨®n a su final.
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