El reto de parir en la Espa?a menguante

Mar¨ªa pari¨® de urgencia un ni?o "sano y hermoso¡± en el hospital comarcal de Ver¨ªn (Ourense) solo unos d¨ªas despu¨¦s de que la Xunta tomase una decisi¨®n ins¨®lita en Espa?a: cerrar el ¨¢rea de maternidad por baja natalidad y suprimir a los pediatras de guardia. Cuando le estaba dando de mamar, vivi¨® un episodio por el que piensa ¡°tomar acciones legales¡±: ¡°La pediatra que vino desde el hospital de Ourense me lo sac¨® y se lo llev¨® en una ambulancia diciendo que ten¨ªa que cubrir unos informes. Dos horas despu¨¦s, cuando me repuse algo, me llevaron a m¨ª. Me metieron en urgencias en una silla de ruedas y me tuvieron varias horas esperando en un pasillo de las citas de ginecolog¨ªa, sangrando y con la epidural a¨²n puesta¡±.

El accidentado parto de Mar¨ªa es la primera consecuencia del cierre de las urgencias pedi¨¢tricas y el paritorio donde daban a luz mujeres de 11 ayuntamientos gallegos. El Gobierno gallego justifica la clausura en que en este hospital solo nacieron el a?o pasado 89 beb¨¦s y esgrime una recomendaci¨®n incluida en una gu¨ªa del Ministerio de Sanidad de 2009. El documento considera ¡°prudente¡± no dotar de maternidad a aquellos centros que no superen los 600 partos al a?o ¡°excepto que razones de tiempos de desplazamiento o accesibilidad as¨ª lo aconsejen¡±. En Espa?a medio centenar de hospitales p¨²blicos est¨¢n por debajo de ese n¨²mero anual de nacimientos -incluidos seis de Galicia, aparte del de Ver¨ªn- y son muchos los privados en id¨¦ntica situaci¨®n. Ninguna de las comunidades con los registros m¨¢s bajos se plantea, sin embargo, seguir la senda emprendida por la Xunta.

En Arag¨®n, al menos cuatro hospitales p¨²blicos registran menos de 600 partos anuales y el de Jaca se qued¨® en solo 124 en 2018. El Gobierno auton¨®mico (PSOE) no piensa cerrar ning¨²n paritorio porque aduce que, aunque tiene en cuenta ¡°la conveniencia¡± de que estos servicios ¡°tengan un determinado n¨²mero de partos al a?o para asegurar la calidad¡±, es ¡°prioritaria tambi¨¦n¡± la ¡°vertebraci¨®n territorial¡± en una extensa comunidad de poblaci¨®n muy dispersa.

¡°Si queremos luchar contra la despoblaci¨®n, debemos centrar los esfuerzos en asegurar la plena igualdad en el acceso a los servicios p¨²blicos¡±, argumentan desde Extremadura, una vasta autonom¨ªa en la que los hospitales de Coria y Navalmoral no llegan a 600 partos anuales. El Ejecutivo socialista cree que cerrar sus paritorios y mermar sus servicios pedi¨¢tricos como ha hecho Galicia agravar¨ªa incluso las actuales dificultades para encontrar profesionales que quieran ejercer all¨ª: ¡°Har¨ªa estos hospitales menos atractivos para los profesionales, que l¨®gicamente buscan un desarrollo de su carrera profesional¡±.

El Gobierno de la Comunidad Valenciana niega que exista un criterio establecido para cerrar paritorios con menos de 600 partos sino solo ¡°recomendaciones¡±. ¡°Para nosotros el principal criterio es la equidad en el acceso a las prestaciones sanitarias¡±, defienden. En Asturias, con dos centros que apenas alcanzan el centenar de nacimientos y que est¨¢n m¨¢s cercanos a hospitales grandes que Ver¨ªn de Ourense, tampoco piensan clausurar ning¨²n servicio porque, explica los responsables socialistas del Principado, trabajan ¡°en red¡± y env¨ªan a los profesionales de las ¨¢reas centrales a dar asistencia en las zonas m¨¢s perif¨¦ricas.

Ni la Generalitat de Catalu?a, con cuatro hospitales por debajo de los 600 partos al a?o, ni las autonom¨ªas gobernadas por el PP como Madrid, Andaluc¨ªa o Castilla y Le¨®n, con tres, siete y cuatro centros respectivamente, secundan a la Xunta. La Junta castellanoleonesa defiende que mantener abiertos estos paritorios respeta el derecho de los habitantes de esas zonas "a una atenci¨®n sanitaria cercana y correcta", teniendo en cuenta que, como ocurr¨ªa en Ver¨ªn, estos centros asisten nacimientos "con un riesgo bajo de presentar complicaciones, incluyendo la anestesia".

El presidente de la Xunta, Alberto N¨²?ez Feij¨®o (PP), sostiene que la clausura de la maternidad de Ver¨ªn, que incluye la supresi¨®n de las urgencias pedi¨¢tricas, la ha impulsado en favor de la ¡°seguridad¡± de las mujeres, por la p¨¦rdida de pericia de los profesionales cuando la actividad es baja, y de los beb¨¦s, porque ¡°no hay pediatras¡± que quieran trabajar en Ver¨ªn. ¡°Prefiero asumir una decisi¨®n impopular basada en criterios m¨¦dicos que poner en riesgo la vida de una madre o de un beb¨¦¡±, ha afirmado.

El Gobierno gallego ha recibido el apoyo de la Sociedad de Pediatr¨ªa de Galicia, que no ve ¡°justificado¡± mantener en Ver¨ªn un servicio para atender partos de bajo riesgo con la escasez de especialistas que sufre Espa?a. La Sociedad Espa?ola de Neonatolog¨ªa discrepa. ¡°No se puede dejar desamparada a la gente que vive en las zonas rurales; si se recorta en asistencia m¨¦dica, se despoblar¨¢n por completo¡±, aduce M¨¢ximo Vento, presidente de la Sociedad Europea de Neonatolog¨ªa (European Board of Neonatology) y de la espa?ola (SENeo). Reconoce que la experiencia de los facultativos es el principal factor de ¨¦xito en cualquier intervenci¨®n m¨¦dica pero apunta que el segundo es la inmediatez en la asistencia.

El tambi¨¦n investigador principal del Grupo de Perinatolog¨ªa del hospital La Fe de Valencia se?ala que con los hospitales que no llegan a los 600 partos anuales que acreditan la pericia en t¨¦rminos cl¨ªnicos ¡°hay que buscar soluciones imaginativas y cambiar el r¨ªgido sistema legislativo espa?ol¡±. Afirma que la ausencia de pediatras ¡°se puede solventar con los anestesistas, que pueden reanimar perfectamente a un neonato¡±. Y puntualiza que esto resulta ¡°bastante m¨¢s f¨¢cil que trasladar a una mujer para que d¨¦ a luz en un hospital a 70 kil¨®metros ¡±.

El neonat¨®logo pone el ejemplo de Canad¨¢. En la provincia de Alberta, m¨¢s extensa que Espa?a, solo hay dos hospitales de envergadura y el resto son comarcales. La falta de pericia derivada de los escasos partos la solventan ¡°con la rotaci¨®n, un par de semanas, de todos los m¨¦dicos de los comarcales a uno de los grandes hospitales¡± en donde realizan intervenciones y se ponen al d¨ªa en las nuevas t¨¦cnicas. A mayores, ¡°se hacen contratos especiales¡± para que a los profesionales sanitarios les compense trabajar en los hospitales comarcales. Nada que ver, sostiene, con lo que ocurre en Espa?a, ¡°con los m¨¦dicos y personal de enfermer¨ªa mal pagados¡±.

Con informaci¨®n de Ignacio Zafra, Javier Mart¨ªn-Arroyo, Jessica Mouzo e Isabel Vald¨¦s.