Johnson impone finalmente el confinamiento domiciliario en el Reino Unido para frenar el virus
El primer ministro dice que se revisar¨¢ la decisi¨®n en tres semanas
Boris Johnson anunci¨® el lunes la decisi¨®n de su Gobierno de imponer la cuarentena contra el coronavirus a todos los ciudadanos brit¨¢nicos. Las cr¨ªticas de la comunidad cient¨ªfica a la respuesta dada hasta ahora, y la realidad del arrollador avance de los contagios, han obligado al primer ministro a ceder. Los ciudadanos solo podr¨¢n abandonar sus hogares para comprar suministros b¨¢sicos, atender necesidades m¨¦dicas, acudir al trabajo (si resulta imposible hacerlo desde casa) y realizar una vez al d¨ªa alg¨²n tipo de ejercicio b¨¢sico. Esta ¨²ltima es la ¨²nica excepci¨®n concedida a los ciudadanos, en comparaci¨®n con las medidas impuestas en otros pa¨ªses europeos como Espa?a.
Toda concentraci¨®n de m¨¢s de dos personas en espacios p¨²blicos (con la excepci¨®n de las personas que convivan en el mismo n¨²cleo familiar) queda prohibida. La polic¨ªa dispondr¨¢ de los poderes necesarios para imponer multas y dispersar concentraciones de ciudadanos. Bibliotecas, parques infantiles o espacios de ejercicio f¨ªsico al aire libre deben ser clausurados de inmediato, as¨ª como todos los comercios que no sean de productos b¨¢sicos.
¡°Ning¨²n primer ministro querr¨ªa tomar este tipo de decisiones¡±, admit¨ªa Johnson en un discurso a la naci¨®n televisado, breve y conciso, en el que ha explicado a los brit¨¢nicos que se trata del ¨²nico modo de evitar que el Servicio Nacional de Salud (NHS, en sus siglas en ingl¨¦s) se vea desbordado e incapaz de atender a todos los enfermos. ¡°Para explicarlo de un modo simple, si muchas personas enferman a la vez, el NHS ser¨¢ incapaz de manejar esa situaci¨®n, y morir¨¢n m¨¢s pacientes, no solo por coronavirus sino por otras enfermedades¡±, ha explicado. Hasta el ¨²ltimo minuto, Johnson ha intentado aplicar medidas gradualmente m¨¢s severas buscando la complicidad de la ciudadan¨ªa brit¨¢nica. Pero esa complicidad solo ha existido de un modo muy limitado.
Los parques de Londres, sus calles, ve¨ªan este mismo fin de semana un trasiego de personas excesivo frente a la gravedad de la crisis. La oposici¨®n pol¨ªtica, pero sobre todo la comunidad cient¨ªfica, comenzaban a romper la unidad y el consenso y exig¨ªan una actuaci¨®n m¨¢s dr¨¢stica. Igual que el Partido Conservador, que comenzaba a mostrar grietas en su apoyo al primer ministro.
¡°Les puedo asegurar que mantendremos estas medidas bajo constante revisi¨®n. Volveremos a considerarlas dentro de tres semanas, y las relajaremos si la evidencia cient¨ªfica nos muestra que podemos hacerlo¡±, dec¨ªa Johnson. ¡°Pero de momento las opciones que tenemos no son f¨¢ciles. El camino que nos queda por delante es duro y muchas vidas se perder¨¢n", admit¨ªa.
Boris Johnson se ha visto obligado, en el breve plazo de un par de semanas, a dar un giro de 180? a su estrategia en la lucha contra el virus. Lo que comenz¨® con un discurso optimista y tranquilizador, en el que la ¨²nica exigencia constante a los ciudadanos era que se ¡°lavaran las manos el tiempo que dura cantar dos veces el Cumplea?os feliz¡± ha derivado en un llamamiento de urgencia a la ciudadan¨ªa para evitar el colapso anunciado del NHS. Johnson quiso resistirse hasta el final a imponer medidas excesivamente autoritarias para el car¨¢cter y el mensaje de un pol¨ªtico con fama de libertario y poco amigo de las imposiciones.
La respuesta de apoyo a las nuevas medidas por parte del principal partido de la oposici¨®n ha llegado de inmediato. ¡°El primer ministro hace lo correcto al exigir a la gente que permanezca en sus casas, para proteger al NHS y salvar vidas (...) Ahora necesitamos instrucciones claras para trabajadores y empresas sobre qu¨¦ centros de trabajo deben cerrar, y ofrecer seguridad a los aut¨®nomos, los inquilinos y los que tienen que pagar una hipoteca¡±, respond¨ªa el l¨ªder del Partido Laborista, Jeremy Corbyn.
Unas horas antes del mensaje de Johnson, el Ministerio de Exteriores del Reino Unido ped¨ªa al mill¨®n de ciudadanos brit¨¢nicos que todav¨ªa estaban fuera del pa¨ªs, de vacaciones o en viaje de trabajo, que regresaran de inmediato. El Gobierno, les advert¨ªa de que no ser¨¢ capaz de fletar aviones comerciales en los pr¨®ximos d¨ªas.
A las nueve de la ma?ana de este lunes, el n¨²mero de fallecidos por el coronavirus en el Reino Unido hab¨ªa alcanzado la cifra de 335. El n¨²mero de casos confirmados era de 6.650. Trabajadores del NHS de todo el pa¨ªs hab¨ªan comenzado ya a lanzar mensajes desesperados a la poblaci¨®n, adelant¨¢ndose al primer ministro, para que se mantuvieran en casa y ayudaran a frenar la avalancha.
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