Objetivo: llegar a Espa?a y no perder el curso

Desde su casa en Baiona (Pontevedra), Fe Framil puede atestiguar que hay cosas mucho peores que estar pasando la cuarentena con los hijos en casa. El suyo, ?lex, de 16 a?os, est¨¢ a 7.000 kil¨®metros de distancia y con un incierto viaje por delante despu¨¦s de que AFS Intercultura, la asociaci¨®n con la que viaj¨®, haya decidido, como el resto de entidades que organizan estancias educativas en el extranjero, dar por concluido el curso y hacer volver a Espa?a a sus alumnos. En total, hay m¨¢s de 8.000 estudiantes espa?oles en una situaci¨®n similar, dijo este mi¨¦rcoles la ministra de Educaci¨®n, Isabel Cela¨¢, que a la precipitada salida de los pa¨ªses de acogida suman las dudas sobre qu¨¦ ocurrir¨¢ con sus estudios.

El Gobierno estudia f¨®rmulas para que los convaliden y no pierdan el curso. Cela¨¢, afirma que es ¡°muy importante¡± que los alumnos ¡°completen¡± y ¡°consigan certificar¡± el a?o escolar en el centro donde lo han empezado. Pero que, si no lo logran, se abrir¨¢ un canal ¡°excepcional¡± para abordar los casos por parte del Ministerio. El hecho de que muchos estados est¨¦n cerrando la asistencia presencial a sus escuelas facilitar¨¢ que los centros concedan la certificaci¨®n a los espa?oles que han tenido que irse, opinan fuentes de las entidades que organizan las estancias.

La preocupaci¨®n es mayor entre aquellas familias que, como la de Fe Framil, todav¨ªa no saben cu¨¢ntas horas tendr¨¢n que estar viajando sus hijos hasta llegar a casa en medio de la mayor crisis sanitaria del ¨²ltimo siglo. ¡°La situaci¨®n nos est¨¢ volviendo a muchos medio locos. Algunos alumnos ya han vuelto, pero otros muchos no, porque, tal y como est¨¢n las cosas, log¨ªsticamente da trabajo. Mi hijo est¨¢ en Salina, Kansas, y hasta hoy [por este mi¨¦rcoles 25 de marzo] no me han avisado de que todos los alumnos de AFS que quedan en Estados Unidos volver¨¢n el viernes desde Chicago. Es dif¨ªcil estar tranquila cuando ves que cada d¨ªa se est¨¢n cerrando m¨¢s las fronteras y el espacio a¨¦reo. Se habla de ni?os que han iniciado el viaje, han tenido alg¨²n vuelo que se ha anulado y se han quedado en aeropuertos solos¡±, afirma la mujer, que trabaja de enfermera en el hospital ?lvaro Cunqueiro de Vigo. ¡°Como sanitaria, adem¨¢s, me da miedo la carga viral con la que puede llegar a casa despu¨¦s de un viaje as¨ª¡±, a?ade.

Lecciones para el viaje

La madre ha aleccionado sin cesar a su hijo para que extreme las medidas de precauci¨®n durante el trayecto. ¡°Le he mandado comprar cuatro mascarillas de protecci¨®n FFP2, que all¨ª est¨¢n car¨ªsimas. Y gel hidroalcoh¨®lico, para que se lo ponga en las manos cada vez que toque algo que no lleve consigo. Le he insistido en que no se toque la cara, que empiece ya a hacer ejercicios en casa para evitar hacerlo. Le he pedido que trate de beber poco durante el viaje para no tener que ir al ba?o muchas veces, porque ya se sabe en qu¨¦ condiciones est¨¢n. Le he dado indicaciones de todo tipo¡±.

Framil intent¨® que su hijo se quedara con su familia de acogida ¡ª¡°Son lo mejor de esta experiencia¡±, comenta¡ª hasta que la situaci¨®n sanitaria mejore. Le dijo a la organizaci¨®n que asum¨ªa la responsabilidad y el coste que pudiera implicar. Pero AFS, que este curso ten¨ªa unos 250 alumnos de 15 a 18 a?os en el extranjero ¡ª125 de ellos en EE UU¡ª decret¨® el regreso de forma general, igual que el resto de entidades que organizan estancias educativas, ante la incertidumbre sobre la evoluci¨®n de la pandemia y las decisiones que adopten los pa¨ªses, apunta Mary-Paz Gonz¨¢lez, coordinadora de AFS en Castell¨®n y antiguo miembro de la junta directiva de la entidad educativa.

La Fundaci¨®n Amancio Ortega repatriar¨¢ esta semana a los 600 alumnos de primero de bachillerato que estudian en Estados Unidos y Canad¨¢ con su programa de becas, para lo que va a fletar dos aviones, se?ala un portavoz. ¡°Los cierres de escuelas eliminan una parte importante de la experiencia de intercambio y tambi¨¦n causan una interrupci¨®n significativa de la vida familiar. Los despidos laborales alteran las circunstancias financieras y los bloqueos pueden crear molestias y preocupaciones para las familias de acogida. Ya no sentimos que sea apropiado pedirles a nuestras familias anfitrionas que contin¨²en hospedando durante este tiempo incierto y estresante¡±, afirman los responsables de la empresa Education First, que tiene a centenares de alumnos en EE UU, Reino Unido e Irlanda.

¡°Ahora no est¨¢ haciendo nada ni all¨ª ni aqu¨ª"

¡°Aqu¨ª se acaba el curso a mediados de mayo. Me quedaba tan poco que pensar en que todo el esfuerzo no servir¨¢ para nada me da mucha rabia¡±, cuenta por WhatsApp ?lex Gonz¨¢lez, que est¨¢ en Kansas a la espera de iniciar un viaje de vuelta que, admite, teme.

Incluso si les convalidan el curso, queda la cuesti¨®n de c¨®mo aprovechar ahora el tiempo. ¡°A mi hijo lo sacaron de un d¨ªa para otro. No le dio tiempo de ver si pod¨ªa seguir trabajando de forma online. Y ahora no est¨¢ haciendo nada ni en Estados Unidos ni aqu¨ª. De momento va a prepararse las pruebas de t¨ªtulos de ingl¨¦s¡±, dice Bel¨¦n Pinilla, directora de un colegio en Valencia. Su hijo, Gustavo, a?ade: ¡°Yo me alegro de haber vuelto. Prefiero estar un mes en cuarentena con mi familia que con mi familia de acogida¡±.

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