M¨¢s de dos meses atrapados en una academia de m¨²sica de Alemania

Desde que llegaron el 10 de marzo a Rheinsberg, Gabriela Saravia y Andrea ?lvarez han visto pasar tres festejos de cumplea?os de sus colegas m¨²sicos y observado c¨®mo el paisaje ¨¢rido invernal de esta ciudad al norte de Alemania ha ido reverdeciendo por el comienzo de la primavera. Desde el edificio de la Academia de M¨²sica, lugar donde permanecen debido a la cuarentena, han presenciado c¨®mo el mundo cambi¨®, incluso en su Bolivia natal, en un abrir y cerrar de ojos debido a la pandemia por el coronavirus. A m¨¢s de dos meses de su viaje, este par, junto a otros 23 m¨²sicos integrantes de la Orquesta Experimental de Instrumentos Nativos de la naci¨®n andina, a¨²n aguardan a que se concreten las gestiones para la repatriaci¨®n.

La Orquesta Experimental de Instrumentos Nativos (OEIN) ven¨ªa preparando casi con un a?o de anticipaci¨®n un repertorio experimental con m¨²sica de instrumentos ind¨ªgenas de la regi¨®n altipl¨¢nica y las voces del ensamble coral PH?NIX16 de Berl¨ªn, que iba a convertirse en el acto de apertura del Festival de M¨²sica de Marzo el pasado 20 de ese mes. Sin embargo, un d¨ªa despu¨¦s de que la delegaci¨®n boliviana llegara a la ciudad que forma parte del Estado de Brandeburgo, la organizaci¨®n del evento dio el anuncio de la cancelaci¨®n de la cita musical a trav¨¦s de sus redes sociales. Posteriormente, todo fue ocurriendo en cadena. Alemania cerraba las fronteras y otros pa¨ªses europeos tomaban medidas similares para contener la pandemia. Mientras tanto, en Bolivia se decretaba el Estado de emergencia sanitaria el 26 de marzo, cerrando todas sus fronteras y prohibiendo el desplazamiento de cualquier vuelo, ya sea nacional o internacional, salvo para los casos de repatriaci¨®n.

Las semanas que ten¨ªan que dedicarse para ensayos y una estad¨ªa corta en la academia musical de Rheinsberg, se tornaron en una incertidumbre que a¨²n no tiene una luz al final del t¨²nel para los m¨²sicos de la orquesta. ¡°Se tiene un contacto con el encargado de negocios de la Embajada boliviana en Alemania y con la productora del evento, que est¨¢n a cargo y haciendo todas las gestiones posibles para el retorno. Nosotros no tenemos posibilidad de llegar a Madrid porque Francia est¨¢ con las fronteras cerradas, no se puede ni siquiera en bus, entonces es complicado¡±, le cuenta a EL PA?S Carlos Guti¨¦rrez, director de la OEIN.

Sin embargo, a pesar de este malestar generalizado entre los m¨²sicos, que oscilan entre las edades de 17 y 35 a?os, la m¨²sica y el arte han servido para paliar cualquier baj¨®n an¨ªmico, mantener a sus integrantes ocupados y ¡°con el optimismo necesario para no ahogarnos en depresi¨®n¡±, expresa Guti¨¦rrez. La Academia de M¨²sica ¨Cun espacio con cinco escenarios, 25 salas de ensayo de diferentes tama?os, una biblioteca especializada en m¨²sica y 40 habitaciones dobles¨C, ubicada al lado del Castillo de Rheinsberg, una construcci¨®n erigida en 1566 y que se mantiene en su forma actual desde 1740, le ha permitido a la orquesta seguir ensayando con sus instrumentos andinos de viento, como son los sikus, tarcas, pinkillos, de percusi¨®n, adem¨¢s de realizar sesiones de improvisaci¨®n, explorar nuevos sonidos y llevar a cabo talleres de poes¨ªa, dibujo y teatro.

¡°La convivencia es bastante llevadera, lo lindo de estar entre hartos, es que nos permite conocernos entre los diferentes integrantes en otras facetas, todo se ha fortalecido¡±, cuenta ?lvarez, que es multiinstrumentista e integrante de la orquesta desde 2008. Un lugar donde dormir y tres comidas al d¨ªa no les ha faltado desde que llegaron, sin embargo, el mantenimiento de los espacios que utilizan y la preparaci¨®n de sus alimentos les cuesta m¨¢s de 1.000 d¨®lares al d¨ªa. Es un monto que se buscar¨¢ cubrir a trav¨¦s del intercambio de servicios, gracias a los acuerdos institucionales que gestiona el ensamble coral PH?NIX16. Por tal raz¨®n, el trabajo no se ha detenido para la orquesta, ya que se encuentran grabando audio, video y presentaciones digitales para que se pueda canalizar algunos fondos que les permitan seguir viviendo en la academia de m¨²sica. ¡°No es nada f¨¢cil, ni nada barato¡±, precisa Guti¨¦rrez.

A pesar de que la estad¨ªa en este centro ser¨ªa el sue?o de cualquier m¨²sico en una situaci¨®n normal, la preocupaci¨®n del ensamble por la propagaci¨®n de la covid-19 en Bolivia ¨Ccon m¨¢s de con m¨¢s de 6.000 casos y 250 muertes¨C, sus ganas de volver y reencontrarse con su familia pueden m¨¢s. ¡°Vamos a llegar a La Paz, con suerte, y vamos a tener que estar alejados de las familias [por la cuarentena de 14 d¨ªas que es obligatoria para cualquier repatriado]. Me Imagino el encuentro, una fila de padres de familia, a dos metros o m¨¢s de distancia de nosotros y de ellos mismos, con la gente llorando. Ya me imagino c¨®mo va a ser, porque no vamos a poder ni tocarnos, eso emocionalmente es algo para lo que tenemos que estar preparados¡±, afirma ?lvarez.

La OEIN es un ensamble de m¨²sica contempor¨¢nea, ¨²nico en su g¨¦nero. Su objetivo consiste en traer al presente las ancestrales ra¨ªces andinas prehisp¨¢nicas, para desarrollar una propuesta cultural nueva desde la est¨¦tica y la educaci¨®n. El pasado 9 de mayo el ensamble celebr¨® 40 a?os de existencia. Lo hicieron con un concierto v¨ªa streaming desde uno de los escenarios de la Academia de m¨²sica de Rheinsberg, vestidos de rojo, sosteniendo sus instrumentos de viento, sonrientes y optimistas a pesar de todo, a la espera de alguna noticia sobre su retorno al pa¨ªs, que ciertamente no ser¨¢ el mismo que dejaron.

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