Discotecas, mataderos, barracones e iglesias: d¨®nde rebrotan los contagios en otros pa¨ªses

A mediados de abril, China contuvo el aliento ante la aparici¨®n de un nuevo foco en Harbin, una ciudad septentrional de 10 millones de habitantes. All¨ª, un supercontagiador ¡ªun anciano que estaba siendo tratado en un hospital local¡ª, transmiti¨® la covid-19 a 78 personas al menos, cuyos contactos a su vez la extendieron a varias provincias vecinas. Las autoridades reaccionaron con fuertes medidas de seguridad, blindando las zonas residenciales, impidiendo el acceso a veh¨ªculos con matr¨ªculas de otros lugares e imponiendo cuarentenas obligatorias de hasta cuatro semanas a los procedentes del exterior.

No es la ¨²nica ciudad china que ha echado el cierre. En Mudanjiang, al borde de la frontera con Rusia, el Gobierno impuso un bloqueo total equiparable al de Wuhan, origen de la infecci¨®n, cuando se registr¨® un repunte de positivos entre individuos procedentes del pa¨ªs vecino. Ambos episodios han provocado que en el ¨²ltimo mes los focos m¨¢s candentes se hayan desplazado al norte del pa¨ªs.

No es el ¨²nico caso en la regi¨®n. La evoluci¨®n de Corea del Sur demuestra la importancia de no bajar la guardia. A pesar de su efectiva gesti¨®n de la pandemia, esta misma semana ha registrado 79 nuevos contagios, el dato m¨¢s alto desde principios de abril. Otros 59 se localizan en una nave comercial a las afueras de Se¨²l. Estos nuevos casos est¨¢n vinculados con un foco descubierto a mediados de mes en varias discotecas, cuando la noche de fiesta de un contagiado se sald¨®, tras un exhaustivo rastreo y miles de test, con al menos 247 positivos. Ante el repunte, las autoridades surcoreanas han anunciado la reinstauraci¨®n de medidas preventivas en el ¨¢rea metropolitana de la capital, hogar de 25 millones de personas. Museos y parques han vuelto a detener su actividad durante al menos las pr¨®ximas dos semanas; y el Gobierno ha pedido a las empresas que recurran al teletrabajo.

Otro pa¨ªs asi¨¢tico que ha experimentado un rebrote ha sido Singapur. Su experiencia subraya la importancia de trazar un plan que proteja a las clases m¨¢s desfavorecidas. La ciudad-Estado repeli¨® la primera oleada de contagios con un m¨ªnimo de infectados, pero las medidas para evitar la segunda dejaron fuera a los trabajadores migrantes, en su mayor¨ªa obreros de la construcci¨®n que viven hacinados en grandes barracones en los que se ha localizado la mayor¨ªa de nuevos casos.

Contagios en iglesias, centros de asilo y restaurantes

En Alemania, tambi¨¦n se han dado rebrotes con el alivio de las restricciones, buena parte de ellos en mataderos y plantas de envasado de carne repartidas por todo el pa¨ªs. El Gobierno alem¨¢n ha dictado medidas para mejorar las condiciones de los trabajadores en ese sector, que a menudo proceden de pa¨ªses del este de Europa y conviven juntos en dormitorios pr¨®ximos al lugar de trabajo. Los expertos consideran adem¨¢s que el fr¨ªo en las plantas de procesado podr¨ªa favorecer la propagaci¨®n del virus. Algunas se han cerrado.

El instituto Robert Koch alem¨¢n indicaba este viernes que esta semana los nuevos brotes se han repartido por varios Estados federados; incluyen un centro de demandantes de asilo en Ratisbona, al sur del pa¨ªs. En Leer, en Baja Sajonia, se registr¨® tambi¨¦n un brote en un evento privado celebrado en un restaurante y en el que las causas del contagio se investigan todav¨ªa. Ha habido tambi¨¦n un contagio masivo en una congregaci¨®n baptista cerca de Frankfurt.

Alemania ha puesto en marcha un sistema de alarma que se activa cuando se registran m¨¢s de 50 casos positivos por cada 100.000 habitantes, pero a la vez contempla excepciones para brotes limitados a un lugar f¨ªsico y que se pueda controlar de manera independiente como el caso de los mataderos o las residencias de ancianos.

En Francia, se han registrado desde poco antes del inicio de la desescalada, 109 focos de transmisi¨®n, seg¨²n los ¨²ltimos datos oficiales de este viernes. La cifra excluye las residencias de la tercera edad y los focos familiares reducidos. De esos 109, 104 son en la Francia metropolitana y cinco en departamentos y regiones de ultramar.

Un 64% de los focos presentan m¨¢s de cinco casos. Afectan, primero, a lugares donde conviven personas ¡°en situaci¨®n de precariedad y de vulnerabilidad¡±: el 19% corresponden a establecimientos de albergue social y reinserci¨®n, y el 6% a comunidades vulnerables. El 22% se ubican en centros de salud y el 20% en empresas.

Un 80% de los casos se encuentra en curso de investigaci¨®n: siguen activos y se est¨¢n poniendo en pr¨¢ctica medidas de control: test para las personas infectadas y localizaci¨®n de los contactos para someterlos a test y aislarlos en cuarentenas de 14 d¨ªas. El resto est¨¢n controlados o cerrados.

Ninguno de estos focos ha provocado una difusi¨®n comunitaria no controlada, seg¨²n el informe. Es decir, no han dado pie a nuevos casos fuera de ese n¨²cleo de contagio. La Agencia de Sanidad P¨²blica de Francia define un foco como ¡°la aparici¨®n de tres casos confirmados o probables, en un periodo de 7 d¨ªas, y que pertenecen a una misma comunidad o han participado en una misma congregaci¨®n de personas, se conozcan o no¡±.

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