La pandemia multiplica la agon¨ªa de dos pueblos amaz¨®nicos de Per¨²
La falta de atenci¨®n y el olvido ponen contra las cuerdas a las etnias awaj¨²n y wamp¨ªs, que reclaman asistencia m¨¦dica y ox¨ªgeno
Per¨² concluy¨® el martes 107 d¨ªas de confinamiento tras registrar m¨¢s de 9.600 muertes por la covid-19. M¨¢s all¨¢ del dramatismo de las cifras, la pandemia ha acelerado la agon¨ªa de dos pueblos ind¨ªgenas azotados por la enfermedad en la regi¨®n Amaz¨®nica: los awaj¨²n y los wamp¨ªs. En la selva norte del pa¨ªs la atenci¨®n m¨¦dica siempre fue deficiente y hoy solo opera el 30% del personal sanitario. El resto se ha infectado, porque no recibi¨® a tiempo suficientes equipos de protecci¨®n ni medicinas, pese a que lo solicitaron desde abril, seg¨²n han manifestado a EL PA?S alcaldes, dirigentes comunales y trabajadores de la sanidad en el territorio.
El ministro de Salud, V¨ªctor Zamora, cifr¨® el domingo en 185 los ind¨ªgenas contagiados por la covid-19. Sin embargo, la Red Eclesial Panamaz¨®nica registra 3.116 ind¨ªgenas peruanos infectados y 369 fallecidos hasta el 23 de junio, bas¨¢ndose en reportes de la Coordinadora de las Organizaciones Ind¨ªgenas de la Cuenca Amaz¨®nica.
¡±Cuando a¨²n no empezaban los contagios en Condorcanqui [una provincia amaz¨®nica], el 26 de abril dije que iba ser una cat¨¢strofe si llegaba el virus, y ya es una cat¨¢strofe¡±, asegura por tel¨¦fono Clelia Jima, jefa de la unidad de pueblos ind¨ªgenas de la red de salud de esa provincia. La trabajadora tose mientras habla: es una de las contagiadas y se encuentra en sus ¨²ltimos d¨ªas de cuarentena. Como ocurri¨® en las otras regiones con poblaci¨®n ind¨ªgena amaz¨®nica (Loreto, Ucayali, Madre de Dios), el Ejecutivo respondi¨® tarde, pero tambi¨¦n la falta de atenci¨®n ha propiciado los contagios.
En abril, una de las principales agrupaciones amaz¨®nicas, la Organizaci¨®n de Pueblos Ind¨ªgenas del Oriente, recomend¨® al Estado medidas de protecci¨®n en la entrega de alimentos u otra asistencia durante la cuarentena, y sugiri¨® no distribuir dinero porque eso obligar¨ªa a las personas a romper el autoaislamiento que se estableci¨® para impedir el ingreso del virus. Un mes despu¨¦s, el Ministerio de Salud public¨® un protocolo que, en la pr¨¢ctica, se qued¨® en el papel.
Este fin de semana, Evelio Paz, el obstetra de la red de salud de Huampami (Condorcanqui), grab¨® un v¨ªdeo pidiendo al Gobierno que cese el pago de cualquier subsidio, porque obliga a las personas a salir de sus poblaciones . ¡°Que se suspenda inmediatamente los pagos de bonos, que se postergue: esa es la mayor forma de propagar la enfermedad en las comunidades ind¨ªgenas. Ya tenemos demasiados contagiados y el personal est¨¢ infectado¡±, clam¨®.
¡°Despu¨¦s de insistir bastante con los pedidos, el Ministerio de Salud llev¨® v¨ªa a¨¦rea 1.500 pruebas r¨¢pidas [de coronavirus] y equipos de protecci¨®n personal, pero en poca cantidad. Eso fue el 21 de mayo, nos parec¨ªa mucho gasto para movilizar poco material hasta la base militar Ciro Alegr¨ªa. Al d¨ªa siguiente, fuimos con representantes del ministerio de Cultura a distribuir las mascarillas a las comunidades ind¨ªgenas y al personal de salud donde estaban empezando a aparecer los casos, como Pantaam, Urakusa y Dos de Mayo¡±, explica Jima. Seg¨²n la trabajadora sanitaria, el virus lleg¨® el 4 de mayo a Pantaam. ¡°Eran tres viajeros que volvieron caminando desde Chiclayo y entraron burlando la vigilancia de los ronderos, quienes los detuvieron y alertaron. Les hicieron la prueba r¨¢pida y dieron positivo. Las poblaciones estuvieron respetando el protocolo de no salir, pero por las pr¨®rrogas de la cuarentena y el hambre obligaron a muchos a caminar a sus comunidades¡±, dice la funcionaria.
Jima dice que ¡±los puestos de salud est¨¢n cerrados, las personas se est¨¢n muriendo y la enfermedad ha llegado a todas las comunidades¡±. Por eso pide ¡°ox¨ªgeno y puestos de campa?a para atender a los enfermos¡±. En el puesto de salud de San Rafael, una comunidad de la cuenca del r¨ªo Santiago, ya no hay enfermeros ni t¨¦cnicos. Solo est¨¢ trabajando un ciudadano ind¨ªgena, promotor de salud voluntario que pide con urgencia personal de reemplazo, medicinas y ox¨ªgeno.
El alcalde del distrito de Cenepa, Carlos Yankikat, tambi¨¦n infectado, responde el tel¨¦fono con dificultades para respirar. ¡°La situaci¨®n est¨¢ bien complicada: no hay medicamentos, estamos cur¨¢ndonos con medicina tradicional, otros se est¨¢n automedicando. Este distrito es baj¨ªsimo en econom¨ªa, estamos en la frontera con Ecuador, tenemos altos ¨ªndices de desnutrici¨®n infantil y 84% de las personas con necesidades insatisfechas¡±, dice con preocupaci¨®n.
¡°Aqu¨ª no hay electricidad, no hay internet, no hay nada y por eso los profesores hicieron visitas domiciliarias para dar clases a los escolares. Los retornados hicieron deporte con los docentes, estos contaminaron a los alumnos y ellos a sus padres, que hab¨ªan estado bien resguardados en sus parcelas¡±, explica Yankikat.
Contagio en los subsidios
El alcalde tambi¨¦n critica el pago de los subsidios sin precauciones contra la propagaci¨®n del virus. ¡°El desorden ha sido cuando llegaba una persona del traslado de valores y las personas han salido de sus comunidades para cobrar, sin protecci¨®n. Pero adem¨¢s, los comerciantes, sabiendo que iba a haber ese cobro de dinero, han llegado de fuera: se han mezclado las personas¡±, detalla.
La lideresa Luciana Dekantai, de la comunidad ind¨ªgena de Yamakayat, est¨¢ reponi¨¦ndose de la covid-19. Dice que en mayo, el personal del puesto de salud de Imacita no ten¨ªa elementos de bioseguridad para atender a los pacientes. ¡°Mi hermano se enferm¨® y estuvo bien grave: era empleado de limpieza de la municipalidad de Mesones Muro y trasladaba los residuos a Chiriaco: all¨¢ se contagi¨®. Cuando lo llev¨¦ al puesto de salud, el personal ten¨ªa miedo, no pudieron atenderlo. La Municipalidad lo bot¨® del trabajo¡±, cuenta.
¡±Aqu¨ª hay muchos muertos, (las cifras) no son como dice el ministerio de Salud. Est¨¢n quedando muchos hu¨¦rfanos, no hay alimento, las medicinas est¨¢n car¨ªsimas, las mascarillas tambi¨¦n y no hay econom¨ªa. Tambi¨¦n somos peruanos: que las autoridades nos tengan en cuenta¡±, pide Dekantai.
Rub¨¦n Bustamente, el presidente del Centro de Defensa del poblado Mesones Muro, en la provincia de Condorcanqui, cuenta que su padre se contagi¨® porque cobr¨® el bono rural en una comunidad ubicada a dos horas de la suya. ¡°Hace falta personal m¨¦dico, no tenemos ambulancia. Ayudamos como podemos a una m¨¦dico y una t¨¦cnica que son las dos ¨²nicas que han quedado: aqu¨ª somos mitad de la poblaci¨®n mestizos e ind¨ªgenas awaj¨²n y wamp¨ªs¡±, describe.
Per¨² vivi¨® este martes el ¨²ltimo d¨ªa de un confinamiento que ha durado 107 d¨ªas, aunque en siete regiones donde el factor de propagaci¨®n del virus es mayor, continuar¨¢. En una entrevista en la televisi¨®n estatal, el director regional de Salud de Amazonas, Gorki Jave, pidi¨® al Gobierno incluir a esta regi¨®n entre las siete donde la cuarentena se mantenga. ¡±Estamos en una situaci¨®n muy dif¨ªcil. Ahora que van a reabrir el transporte interprovincial ser¨ªa un riesgo¡±, sostuvo.
El s¨¢bado, un comunicado del Ministerio de Salud inform¨® de que durante cuatro d¨ªas la regi¨®n Amazonas no tuvo fallecidos por covid-19. La afirmaci¨®n ha indignado a los ciudadanos de esa regi¨®n que acababan de enterrar a sus parientes y vecinos. La noche de este mi¨¦rcoles, falleci¨® Santiago Manuin Valera, el principal l¨ªder y referente vivo del pueblo awaj¨²n, quien en 1994 recibi¨® el Premio Reina Sof¨ªa por su trabajo para el desarrollo de las comunidades de Santa Mar¨ªa de Nieva.
El apu (jefe ind¨ªgena) ten¨ªa 63 a?os y su salud qued¨® debilitada desde el 5 de junio de 2009, al final de una huelga. Recibi¨® una r¨¢faga de disparos que le produjo ocho orificios en la zona abdominal. Permaneci¨® detenido y hospitalizado varios meses en un hospital de Chiclayo. En 2016, sufri¨® la amputaci¨®n de una pierna por complicaciones de diabetes, y en 2018 fue uno de los interlocutores del papa Francisco en una reuni¨®n con representantes de la poblaci¨®n ind¨ªgena. El l¨ªder awaj¨²n representaba a los cat¨®licos de la Amazon¨ªa y fue muy cercano a los jesuitas. Hace un par de semanas, sus familiares pidieron apoyo para que recibiera atenci¨®n m¨¦dica, en plena pandemia. Minutos despu¨¦s del fallecimiento su hija Luz Ang¨¦lica declar¨® a una radio que en su ciudad, Nieva, la sanidad no lo quiso atender.
La pandemia no deja de crecer y los infectados, m¨¢s vulnerables, siguen falleciendo. Los pueblos awaj¨²n y wamp¨ªs esperan, otra vez, que el Estado no los ponga en ¨²ltimo lugar.
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