Devolver la voz a una generaci¨®n olvidada

Hace falta un cambio de modelo en la atenci¨®n a los mayores que los ponga verdaderamente en el centro. A ellos y a sus proyectos de vida. Esta es una de las principales conclusiones de la jornada celebrada este jueves, organizada por EL PA?S, CincoD¨ªas y la Cadena Ser, bajo el t¨ªtulo ¡®Mayores: la generaci¨®n olvidada¡¯. La pandemia ha golpeado con fuerza al colectivo y ha revelado las deficiencias del sistema residencial, pero ya hab¨ªa problemas estructurales antes de esta crisis. Como la soledad no deseada. O la necesidad de potenciar una atenci¨®n a domicilio infradotada actualmente.

El evento, que ha contado con la colaboraci¨®n de Loter¨ªas y Apuestas del Estado, ha estado inaugurado por el secretario de Estado de Derechos Sociales, Ignacio ?lvarez, y se ha estructurado en dos mesas redondas y una entrevista. ¡°El modelo tiene que cambiar porque la gente va a exigir modelos de atenci¨®n m¨¢s novedosos y personalizados. El ¨¦xito de la nueva residencia debe residir en la humanizaci¨®n de la atenci¨®n¡±, ha apuntado Yolanda Mar¨ªa de la Fuente, catedr¨¢tica de Trabajo Social y de Servicios Sociales de la Universidad de Ja¨¦n, en el segundo de los debates, acerca de los cuidados y las redes de apoyo. ¡°Las residencias de mayores a veces derivan en una soledad no deseada¡±, ha a?adido.

¡°El hecho de que en una residencia tu autonom¨ªa, tu intimidad y tu privacidad queden en entredicho y que a veces no se pueden mantener relaciones con el espacio exterior es uno de los factores desencadenantes de soledad y depresi¨®n¡±, ha apuntado Gloria Fern¨¢ndez-Mayoralas, doctora en Geograf¨ªa Humana por la Universidad Complutense de Madrid e investigadora cient¨ªfica en el Instituto de Econom¨ªa, Geograf¨ªa y Demograf¨ªa. Sienten que pierden autonom¨ªa y la libre elecci¨®n de su cotidianeidad, ha a?adido la catedr¨¢tica, por ello los centros deber¨ªan ser la ¨²ltima opci¨®n. Ha coincidido con ella la directora de Atenci¨®n al Mayor y a la Dependencia en la Comunidad de Madrid, Bego?a Cort¨¦s: ¡°Les metemos en una vor¨¢gine de normas y les dejamos sin capacidad de decidir sobre cuestiones fundamentales.

Por ello, las tres ponentes de esta mesa redonda han destacado la necesidad de crear una dimensi¨®n de hogar para aquellas personas que por cuestiones de dependencia o soledad severa decidan vivir en una residencia. Este ha sido uno de los grandes debates durante la crisis sanitaria ocasionada por la covid. Asociaciones profesionales, sindicatos y patronales han reivindicado que los centros no pueden convertirse en peque?os hospitales, que la atenci¨®n m¨¦dica debe garantizarse a trav¨¦s del sistema de salud. La responsable de Dependencia de la Comunidad de Madrid ha considerado que medicalizar las residencias supone un obst¨¢culo a la hora de crear un ambiente c¨®modo para los mayores: ¡°Corremos el riesgo de que por sanitarizar las residencias demasiado las convirtamos en hospitales, de lo que deber¨ªamos huir. Tenemos que crear espacios confortables, que los mayores puedan sentir como un hogar¡±.

Las expertas han recalcado adem¨¢s que existen alternativas como las viviendas colaborativas ¡ªel llamado cohousing¡ª, que aportan una mayor integraci¨®n de los mayores. Aunque esta no es la ¨²nica soluci¨®n. ¡°Tenemos que ir hacia modelos m¨¢s modernos de atenci¨®n domiciliaria integral, servicios que empleen la rob¨®tica, la telemedicina y una red importante de apoyos tanto sociales como sanitarios¡±, ha reclamado De la Fuente.

El problema, han apuntado, est¨¢ en que la sociedad no coloca a los mayores en el centro del dise?o del sistema de atenci¨®n. ¡°Tendemos a hablar de dependencia, pero a veces se nos olvida la promoci¨®n de la autonom¨ªa, el conseguir que la persona tenga las capacidades para decidir sobre su propia vida¡±, ha aclarado Cort¨¦s. Hay que escuchar a los mayores. ¡°Se deben crear espacios donde puedan manifestar las necesidades que tienen previas a la dependencia y despu¨¦s, espacios de participaci¨®n como talleres y formaciones¡±, ha aclarado la directora general madrile?a.

Las tres han coincidido en se?alar que resulta fundamental fomentar el envejecimiento activo para que los mayores se desarrollen en su entorno. ¡°Hay cierta conciencia social de que una persona no puede aportar m¨¢s cuando deja su vida laboral, pero tenemos que contar con ellos, que nos muestren el camino¡±, ha apuntado Cort¨¦s. De la Fuente ha insistido en la necesidad de promover una pedagog¨ªa del envejecimiento. La catedr¨¢tica cree que se debe entender la vejez como una etapa de crecimiento personal y de desarrollo de la autonom¨ªa personal para decidir su propio proyecto de vida. Esto deriva en una postura activa con respecto a la sociedad. ¡°No deben dejar que los planes los dise?en terceros. Tiene que haber una militancia y deben convertirse en agentes de transformaci¨®n social¡±, ha se?alado.

Para ello es necesario desarrollar una red de recursos m¨¢s all¨¢ del sistema de atenci¨®n a la dependencia. Algo que resulta crucial para poder combatir la soledad no deseada. En Espa?a, m¨¢s de dos millones de mayores de 65 a?os viven solos, seg¨²n el Instituto Nacional de Estad¨ªstica. ¡°Se debe crear una red de apoyo desde los barrios, desde el farmac¨¦utico que en muchas ocasiones es un gran agente de apoyo de las personas mayores, hasta los quioscos y la vecindad en general¡±, ha apuntado Cort¨¦s. De esta manera, se hace m¨¢s eficiente la capacidad de detectar situaciones de soledad no deseada y peligros que normalmente no registra el sistema.

De la Fuente ha incidido en la importancia de articular ciudades m¨¢s amigables con los mayores, un concepto que maneja la Organizaci¨®n Mundial de la Salud para referirse a espacios inclusivos con el colectivo. ¡°Si tenemos que envejecer en una ciudad inteligente y humana, esa ciudad debe dar respuestas a las necesidades de la ciudadan¨ªa y, en este caso, de las personas mayores¡±, ha dicho. ¡°Es muy importante que la ciudad establezca puntos de encuentro donde podamos dar y recibir entre generaciones y gestionar nuestra vida en com¨²n¡±. Y ha zanjado: ¡°Si se hace de espaldas a las personas mayores se produce indiferencia y no hay discriminaci¨®n m¨¢s clara¡±.