Argentina, m¨¢s cerca de legalizar el aborto tras aprobarse en la C¨¢mara de Diputados
La marea verde en las calles estalla en v¨ªtores al conocer el resultado de la votaci¨®n despu¨¦s de m¨¢s de 20 horas de debate
¡°Aborto legal en el hospital¡±. Despu¨¦s de acompa?ar el debate legislativo en las calles durante 20 horas, la marea verde estall¨® en aplausos, c¨¢nticos y v¨ªtores al conocer el resultado de la C¨¢mara de Diputados: 131 votos a favor del proyecto de interrupci¨®n legal del embarazo, 117 en contra y seis abstenciones. Una diferencia m¨¢s amplia que dos a?os atr¨¢s, cuando se aprob¨® por 129 votos a favor y 125 en contra. Falta el ¨²ltimo obst¨¢culo, el Senado, que tendr¨¢ la palabra definitiva.
La fecha elegida para el debate ten¨ªa una gran carga simb¨®lica. El 10 de diciembre, D¨ªa internacional de los Derechos Humanos. Se cumpl¨ªa tambi¨¦n el primer aniversario de Alberto Fern¨¢ndez como presidente, el ¨²nico mandatario argentino en ejercicio que ha respaldado la legalizaci¨®n del aborto. Los diputados comenzaron a debatir alrededor de las once de la ma?ana en una sesi¨®n muy polarizada mientras miles de personas segu¨ªan sus intervenciones a trav¨¦s de pantallas gigantes en una plaza dividida en dos por vallas: a un lado, la marea verde a favor de la legalizaci¨®n del aborto. Del otro, los celestes que lo rechazan.
La norma aprobada por la C¨¢mara de Diputados regula el aborto libre hasta la semana 14 de gestaci¨®n. Y establece un plazo m¨¢ximo de 10 d¨ªas entre que se solicita la interrupci¨®n del embarazo y se la lleva a cabo.
¡°Nadie promueve el aborto, las mujeres no quieren llegar a esa situaci¨®n, mucho menos se usa el aborto como m¨¦todo anticonceptivo. Pero los abortos, por m¨²ltiples razones suceden. Resolver este tema en favor de las mujeres del pueblo implica que todas tengan acceso a un aborto seguro, es un problema de salud p¨²blica y justicia social¡±, defendi¨® el proyecto oficial el diputado Juan Carlos Alderete, del gobernante Frente de Todos, cerca de las dos de la madrugada.
Desde 1921, en Argentina el aborto es un delito penado con hasta cuatro a?os de c¨¢rcel excepto en caso de violaci¨®n o de riesgo para la vida de la madre. Aun as¨ª, cada a?o se realizan en Argentina entre 371.965 y 522.000 abortos, seg¨²n un informe de Human Rights Watch, y 39.000 mujeres argentinas tienen que ser hospitalizadas por complicaciones derivadas de los mismos. En 2018, la C¨¢mara de Diputados aprob¨® un proyecto de interrupci¨®n voluntaria del embarazo, pero el Senado la rechaz¨®. A diferencia de entonces, la iniciativa ha sido impulsada esta vez por el Gobierno y cuenta con el apoyo del presidente.
¡°Durante 100 a?os, los legisladores nos transformamos en inquisidores e hicimos un escrutinio moral. Le preguntamos a la mujer que viene a abortar si tuvo consentimiento o no a la hora de tener sexo. Eso ya fue ley en 1921. Hoy vamos a dejar de ser hombres de 1921. Nos vamos a resetear a 2020¡±, proclam¨® el diputado opositor Waldo Wolff. ¡°Estamos cruzando la ¨²ltima valla para el reconocimiento legal, pleno de la autonom¨ªa de las mujeres¡±, agreg¨® su colega Silvia Lospennato.
Desde que Argentina recuper¨® la democracia, en 1983, hasta la actualidad, m¨¢s de 3.000 mujeres han fallecido por abortar en Argentina. Una de ellas fue la abuela de la diputada Alicia Aparicio, quien la record¨® entre l¨¢grimas durante su discurso: ¡°Te lo deb¨ªa abuela, por vos, por todas las que perdieron su vida y por todas las mam¨¢s, abuelas, bisabuelas, tatarabuelas, y as¨ª hasta el fin de los tiempos. Entonces, pido: educaci¨®n para decidir, anticonceptivos para no abortar, aborto legal, seguro y gratuito para no morir. Que sea ley¡±.
Con argumentos religiosos y pol¨ªticos, los legisladores en contra de la legalizaci¨®n advirtieron que se trata de una ley inconstitucional y que de aprobarse el aborto se convertir¨¢ en un m¨¦todo anticonceptivo m¨¢s. Muchos sostuvieron adem¨¢s que no es el momento oportuno por la pandemia de covid-19 y la crisis econ¨®mica que atraviesan al pa¨ªs. ¡°Quiero defender a quien en toda esta situaci¨®n no tiene voz, no tiene la posibilidad de defenderse, que es el ni?o por nacer¡±, dijo el diputado opositor Federico Angelini. ¡°Con que cara nos vamos a espantar cuando un joven de 15 a?os mata a alguien por una bicicleta si el mensaje dirigencial es que la vida es relativa, que en nombre de la libertad se puede disponer de la vida por nacer, por cierto, la m¨¢s vulnerable¡±, agreg¨® la legisladora Graciela Cama?o casi al t¨¦rmino del debate.
Fuera del recinto, en el lado celeste, hubo cadenas de oraci¨®n, c¨¢nticos y gritos en contra del aborto. ¡°La vida no se debate¡±, dice una pancarta. ¡°Adoptar, no abortar¡±, puede verse en varios carteles. Cristina lleva uno de ellos. ¡°La vida empieza en la concepci¨®n y hay que defenderla. Argentina ya vot¨® hace dos a?os y vot¨® a favor de la vida, Argentina es celeste y volver¨¢ a demostrarlo esta vez¡±, dice convencida esta mujer de 37 a?os, que se moviliza junto a su marido.
¡°Ni una muerte m¨¢s por aborto clandestino¡±, puede leerse en una pancarta gigante en el lado verde. ¡°La maternidad ser¨¢ deseada o no ser¨¢¡±, dice otra. ¡°Estamos haciendo historia¡±, est¨¢ escrito en las camisetas de algunas militantes que pasaron la noche en vela, cantando y bailando en una gran fiesta callejera. Otras durmieron unas horas y se despertaron al amanecer, bajo una breve llovizna. Todas se pusieron en pie para escuchar la votaci¨®n.
¡°Estar ac¨¢ es un abrazo colectivo porque este fue un a?o dur¨ªsimo para el feminismo¡±, comentaba a media tarde Mar¨ªa Cristal, profesora de primaria, quien se ha acercado a la plaza con su hija adolescente. ¡°Hubo un gran retroceso para las mujeres, que fueron las que m¨¢s perdieron fuentes de laburo [trabajo] y las que lo conservaron tuvieron, tuvimos, que adaptarnos al teletrabajo y compatibilizarlo con el cuidado de les hijes y de abuelos y abuelas, ayudar con las tareas escolares, limpiar la casa... Necesitamos cerrar el a?o con una buena, conquistando el derecho al aborto legal, seguro y gratuito¡±, auguraba. ¡°Hace 100 a?os que tenemos la misma ley y las mujeres nunca dejaron de abortar. El debate no es aborto s¨ª o aborto no, es aborto legal o aborto clandestino. El Estado tiene una deuda hist¨®rica con nosotras y la tiene que cumplir¡±, exige Marina, de 16 a?os.
El feminismo conf¨ªa en que el apoyo gubernamental decante la balanza a favor de la legalizaci¨®n del aborto y contribuya a extender el debate a otros pa¨ªses de Am¨¦rica Latina. Los n¨²meros en la C¨¢mara alta parecen m¨¢s ajustados que en 2018, pero nadie da por segura la victoria.
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