S?o Paulo vive una situaci¨®n sanitaria ¡°de guerra¡±, sin camas ni medicamentos contra la covid-19
La ciudad m¨¢s rica de Brasil tiene las UCI de los hospitales privados saturadas, sin suministros y con pacientes en lista de espera
En S?o Paulo, la ciudad m¨¢s rica del pa¨ªs y con el sistema sanitario m¨¢s s¨®lido, los hospitales privados viven una ¡°situaci¨®n de guerra¡± y reflejan el ca¨®tico escenario de la pandemia en Brasil. El panorama es dram¨¢tico y algunos centros ya han llegado al l¨ªmite de la presi¨®n hospitalaria, sin camas UCI y colas de pacientes a la espera de que los trasladen a otros hospitales. Si este sector ya ten¨ªa dificultades para aumentar el n¨²mero de camas, esta semana se ha a?adido un problema preocupante incluso para las que ya existen: la escasez de medicamentos para intubar pacientes con covid-19, sin los que es inviable ponerles ventilaci¨®n mec¨¢nica invasiva para ayudarles a respirar.
En la sanidad p¨²blica el panorama no es mejor. Solo hay medicaciones para los pr¨®ximos 20 d¨ªas, un problema del que varios gobernadores han alertado al Ministerio de Sanidad en una carta en la que solicitan que se importen urgentemente las drogas necesarias. La Asociaci¨®n Brasile?a de Aseguradoras M¨¦dicas denuncia la misma situaci¨®n en S?o Paulo y presiona junto con otras asociaciones que se facilite la importaci¨®n. Los hospitales privados y las empresas de salud afirman que trabajan a diario con preocupaci¨®n por el aumento de la demanda y de los contagios. Eran m¨¢s de 680.000 casos hasta el ¨²ltimo mi¨¦rcoles, y m¨¢s de 20.000 muertos por covid en la ciudad de 12, 3 millones de habitantes. ¡°Si el ritmo de contagios sigue igual, aunque aument¨¢ramos miles de camas diarias [no dar¨ªamos abasto]... La ¨²nica soluci¨®n es concienciar a la poblaci¨®n¡±, dice Marcos Novais, superintendente ejecutivo de la asociaci¨®n.
Las escenas de colapso que se vieron en Manaos o en el nordeste de Brasil el a?o pasado, que a priori tienen menos recursos, se repiten ahora en S?o Paulo. No sirve de nada ser rico y pagar un buen seguro m¨¦dico, aunque la poblaci¨®n m¨¢s pobre es la que se ha visto m¨¢s afectada por la pandemia desde el inicio de la crisis. Ahora, incluso los hospitales privados ¡ªque atienden a personas con mayor poder adquisitivo¡ª empiezan a mostrar signos de colapso. ¡°Es una situaci¨®n de guerra¡±, define el presidente del Sindicato de Hospitales, Cl¨ªnicas y Laboratorios (SindHosp), Francisco Balestrin. Asegura que los centros privados est¨¢n actuando ¡°como si fueran hospitales de campa?a¡± debido al aumento considerable de pacientes en los ¨²ltimos 10 d¨ªas y algunos admiten que est¨¢n cerca o ya han alcanzado la capacidad m¨¢xima de ocupaci¨®n de las UCI.
¡°Es una situaci¨®n muy compleja. El hecho de que todas las camas est¨¦n ocupadas adquiere mayor importancia porque tenemos un elevado n¨²mero de casos diarios. No tenemos la pandemia bajo control, sino todo lo contrario. Esto genera m¨¢s demanda y, con las camas ocupadas, no se puede acomodar esta nueva demanda. Hoy las camas UCI permanecen ocupadas durante m¨¢s tiempo que antes¡±, a?ade. El d¨ªa 16 de marzo se produjeron 240 muertes por covid-19 en la ciudad, m¨¢s del doble que el d¨ªa anterior. La primera muerte oficial de la lista de espera para una UCI, anunciada por el alcalde Bruno Covas, se convirti¨® en un emblema de la situaci¨®n de la ciudad. Un joven de 22 a?os que entr¨® al hospital con problemas respiratorios por la covid el d¨ªa 11, pero no consigui¨® una cama. Muri¨® al d¨ªa siguiente sin la ventilaci¨®n que necesitaba.
La Secretar¨ªa Municipal de Sanidad confirma haber recibido, a lo largo de cuatro d¨ªas, 30 solicitudes de camas UCI y de enfermer¨ªa para pacientes con covid-19 por parte de hospitales privados, pero pondera que esto ¡°no indica a¨²n el agotamiento de la red privada¡±, aunque refleja la presi¨®n de la pandemia sobre la sanidad. Admite, sin embargo, que es algo ¡°sin precedentes¡±. Este jueves, el alcalde Bruno Covas relat¨® una fila de 475 personas a la espera de una cama de UCI en la ciudad.
Hasta el traslado de pacientes entre hospitales privados es problem¨¢tico, por la dificultad para aumentar el n¨²mero de camas mientras la demanda aumenta. Un estudio realizado por el SindHosp en el 25% de los hospitales privados afiliados al sindicato (93 centros) muestra que solo la mitad dice tener capacidad para aumentar el n¨²mero de camas y el 82% ya tiene m¨¢s del 91% de sus plazas ocupadas. Hay problemas incluso para garantizar la atenci¨®n a los pacientes que ya tienen una: hay dificultades para garantizar medicamentos para intubar a los pacientes, adem¨¢s de equipos con profesionales especializados. Las aseguradoras m¨¦dicas ya han convertido enfermer¨ªas y hasta quir¨®fanos en UCI, pero aun as¨ª las camas se ocupan r¨¢pidamente.
¡°No es solo una cuesti¨®n de camas. Tambi¨¦n se necesita una infraestructura de UCI y profesionales especializados. Las medicinas para intubar se han convertido en la principal preocupaci¨®n. Estamos trabajando para aumentar el n¨²mero de camas, pero no daremos abasto si la gente no se cuida¡±, afirma Novais. Una cama solo queda libre cuando alguien recibe el alta o fallece y, seg¨²n Balestrin, el tiempo de hospitalizaci¨®n es mayor en este momento, marcado por el crecimiento del n¨²mero de j¨®venes hospitalizados, incluso en camas UCI. ¡°Son m¨¢s resistentes, pero, por alguna raz¨®n, esta enfermedad se ha vuelto m¨¢s violenta y acaban qued¨¢ndose m¨¢s tiempo. Tenemos m¨¢s camas y tambi¨¦n muchos m¨¢s pacientes¡±.
En el Hospital Nipo-Brasileiro, por ejemplo, todas las camas UCI para covid-19 y para otras enfermedades est¨¢n ocupadas. El pasado mi¨¦rcoles, hab¨ªa 25 pacientes en urgencias que esperaban una cama. El Nipo-Brasileiro dice que a diario busca vacantes en otros hospitales de la ciudad porque ha alcanzado el l¨ªmite de ocupaci¨®n. El hospital estaba en la lista de los 15 centros privados que habr¨ªan derivado a pacientes a hospitales p¨²blicos, pero explica que lo hizo porque los pacientes no ten¨ªan seguro m¨¦dico y no pod¨ªan afrontar los costes como particulares.
La sanidad privada admite tener limitaciones tanto para expandir como para mantener la estructura existente. Tambi¨¦n tiene dificultades para garantizar las existencias de medicamentos para sedar a los pacientes intubados y de f¨¢rmacos que funcionan como bloqueadores neuromusculares, necesarios para que el paciente no ¡°se pelee con el ventilador¡± y respire al ritmo de la ventilaci¨®n mec¨¢nica. ¡°Hay f¨¢rmacos que han aumentado casi un 900%. Reabastecerse es complicado¡±, dice Balestrin. Menciona la disputa mundial por estos medicamentos, que, a pesar de producirse en Brasil, dependen de la importaci¨®n de la materia prima desde India y China. Otro problema es la dificultad para garantizar equipos especializados en cuidados intensivos. ¡°Cada vez son m¨¢s los hospitales que dicen haber llegado a su l¨ªmite de expansi¨®n¡±, dice el presidente de Sindhosp.
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