El descontrol de la primera noche sin estado de alarma despierta el temor a que la seguridad se relaje tambi¨¦n en bares y reuniones en casas

Las escenas festivas de la primera noche sin estado de alarma despu¨¦s de seis meses y medio dieron paso a un d¨ªa indiferenciable de cualquier otro de las semanas previas. Las plazas de medio pa¨ªs abarrotadas de j¨®venes haciendo botell¨®n o las 450 intervenciones policiales en Madrid contrastaron con una jornada de resaca lluviosa y de mal tiempo en pr¨¢cticamente toda Espa?a, que dej¨® en sus casas a muchas personas que por primera vez se pod¨ªan mover por ocio entre comunidades.

Los expertos en salud p¨²blica consultados miran con m¨¢s preocupaci¨®n todas las dem¨¢s actitudes ciudadanas que pueden venir asociadas al fin del estado de alarma que las im¨¢genes de los botellones y el alcohol en las primeras horas sin toque de queda. Esta medida solo est¨¢ vigente en tres comunidades (Baleares, Comunidad Valenciana y Navarra, esta ¨²ltima, a la espera de aval judicial), despu¨¦s de que el TSJ de Canarias la haya tumbado en esta autonom¨ªa este domingo. El vicepresidente de Castilla y Le¨®n, Francisco Igea (Ciudadanos), ha indicado que su Gobierno contemplar¨ªa pedir un toque de queda para el territorio si el Tribunal Supremo aprueba esta medida para otras autonom¨ªas. ¡°Si llegara ese caso, ver¨ªamos, pero antes hay que esperar a lo que diga el Supremo¡±, ha declarado este domingo.

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Qu¨¦ se puede hacer y qu¨¦ no en cada comunidad

Lo previsible, dicen los expertos consultados, es una subida de diagn¨®sticos en unos 10 d¨ªas, pero el nuevo escenario, con cada vez m¨¢s personas protegidas por las vacunas y la infecci¨®n natural, hace dif¨ªcil prever su magnitud y qu¨¦ reflejo tendr¨¢ en los hospitales. Manuel Franco, portavoz de la Sociedad Espa?ola de Salud P¨²blica, recuerda que todas las olas epid¨¦micas han llegado a Espa?a tras levantar restricciones que dificultaban a los ciudadanos viajar y reunirse libremente. No cree que lo que pase en el futuro vaya a ser una excepci¨®n. ¡°Pero este virus no ha parado de sorprendernos. La tercera ola fue mucho m¨¢s dura de lo que esper¨¢bamos, y la cuarta, m¨¢s leve. Habr¨¢ que aguardar para comprobar qu¨¦ sucede a partir de ahora¡±, afirma.

En opini¨®n de Franco, las celebraciones de la madrugada del s¨¢bado al domingo son las ¡°esperables¡± en una juventud que lleva meses de restricciones que han afectado especialmente a su forma de divertirse y socializar. ¡°Es un estallido de j¨²bilo bastante entendible. La fatiga pand¨¦mica les ha afectado a ellos tambi¨¦n¡±, explica. Su preocupaci¨®n va m¨¢s all¨¢ de estas im¨¢genes y se fija en lo que quiz¨¢s no es tan visible, como las reuniones en casas o en bares. ¡°Llevamos viendo semanas bares y restaurantes llenos, con gente sin mascarillas, especialmente en sitios como Madrid¡±, se?ala.

Las im¨¢genes de la madrugada fueron tachadas de ¡°lamentables¡± por el alcalde de Madrid, Jos¨¦ Luis Mart¨ªnez-Almeida. El secretario general de CC OO de Madrid, Jaime Cedr¨²n, ha culpado de lo sucedido ¡°al discurso gamberro¡± de la presidenta regional en funciones, Isabel D¨ªaz Ayuso. M¨®nica Garc¨ªa, l¨ªder de la oposici¨®n en la comunidad, se ha sumado al debate en Twitter criticando la ¡°criminalizaci¨®n¡± de la juventud. ¡°Ni antes fueron los culpables de llevar a los abuelos a las UCI, como aseguraba la campa?a del gobierno del PP, ni ahora son el mayor reflejo de la irresponsabilidad¡±, ha dicho.

Fernando Rodr¨ªguez Artalejo, catedr¨¢tico de Medicina Preventiva en la Universidad Aut¨®noma de Madrid, asegura que en las fiestas sin protecci¨®n de este s¨¢bado es probable que se produjeran ¡°bastantes contagios¡±. ¡°Afect¨® sobre todo a gente muy joven, ahora ellos deber¨ªan extremar sus precauciones evitando contagiar a gente mayor a¨²n con insuficiente inmunidad. Por otro lado, estas conductas, conf¨ªo y deseo, que se limiten mucho en las pr¨®ximas semanas, porque si no el nivel actual de inmunidad colectiva no podr¨¢ controlar la transmisi¨®n comunitaria¡±, a?ade.

El epidemi¨®logo Javier del ?guila cree que el mayor problema en adelante puede venir por un contagio de actitudes en las que la ciudadan¨ªa perciba que el fin del estado de alarma equivale a la conclusi¨®n de la pandemia. ¡°Quiz¨¢s ha habido una falta de pedagog¨ªa. ?Es pronto para haberlo terminado? No estoy del todo de acuerdo. ?Se podr¨ªa haber mantenido un mes m¨¢s? A lo mejor, pero con otras caracter¨ªsticas, con medidas distintas en cada comunidad y explicando todo esto muy bien¡±, se?ala.

El fin de la situaci¨®n excepcional ha llegado con un panorama muy dispar en el territorio nacional. Aunque la incidencia en Espa?a comenz¨® a caer esta semana, la tendencia todav¨ªa es muy d¨¦bil, despu¨¦s de otras dos semanas de estancamiento. El viernes, ¨²ltimo d¨ªa con datos oficiales, hab¨ªa en todo el pa¨ªs una media de 198 casos por 100.000 habitantes en los ¨²ltimos 14 d¨ªas, lo que seg¨²n el sem¨¢foro del Ministerio de Sanidad (entre otros indicadores) suponen un ¡°riesgo alto¡±. Y la situaci¨®n en cinco comunidades aut¨®nomas (Madrid, Catalu?a, Navarra, Arag¨®n y el Pa¨ªs Vasco, adem¨¢s de Melilla) supera los 250, lo que equivale a ¡°muy alto¡±. Baleares, Canarias, Extremadura, Galicia, Murcia y la Comunidad Valenciana est¨¢n por debajo de 100. Esta ¨²ltima es la ¨²nica que mantiene una incidencia inferior a 50, lo que se considera ¡°riesgo bajo¡±.

Los primeros movimientos sin estado de alarma

Aunque el d¨ªa lluvioso no ha permitido en general grandes escenas de ocio tras el estado de alarma, ya se han producido los primeros movimientos. ¡°Ha sido abrir la veda y venirnos para ac¨¢¡±. La malague?a Mar¨ªa Dolores Quirante resum¨ªa este domingo por la ma?ana la motivaci¨®n de su viaje a C¨¢diz, sentada en un banco junto a su marido en una encapotada ma?ana. Aunque ellos, como el resto de andaluces, pod¨ªan viajar por la regi¨®n desde el pasado fin de semana, han esperado al fin de semana de ca¨ªda total de restricciones para hacer su primer viaje desde finales de 2020. Como ellos, otros andaluces, madrile?os y catalanes han animado las calles de localidades como El Puerto de Santa Mar¨ªa, una de las mecas costeras de turismo nacional en la provincia de C¨¢diz. Ciudades como El Puerto, Chiclana de la Frontera, Conil de la Frontera o Tarifa han sentido el incremento de visitantes en este fin de semana. ¡°Se ha notado mucho m¨¢s movimiento. El viernes la playa estaba muy concurrida de ba?istas y estos d¨ªas hay mucho ambiente de kite. En las zonas urbanas mucho movimiento de personas consumiendo¡±, resume Francisco Ruiz Gir¨¢ldez, alcalde de Tarifa.

Rafael Matute, propietario del bar Tasca Matute en El Puerto, ya ve¨ªa venir el incremento de clientes. ¡°Hemos hecho previsi¨®n de g¨¦nero tanto para ahora como para el verano, ya que vemos venir que va a ser un verano fuerte¡±, asegura Matute. En las mismas previsiones se mueve Ignacio Mart¨ªn, director de Barcel¨® en la provincia de C¨¢diz, donde la cadena tiene cinco hoteles, uno de ellos a punto de inaugurarse en Conil. ¡°Este verano, sin caer en un optimismo infundado, va a ser mejor que 2020, aunque las previsiones no son de una gran mejor¨ªa¡±, explica Mart¨ªn. Por ahora, la cadena a¨²n no ha reabierto su hotel Barcel¨® Royal Hideaway, ubicado en una de las grandes zonas de hoteles de Chiclana, pero el director nota ya las ganas de viajar a C¨¢diz. ¡°Desde el fin de semana pasado se ha empezado a activar el flujo de reservas y este fin de semana ha subido. A¨²n est¨¢ por debajo de lo que era habitual, aunque son noticias alentadoras. No es el ritmo deseado, pero empieza a reactivarse¡±, apunta Mart¨ªn.

Las estaciones de tren no han registrado grandes aglomeraciones, tampoco en la frontera con Francia. Las fronteras han estado muy tranquilas y ni en Behobia ni en el puente de Santiago, en Irun, se han producido colas para comprar tabaco, alcohol o jabones. El sol s¨ª ha brillado en Almer¨ªa, donde los chiringuitos estaban llenos, pero mayoritariamente de personas de la misma provincia, con algunos extranjeros, seg¨²n han comentado en varios restaurantes.

Una abuela conoce a su nieta en el and¨¦n de la estaci¨®n del AVE de Valencia

En Valencia se ha vivido alguna escena emocionante de reencuentro familiar en la estaci¨®n del AVE, tras el fin del estado de alarma y el levantamiento del cierre perimetral. Es el caso de Carmen, que ha conocido en el and¨¦n a su nieta Jimena, de apenas un mes y medio de edad. La emoci¨®n se ha desbordado esta tarde cuando la hija, que vive en Segovia, ha bajado del tren procedente de Madrid, cargada con una voluminosa mochila y empujando un carrito con el beb¨¦. Una t¨ªa de la ni?a se ha unido a los abrazos y a los saludos. ¡°Y ahora, a conocer al abuelo¡±, ha dicho una de ellas.

Las muestras de emoci¨®n han concitado la atenci¨®n de los viajeros y de las pocas personas que estaban esperando en el and¨¦n. Igual ha pasado con el tren anterior procedente de Madrid, que ha llegado sobre las 17.20 horas. Una mujer y dos ni?os esperaban nerviosos, caminando arriba y abajo del and¨¦n. Cuando el padre ha cruzado la puerta con sus maletas, los cuatro se han fundido en un abrazo en uno de los laterales. Uno de los ni?os, de corta edad, no dejaba de llorar sin que el padre pudiera consolarlo y sin que ¨¦l pudiera hablar tampoco, embargado por la emoci¨®n. Al poco, se han marchado todos juntos, ajenos a todos los dem¨¢s.

Los escasos reencuentros familiares que se han podido ver en la estaci¨®n han animado una tarde desapacible y lluviosa, que ha truncado los planes m¨¢s playeros y en la que la vida en la ciudad no ha variado apenas con respecto a los d¨ªas con el estado de alarma.

Informaci¨®n de FERRAN BONO. Fotograf¨ªa de KIKE TABERNER

Con informaci¨®n de Guillermo Vega, Pedro Gorospe, Nacho S¨¢nchez, Juan Navarro y Eva Saiz.