La decisi¨®n sobre AstraZeneca, ahora en manos del Comit¨¦ de Bio¨¦tica, divide a autonom¨ªas y cient¨ªficos
El ministerio acepta la propuesta de Madrid y Andaluc¨ªa, y los vacunados con el f¨¢rmaco anglo-sueco podr¨¢n elegir recibir la misma vacuna si el ¨®rgano avala la decisi¨®n
El Ministerio de Sanidad ha puesto en manos del Comit¨¦ de Bio¨¦tica de Espa?a una decisi¨®n clave para que 1,5 millones de trabajadores esenciales menores de 60 a?os que recibieron la primera dosis de AstraZeneca puedan completar su pauta vacunal frente al coronavirus. Ser¨¢ con una segunda dosis de Pfizer, como acord¨® el martes la Comisi¨®n de Salud P¨²blica, u otra vez con la de AstraZeneca, s¨ª as¨ª lo solicita el ciudadano ...
El Ministerio de Sanidad ha puesto en manos del Comit¨¦ de Bio¨¦tica de Espa?a una decisi¨®n clave para que 1,5 millones de trabajadores esenciales menores de 60 a?os que recibieron la primera dosis de AstraZeneca puedan completar su pauta vacunal frente al coronavirus. Ser¨¢ con una segunda dosis de Pfizer, como acord¨® el martes la Comisi¨®n de Salud P¨²blica, u otra vez con la de AstraZeneca, s¨ª as¨ª lo solicita el ciudadano y firma un consentimiento informado. El Comit¨¦, previsiblemente, tomar¨¢ una decisi¨®n esta misma semana.
En cualquier caso, ha dicho la ministra Carolina Darias tras el Consejo Interterritorial celebrado el mi¨¦rcoles por la tarde, es ¡°imprescindible¡± para Sanidad que Bio¨¦tica avale una posibilidad que hasta ahora hab¨ªa rechazado de plano: que el ciudadano pueda elegir la vacuna a recibir.
Sanidad sale as¨ª al paso de la presi¨®n de las comunidades del PP, como Madrid y Andaluc¨ªa, que hab¨ªan solicitado repetidamente la posibilidad de completar la vacunaci¨®n con AstraZeneca. La Junta andaluza, incluso, hab¨ªa anunciado que empezar¨¢ a usar este suero la semana que viene.
Cuando han pasado 73 d¨ªas desde que el Ministerio de Sanidad y las comunidades decidieron el 7 de abril dejar de administrar el f¨¢rmaco de AstraZeneca, el debate ya no es solo m¨¦dico, sino tambi¨¦n ¨¦tico y pol¨ªtico. La segunda dosis no solo ha dividido a las comunidades, sino que tambi¨¦n ha hecho evidentes diferencias entre la clase m¨¦dica hasta ahora no vistas en relaci¨®n con la pandemia.
Tras la detecci¨®n de los primeros casos de trombos, que han sido muy infrecuentes en personas que hab¨ªan recibido una primera dosis de AstraZeneca, algunos pa¨ªses europeos pasaron a utilizar el suero de Pfizer en la segunda. Es el caso, entre otros, de Francia, Suecia y Alemania, aunque en este ¨²ltimo caso posteriormente volvi¨® a recomendarse para toda la poblaci¨®n adulta.
Otros, como Italia, siguieron administrando la de AstraZeneca, como desde el principio hab¨ªa hecho ya el Reino Unido. Espa?a apost¨® por una v¨ªa intermedia: retras¨® de 12 a 16 semanas el plazo para administrar la segunda dosis a la espera de un estudio, llamado CombivacS y llevado a cabo por el Instituto de Salud Carlos III, para comprobar la seguridad de lo que ya hab¨ªan hecho Francia, Suecia y Alemania.
La cuesti¨®n, apuntan muchos expertos, es que ¡°el estudio no aporta luz al origen del problema, que era la seguridad de la vacuna de AstraZeneca, sino que confirma la seguridad de sustituirla por la de Pfizer¡±, explica Jos¨¦ Luis Barranco, portavoz de la Sociedad Espa?ola de Medicina Preventiva, Salud P¨²blica e Higiene (SEMPSPH).
El sentir es com¨²n entre la mayor¨ªa de los expertos: el CombivacS es un estudio t¨¦cnicamente muy bueno, como se reconoce a los que realiza el Instituto Carlos III, pero ni por dise?o, ni tama?o de la muestra (600 personas), ni disponibilidad de tiempo pod¨ªa aportar la respuesta que muchos esperaban. Es decir, si era seguro o no administrar la segunda dosis de AstraZeneca a los 1,5 millones de trabajadores esenciales que hab¨ªan recibido la primera.
¡°Seguimos pensando que lo m¨¢s conveniente era poner la segunda dosis de AstraZeneca¡±, afirma Elena Vanessa Mart¨ªnez, presidenta de la Sociedad Espa?ola de Epidemiolog¨ªa (SEE). ?ngela Dom¨ªnguez, coordinadora de vacunas de esta sociedad, recuerda que la Agencia Europea del medicamento (EMA) ¡°ha analizado los eventos adversos registrados y concluy¨® que no hab¨ªa ning¨²n motivo para desaconsejar la vacuna¡±. ¡°Por cada mill¨®n de dosis se han registrado 3,4 efectos adversos tromb¨®ticos, cifra que desciende a menos de un mill¨®n en las segundas dosis. Como referencia, el 16% de los infectados por el virus sufren trombosis¡±, detalla.
Con similares argumentos, 17 sociedades cient¨ªficas espa?olas criticaron a principios de mes los vaivenes dados con la segunda dosis de AstraZeneca. ¡°No hay evidencias cient¨ªficas que permitan delimitar franjas de edad concretas (en mayores de 18 a?os) en las que no est¨¦ indicado administrar alguna de las vacunas para la covid-19 de distribuci¨®n en nuestro entorno¡±, sosten¨ªa el comunicado que hicieron p¨²blico.
El portavoz de la SEMPSPH s¨ª ve en cambio motivos para limitar el uso de la vacuna de AstraZeneca. ¡°En los datos analizados por la EMA se ve¨ªa que en algunos escenarios con incidencias bajas y entre gente m¨¢s joven era m¨¢s probable tener un trombo por la vacuna que evitar alguna hospitalizaci¨®n. Ah¨ª yo s¨ª entiendo que las autoridades de Salud P¨²blica tienen que pensar qu¨¦ hacer¡±, explica Barranco.
¡°Todo lo que est¨¢ ocurriendo es fruto de la complejidad que tiene el abordaje de una pandemia en un escenario complejo y din¨¢mico¡±, sostiene por su parte Amos Garc¨ªa, presidente de la Sociedad Espa?ola de Vacunolog¨ªa (AEV). Este experto considera que, pese a todo, ¡°se va perfilando un modelo de intervenci¨®n ajustado a la realidad y las necesidades¡±.
Una de las consecuencias negativas que los expertos achacan a las variaciones sobre la vacuna de AstraZeneca son los recelos que puede generar entre la poblaci¨®n. ¡°Se ha producido una creciente tensi¨®n social de desconfianza hacia las vacunas, motivada, en parte, por las decisiones cambiantes en cuanto a las franjas de edad en que pod¨ªa administrarse¡± cada uno de los f¨¢rmacos, alertaban las 17 sociedades cient¨ªficas.
Preocupa no tanto el rechazo que esto pueda generar entre los menores de 60 a?os ¡ªla mayor¨ªa de los cuales ya no la va a recibir¡ª, sino entre el colectivo que est¨¢ siendo inmunizado de forma masiva con este suero: el de 60 a 69 a?os. Los datos m¨¢s precisos sobre este problema los tiene el Hospital General de Valencia. ¡°Hemos preguntado de forma activa a las personas de esta edad las razones por las que no se vacunaban y en casi el 10% de los casos la respuesta es que no quieren la vacuna de AstraZeneca, pero que s¨ª se inmunizar¨ªan con Pfizer¡±, explica el jefe de servicio de Medicina Preventiva del centro, Jos¨¦ Luis Alfonso.
Algunas comunidades han ofrecido cifras m¨¢s altas. La Junta de Andaluc¨ªa afirma que ¡°el 15% de los 916.147 ciudadanos de entre 60 y 69 a?os han rechazado inmunizarse con la vacuna de AstraZeneca¡±. Un porcentaje que est¨¢ disminuyendo y ¡°que lleg¨® a ser del 25%¡±.
En Murcia, la mitad de las 8.000 personas de esa edad que estaban citadas para inmunizarse el pasado fin de semana no acudieron a la cita, confirma un portavoz del Gobierno regional; mientras en la Comunidad Valenciana ¡°un 20% de personas que no han acudido a la cita para vacunarse tras ser convocadas por la Generalitat mediante mensajes SMS o por llamadas telef¨®nicas¡±.
Con estas ¨²ltimas estimaciones, sin embargo, no es posible distinguir entre quien no acude a vacunarse por recelos con el suero de AstraZeneca y por otras razones. Seg¨²n los datos del Ministerio de Sanidad, mientras el 95,7% de la poblaci¨®n de entre 70 y 79 a?os ya ha recibido al menos una dosis (en este grupo la m¨¢s utilizada es la de Pfizer, aunque en menor medida tambi¨¦n ha sido utilizada la de Janssen), entre la de 60 a 69 a?os (mayormente vacunado con AstraZeneca) este porcentaje es menor en 10 puntos (el 85,6%).
Aunque con los datos disponibles no sea posible precisar m¨¢s la proporci¨®n de no vacunados debido al rechazo a AstraZeneca, todos los expertos coinciden en que por peque?o que sea, en un grupo formado por 5,7 millones de personas, ¡°hay un evidente riesgo de que se cree una bolsa importante de poblaci¨®n de elevado riesgo sin vacunar¡±, precisa Alfonso.
Con informaci¨®n de Luc¨ªa Boh¨®rquez, Ferran Bono, Javier Mart¨ªn Arroyo, Juan Navarro, Isabel Vald¨¦s y Guillermo Vega.