Alemania endurece las restricciones a los no vacunados y obligar¨¢ a inmunizarse a sanitarios y trabajadores de residencias
La presi¨®n hospitalaria fuerza por primera vez a trasladar pacientes al extranjero. ¡°La Navidad ser¨¢ muy dura¡±, pronostica el presidente del organismo cient¨ªfico que asesora al Gobierno
Alemania se empieza a ver superada por la fuerza de la cuarta ola de coronavirus. El ritmo de contagios parece imparable; cada d¨ªa se pulveriza el r¨¦cord anterior mientras los hospitales sufren sobrecargas que no hab¨ªan experimentado ni en lo peor del invierno pasado. El n¨²mero de contagios, que este jueves ha marcado otro m¨¢ximo, con 65.371 diagn¨®sticos, preocupa enormemente porque la curva es ascendente, casi vertical, y no parece que vaya a llegar al pico en los pr¨®ximos d¨ªas.
La incidencia, ahora en 337 casos por 100.000 habitantes en siete d¨ªas (lo que equivaldr¨ªa aproximadamente a 674 en dos semanas, como se suele medir en Espa?a, donde est¨¢ en 104), empez¨® a crecer a mediados de octubre pese a las advertencias de epidemi¨®logos y expertos en salud p¨²blica, que ped¨ªan no relajar las restricciones ante la llegada del fr¨ªo. Ante la alarmante situaci¨®n hospitalaria, las autoridades est¨¢n volviendo a aplicar medidas para tratar de contener los contagios. El Gobierno y los l¨ªderes de los Estados federados han acordado en una reuni¨®n de emergencia la necesidad de imponer la vacunaci¨®n obligatoria del personal sanitario y del que trabaja en residencias de mayores. Adem¨¢s, se extender¨¢n las restricciones para los no vacunados cuando se superen determinados niveles de incidencia y de hospitalizaciones.
El objetivo es dificultarles la vida social en lugares p¨²blicos para forzarles a que se inmunicen. No podr¨¢n acceder a locales de restauraci¨®n, cines, teatros y actos culturales en interiores quienes no puedan demostrar estar vacunados o haber pasado la enfermedad en los seis meses anteriores. Algunos Estados, como Berl¨ªn, ya aplican esta regla desde el lunes pasado ante el aumento de los contagios y la sobrecarga de los hospitales, por lo que es una novedad relativa. El objetivo de la reuni¨®n entre la canciller en funciones, Angela Merkel, con los l?nder era uniformizar las restricciones y actuar con criterios comunes. ¡°Estamos en una situaci¨®n muy grave¡±, asegur¨® la canciller: ¡°Es el momento de actuar¡±. El texto acordado recomienda extender de nuevo el teletrabajo, exigir certificado covid o test negativo para viajar en autobuses y trenes y plantea remunerar con una paga extra a los trabajadores sanitarios, especialmente a las enfermeras de cuidados intensivos.
El Bundestag (c¨¢mara baja del Parlamento alem¨¢n) tambi¨¦n ha aprobado este jueves la nueva ley de infecciones, que sustituye a la que se aprob¨® al inicio de la pandemia para dar cobertura legal a las restricciones y expira el pr¨®ximo d¨ªa 25. El texto permite que las regiones adapten las medidas a su situaci¨®n epid¨¦mica.
Hospitales desbordados
Los centros sanitarios en algunas regiones se est¨¢n viendo desbordados. Un hospital b¨¢varo ha tenido que trasladar a dos enfermos graves de covid-19 a otros centros de Italia por falta de camas en la unidad de cuidados intensivos. Es la primera vez que ocurre en un pa¨ªs que en anteriores olas pudo ayudar a sus vecinos ingresando a enfermos extranjeros. Ahora ha sucedido al rev¨¦s. El hospital de Frisinga, a 40 kil¨®metros al norte de M¨²nich, no encontr¨® puestos libres en los hospitales alemanes cercanos y tuvo que enviar a un paciente en helic¨®ptero a Bolzano, y a otro en ambulancia a Merano, en el norte de Italia. ¡°Falta personal. Estamos m¨¢s agobiados que el invierno pasado y sabemos que la situaci¨®n va a empeorar¡±, asegur¨® por tel¨¦fono el portavoz del centro.
El dram¨¢tico llamamiento a la acci¨®n de Lothar Wieler, el presidente del Instituto Robert Koch (RKI), ha causado impresi¨®n en un pa¨ªs que no est¨¢ muy acostumbrado a que apelen a sus emociones. ¡°La Navidad ser¨¢ muy dura¡±, asegur¨® en un encuentro digital el mi¨¦rcoles por la noche. El v¨ªdeo se ha hecho viral. El jefe del RKI, el organismo que asesora al Gobierno en materia de enfermedades infecciosas, suele mostrarse comedido en sus apariciones p¨²blicas, pero anoche quiso ser muy claro: ¡°Nunca hemos estado tan preocupados como ahora¡±, insisti¨®. Muchos hospitales, como la Charit¨¦, en Berl¨ªn, ya han suspendido cirug¨ªas programadas. Pero siguen llegando enfermos con un infarto o un ictus, o accidentados, que necesitan una cama en cuidados intensivos. Wieler explic¨® que se tarda horas en encontrarles un puesto libre.
¡°Los pron¨®sticos son extremadamente sombr¨ªos¡±, asegur¨®, contrito, el jefe del RKI. ¡°Estamos en situaci¨®n de emergencia y quien no lo vea estar¨¢ cometiendo un grave error¡±. En una rueda de prensa anterior al v¨ªdeo viral, Wieler hab¨ªa calculado las muertes que seguir¨¢n en unas semanas a los datos de contagios actuales. La tasa de fallecimientos es de alrededor del 0,8% en Alemania, lo que quiere decir que ocho de cada 1.000 infectados no sobreviven. ¡°Esto significa que de los 52.000 [el dato del mi¨¦rcoles] contagios diarios que tenemos, 400 personas morir¨¢n¡±, advirti¨® el experto.
Falta de personal para atender las UCI
El problema de los hospitales alemanes no radica en las camas. El pa¨ªs tiene una de las mejores ratios de Europa de puestos de UCI por habitante, sobre el papel. En realidad, muchas est¨¢n inutilizadas porque no hay personal para atenderlas. Seg¨²n los ¨²ltimos datos disponibles, el pa¨ªs cuenta con unas 21.000 camas de cuidados intensivos, 6.300 menos que hace un a?o. Ralf Berning, enfermero de cuidados intensivos en un hospital de Bielefeld, cont¨® el mi¨¦rcoles en uno de los programas de mayor audiencia en la televisi¨®n p¨²blica que la falta de personal especializado, sobre todo enfermeras, es dram¨¢tica. En su unidad, por ejemplo, hay 16 puestos, pero solo pueden aceptar a 10 pacientes. La situaci¨®n es especialmente complicada en Baviera, Turingia y Sajonia, en el sur y el este del pa¨ªs, donde se registran las peores cifras de contagios.
¡°Los expertos ven¨ªamos advirtiendo de que esto pod¨ªa suceder. Ya en verano nos preocupaba el ritmo de vacunaci¨®n¡±, lamenta la epidemi¨®loga Eva Grill, de la Universidad Ludwig Maximilian de M¨²nich. En Alemania llegaron a ponerse un mill¨®n de dosis al d¨ªa antes de las vacaciones estivales, pero despu¨¦s el ritmo se estanc¨®. ¡°Todav¨ªa hay muchas personas que tienen dudas sobre la vacuna¡±, asegura. Entre los reacios a inmunizarse hay seguidores de la ultraderecha, personas que creen en la medicina alternativa y otros que se lo est¨¢n pensando ¡°y todav¨ªa se les puede convencer¡±. Es dif¨ªcil prever cu¨¢ndo se estabilizar¨¢n los contagios, a?ade: ¡°Todo depender¨¢ de las restricciones que se impongan y de lo r¨¢pido que consigamos vacunar a los millones que faltan. La vacuna es crucial. Es la forma de salir de esta¡±.
El RKI avis¨® ya a finales de julio de que la cuarta ola podr¨ªa superar a las anteriores si la tasa de vacunaci¨®n no mejoraba. Alemania tiene, junto con otros pa¨ªses de habla germana, como Austria y Suiza, los peores porcentajes de inmunizados de la Europa occidental. Solo el 67,8% de su poblaci¨®n est¨¢ completamente vacunada (frente a un 80% de Espa?a). En los ¨²ltimos d¨ªas, ante la amenaza de que los no vacunados vean limitada su vida social, han vuelto a verse colas en algunos centros. La tasa de pinchazos por 100.000 habitantes ha aumentado ligeramente. Varios Estados federados se hab¨ªan adelantado a la reuni¨®n con la canciller y ya hab¨ªan impuesto la llamada regla 2G: para entrar a bares, restaurantes, espect¨¢culos y actividades culturales se exige estar vacunado o un certificado de haber pasado la enfermedad en los ¨²ltimos seis meses. La capital, Berl¨ªn, impuso la nueva regla este lunes. Ya no es v¨¢lido presentar un test negativo a la entrada de cualquier establecimiento, lo que permit¨ªa a los no vacunados seguir haciendo vida social en interiores.
Las autoridades locales est¨¢n aprobando todo tipo de restricciones, como la vuelta a las mascarillas en los colegios, o la necesidad de que los alumnos se hagan test de ant¨ªgenos peri¨®dicamente para detectar infecciones asintom¨¢ticas. Tambi¨¦n se han suspendido numerosos espect¨¢culos y actos festivos, como los tradicionales mercadillos de navidad que se instalan en estas fechas en todas las ciudades alemanas. La ausencia de medidas comunes ha sido muy criticada en las ¨²ltimas semanas. El Gobierno saliente de Angela Merkel no ha conseguido reunirse con los presidentes regionales hasta este jueves, mientras que el probable nuevo Ejecutivo, un tripartito formado por socialdem¨®cratas, verdes y liberales, ha rechazado extender la llamada ¡°situaci¨®n epid¨¦mica de alcance nacional¡±, que permite a los Estados introducir restricciones sin la aprobaci¨®n previa de sus parlamentos.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.