Espa?a registra hasta 400.000 actos de violencia sexual en un a?o

Insinuaciones de un desconocido al salir de clase. Tocamientos en la discoteca o en el metro. Acoso en el trabajo. Un exhibicionista. Forzar a la novia a una felaci¨®n. Abusar sexualmente de una ni?a de la familia. Pedir fotos desnuda a una menor por el m¨®vil. Violar a la esposa. La trata con fines de explotaci¨®n sexual. Agredir sexualmente y matar a una desconocida. La violencia sexual abarca un abanico ampl¨ªsimo de actos no consentidos de los que, adem¨¢s, solo sale a la luz la punta del iceberg, apenas un 2% de todos los ataques que se producen. En Espa?a, se estima que son 400.000 casos al a?o, de los que 100.000, un 25%, se producir¨ªan contra menores de edad.

Son algunas de las conclusiones del trabajo An¨¢lisis emp¨ªrico integrado y estimaci¨®n cuantitativa de los comportamientos sexuales violentos (no consentidos) en Espa?a, un vasto estudio encargado por el Ministerio del Interior y elaborado con datos de 2018 y 2019 por el Grupo de Estudios Avanzados en Violencia de la Universidad de Barcelona, con el catedr¨¢tico de Psicolog¨ªa Antonio Andr¨¦s Pueyo a la cabeza.

El informe calcula que unas 235.000 personas cometen al a?o actos de violencia sexual en Espa?a y que hay unas 350.000 v¨ªctimas ¡ªla cifra es diferente porque puede haber tanto perpetradores como afectados de varias agresiones a la vez¡ª. Esta prevalencia supone que una de 45 mujeres y uno de cada 60 menores tienen riesgo de sufrir alg¨²n acto de violencia sexual a lo largo de un a?o. La mayor¨ªa de este tipo de violencia la sufren las mujeres, destaca el estudio. En un 15% de los casos se dirigen a hombres, sobre todo menores. Respecto a los castigos, el estudio estima que un individuo que haya cometido un delito sexual tiene una probabilidad del 5% de ser detenido, reconocido culpable y condenado a prisi¨®n u otro castigo.

Los autores del trabajo, presentado este viernes por v¨ªa telem¨¢tica por representantes de la Universidad de Barcelona y del Ministerio del Interior, han revisado durante un a?o y medio datos y conclusiones de m¨¢s de un centenar de fuentes ¨Centre informes oficiales nacionales e internacionales, macroencuestas y estudios acad¨¦micos o de instituciones¨C para intentar dimensionar cu¨¢l es la violencia sexual oculta, lo que se conoce y tambi¨¦n lo que no trasciende, y cu¨¢ntos casos se podr¨ªan dar en un periodo de un a?o tipo ¡°creado artificialmente¡± para este trabajo.

La punta del iceberg, que s¨ª que se ve, se corresponde con los casos m¨¢s graves, ha explicado Antonio Andr¨¦s Pueyo. En ese grupo estar¨ªa ¡°el ataque o agresi¨®n sexual que finaliza con la muerte de la v¨ªctima¡±, seg¨²n el informe, que considera que este tipo de actos, en la mayor¨ªa de las sociedades actuales, ¡°siempre o casi siempre son descubiertos por la polic¨ªa, aunque, a veces, no se resuelvan todos en clave judicial porque no se encuentren pruebas determinantes¡±.

¡°Es esencial un estudio actualizado de la prevalencia y la incidencia de los hechos de violencia sexual en Espa?a que nos permita conocer su extensi¨®n, magnitud y evoluci¨®n, completando as¨ª la informaci¨®n sobre los hechos denunciados¡±, ha subrayado Mar¨ªa Jes¨²s Cantos, responsable del ?rea de Violencia de G¨¦nero, Estudios y Formaci¨®n del Ministerio del Interior.

La ¡°cifra oculta¡± de la violencia sexual, se?ala el estudio, ¡°es inversamente proporcional a la gravedad de la violencia sexual ejercida¡± y se da m¨¢s ¡°cuando estos hechos suceden en entornos de marginalidad y exclusi¨®n social¡±. Los delitos sexuales que m¨¢s se denuncian son las agresiones sexuales ejercidas con fuerza y violencia sobre la v¨ªctima, pero sin penetraci¨®n, los abusos sexuales, el acoso sexual, exhibicionismo y provocaci¨®n sexual, y delitos relacionados con la prostituci¨®n y la explotaci¨®n sexual. Despu¨¦s, las agresiones sexuales con penetraci¨®n, la pornograf¨ªa infantil y la corrupci¨®n de menores o incapacitados.

La tendencia es que las denuncias vayan en aumento, sobre todo porque ¡°se dan a conocer m¨¢s ciberdelitos¡± y m¨¢s casos en los que est¨¢n implicados adolescentes, ha se?alado Juan Jos¨¦ L¨®pez, jefe del ?rea de An¨¢lisis de Violencia de G¨¦nero del Ministerio del Interior. L¨®pez explica que se cuentan m¨¢s delitos de adolescentes, entre otros motivos, porque en 2015 se cambi¨® la ley se elev¨® la edad de consentimiento sexual de los 13 a los 16 a?os.

Los abusos sexuales, se?ala el informe, suelen afectar al 15% de los menores, ¡°con una sobrerrepresentaci¨®n mayor de las ni?as que de los ni?os de edades entre 6 y 15 a?os¡±. El abuso grave con contacto f¨ªsico y repetitivo se situar¨ªa en torno al 4%, a?ade el trabajo.

En Espa?a, seg¨²n recoge el estudio, hay una tasa de denuncias por delitos sexuales del 20,83 por 100.0000 habitantes, lo que la sit¨²a en la parte media baja del contexto europeo. El Reino Unido estar¨ªa en la parte m¨¢s alta (239,49 por 100.000 habitantes) y Grecia en la m¨¢s baja, con 2,98 por 100.000.

¡°Convendr¨ªa tener m¨¢s datos¡±, ha reclamado Antonio Andr¨¦s Pueyo, que ha pedido a Interior sistematizar ¡°una encuesta espec¨ªfica de violencia sexual¡± que se actualice de forma peri¨®dica, como ocurre con los informes sobre violencia de g¨¦nero. En el informe se afirma que conocer con ¡°el m¨¢ximo rigor¡± la magnitud de la violencia sexual es necesario para aplicar pol¨ªticas preventivas.