Vacunar a embarazadas es seguro y evita graves complicaciones si la gestante contrae la covid
La EMA destaca que las vacunas de ARN mensajero no causan graves efectos adversos para las madres ni para los beb¨¦s. Los expertos invitan a las mujeres en estado a recibir la pauta vacunal y la dosis de refuerzo para minimizar el riesgo de hospitalizaci¨®n y muerte
La evidencia cient¨ªfica disponible avala cada vez m¨¢s la vacunaci¨®n a embarazadas contra la covid. Cuando Espa?a empez¨® a recomendar la inyecci¨®n contra el virus a las gestantes, el pasado mayo, la informaci¨®n disponible era m¨¢s limitada, aunque favorable al pinchazo desde el primer momento. Pero el tiempo y la experiencia han remado a favor de la comunidad cient¨ªfica: hay una evidencia ¡°robusta¡± de la seguridad de las vacunas en este grupo de poblaci¨®n, insisten todas las voces consultadas. De hecho, tras revisar varios estudios que incluyeron unos 65.000 embarazos en diferentes etapas, la Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en ingl¨¦s) ha concluido que hay una ¡°creciente evidencia¡± de que las vacunas de ARN mensajero (las de Pfizer y Moderna) no causan complicaciones en el embarazo, ni a las gestantes ni a sus beb¨¦s. Los expertos invitan a las embarazadas a vacunarse con la pauta completa y recibir tambi¨¦n la tercera dosis y recuerdan que el riesgo de hospitalizaci¨®n y muerte si contraen la covid es mucho mayor.
Nuria Ram¨ªrez, de 40 a?os, se vacun¨® con la primera dosis de la vacuna de Pfizer en septiembre, cuando estaba en la semana 14 de embarazo. ¡°No me vacun¨¦ antes, cuando me tocaba por mi grupo de edad, porque justo me coincidi¨® con un tratamiento de fertilidad y me dijeron que esperara a que terminara¡±, explica. Al principio, le recomendaron vacunarse en la semana 20 de embarazo, pero, tras cumplir el primer trimestre, ya le llamaron para darle una cita: ¡°No tuve ninguna duda. Todos mis ginec¨®logos me recomendaron que me vacunase¡±. Y lo celebra: pas¨® la covid en diciembre, pero de forma leve, ¡°con algo de mocos, tos¡± y una febr¨ªcula. Nada m¨¢s. Ella, que tiene un embarazo de riesgo, con preeclampsia (tensi¨®n alta) y diabetes gestacional, super¨® la enfermedad infecciosa sin m¨¢s sobresaltos.
De lo que los ginec¨®logos no ten¨ªan ninguna duda desde hace tiempo es de que las gestantes tienen m¨¢s riesgo de complicaciones si se infectan. La probabilidad de que se contagien es la misma que la de la poblaci¨®n general, pero si enferman de covid, el escenario pinta m¨¢s feo que para una persona que no est¨¢ embarazada. El estudio internacional Intercovid revel¨® que el coronavirus aumenta un 50% el riesgo de complicaciones durante el embarazo para las madres y los beb¨¦s. La investigaci¨®n, publicada en la revista Jama, concluy¨® que las embarazadas con diagn¨®stico de covid ten¨ªan un mayor riesgo de morbilidad y mortalidad materna y neonatal, se?ala Anna Suy, jefa de la secci¨®n de Obstetricia del hospital Vall d¡¯Hebron (Barcelona): ¡°Si tienen covid, es m¨¢s frecuente que acaben ingresadas, que entren en cuidados intensivos (UCI), que tengan un parto prematuro por indicaci¨®n m¨¦dica [para mejorar el estado de salud de la madre] o que sufran la hipertensi¨®n del embarazo¡±, enumera.
Jos¨¦ Villar, profesor de Medicina Perinatal de la Universidad de Oxford y uno de los autores de Intercovid se?ala que, actualmente, ¡°no hay ninguna duda de que en las embarazadas no vacunadas con covid el riesgo para la madre y el feto aumenta considerablemente respecto al resto de embarazadas¡±. Y esto se explica por varios motivos. Empezando porque ¡°hay un componente mec¨¢nico, ya que al final del embarazo, con el aumento del tama?o del ¨²tero se produce un efecto sobre el pulm¨®n y una alteraci¨®n respiratoria¡±, apunta Villar. ?scar Mart¨ªnez, ginec¨®logo en el Hospital Puerta del Hierro de Majadahonda (Madrid) e investigador principal del registro Obscovid, que analiza el impacto del virus en las gestantes, agrega tambi¨¦n que ¡°al virus le gusta mucho el endotelio [las c¨¦lulas que recubren la cara interna de los vasos sangu¨ªneos] y produce muchas alteraciones vasculares, y la placenta est¨¢ tremendamente vascularizada, por lo que hay preeclampsias m¨¢s graves¡±.
La quinta ola cristaliz¨® el pasado verano los riesgos que dibujaban los estudios cient¨ªficos. Fue ¡°la ola de las embarazadas¡±, como la llamaron en algunos hospitales, por el n¨²mero de gestantes en la UCI que tuvieron que atender. ¡°Fue terror¨ªfico. El 50% de las que ingresaban por covid acababan en la UCI¡±, recuerda Suy. En su hospital, de referencia para atender embarazadas con covid, ingresaron 74 mujeres en cuidados intensivos. Entonces, la vacunaci¨®n todav¨ªa empezaba a llegar a las mujeres en edad de gestar y hab¨ªa una fuerte controversia entre los profesionales, que incluso lanzaban recomendaciones contradictorias. Por ejemplo, el Ministerio de Sanidad recomendaba la vacunaci¨®n a todas las embarazadas, pero la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) matizaba la recomendaci¨®n a ¡°cuando los beneficios de la vacunaci¨®n para la mujer embarazada superan los riesgos potenciales¡±. Guillermo Anti?olo, jefe del servicio de Obstetricia y Ginecolog¨ªa del Hospital Virgen del Roc¨ªo de Sevilla, recuerda aquellos d¨ªas como ¡°una tormenta perfecta¡±: ¡°La delta era m¨¢s contagiosa, la tasa de vacunaci¨®n era baja a¨²n y muchas embarazadas no estaban vacunadas, hab¨ªa una reacci¨®n contraria sin fundamento de algunos profesionales y falt¨® una respuesta coherente¡±.
Ahora hay menos discrepancias, apunta Toni Pay¨¤, jefe del Servicio de Obstetricia y Ginecolog¨ªa del Hospital del Mar: ¡°Ya no hay tantas resistencias, ni de profesionales ni de pacientes. Hay muy poca embarazada no vacunada, es casi anecd¨®tico¡±, resuelve el especialista. Coincide Mart¨ªnez: ¡°Se ha reducido la falta de informaci¨®n y hay m¨¢s unanimidad por parte de las autoridades. La informaci¨®n es homog¨¦nea y, aunque quedan nichos menos permeables a los cambios, la mayor¨ªa est¨¢ concienciada¡±.
Si bien todav¨ªa no se han publicado los datos de un estudio aleatorizado con la vacuna de Pfizer en embarazadas, los estudios prospectivos y observacionales avalan las bonanzas de la vacuna. Por ejemplo, una investigaci¨®n publicada en la revista Nature confirm¨®, tras comparar a m¨¢s de 10.800 gestantes vacunadas con otras tantas de las mismas caracter¨ªsticas sociodemogr¨¢ficas no vacunadas, que el medicamento de Pfizer tiene una alta efectividad ¡ªpor encima del 90%¡ª en embarazadas, similar a la que se prev¨¦ en la poblaci¨®n general. Otro estudio en Israel, publicado en la revista Vaccine, constat¨® que la vacunaci¨®n durante el embarazo ¡°no tiene efectos adversos en el curso y los resultados del embarazo¡±. Y en esta l¨ªnea, otro an¨¢lisis estadounidense report¨® que el riesgo de aborto espont¨¢neo no es mayor tras vacunarse.
La EMA tambi¨¦n recoge en su an¨¢lisis de la literatura cient¨ªfica publicada que no se ha encontrado ¡°ning¨²n signo de un mayor riesgo de complicaciones del embarazo, abortos espont¨¢neos, partos prematuros o efectos adversos en los fetos despu¨¦s de la vacunaci¨®n¡± con f¨¢rmacos de ARN mensajero. Y los efectos secundarios son similares a los de la poblaci¨®n general, agrega: cansancio, cefaleas, dolor, enrojecimiento o hinchaz¨®n en el lugar de la inyecci¨®n, dolor muscular y escalofr¨ªos.
Terceras dosis
Ahora, los recelos y ¡°las preguntas recurrentes de las gestantes en la consulta¡±, explica Mart¨ªnez, se centran en la tercera dosis. El Ministerio de Sanidad la recomienda, aunque en la Estrategia de Vacunaci¨®n admite que la informaci¨®n sobre dosis de recuerdo en embarazadas es ¡°muy limitada¡±. Los expertos consultados matizan, sin embargo, que no hay de qu¨¦ preocuparse. ¡°Lo que es seguro para la segunda dosis, es seguro para la tercera. No hay ning¨²n argumento objetivo que ponga en duda la seguridad de la tercera dosis porque es un f¨¢rmaco al que la mujer se ha enfrentado ya¡±, zanja el ginec¨®logo del Puerta del Hierro.
La Federaci¨®n de Asociaciones Cient¨ªficas y M¨¦dicas de Espa?a (Facme), que asesora al Gobierno en la campa?a vacunal, avala la inmunizaci¨®n en embarazadas y tambi¨¦n las terceras dosis: preferiblemente, pinchazos con vacunas de ARN mensajero y la dosis de recuerdo, a los seis meses de la segunda. Cristina Avenda?o, vocal de Facme, recuerda que la vacuna protege contra la infecci¨®n grave y en plena sexta ola, cuanta mayor protecci¨®n, mejor: ¡°Hay que recordar, en este momento de infecci¨®n desatada, que la tercera dosis mejora la protecci¨®n contra la ¨®micron¡±. La experta llama a la calma con las suspicacias respecto a la dosis de recuerdo: ¡°Nada indica que la tercera dosis tenga m¨¢s riesgo que la segunda. Es una dosis que se administra durante el embarazo y nos beneficiamos de la experiencia que ha dado la inyecci¨®n de las primeras y segundas dosis. No se necesitan datos espec¨ªficos de seguridad de la tercera dosis¡±.
La ¨²nica sugerencia que hace Facme es que, si bien no hay contraindicaci¨®n alguna para inyectar la tercera dosis en cualquier trimestre del embarazo, lo ¡°preferible¡± es administrarla a partir de la semana 14 de gestaci¨®n. Por ¡°un principio de prudencia¡±, apuntan los expertos consultados, m¨¢s que porque se haya detectado o sospechado de alg¨²n da?o a causa del pinchazo en el primer trimestre. Avenda?o se?ala que los primeros tres meses de gestaci¨®n son ¡°el momento de mayor vulnerabilidad en el desarrollo del feto¡± y se intenta evitar ¡°cualquier fiebre o factor de estr¨¦s¡± que incida en ese momento. Coincide Pay¨¤: ¡°Lo que nos interesa es que las embarazadas lleguen vacunadas al tercer trimestre, que es donde m¨¢s problemas se han dado si se infectan¡±.
Pero la tercera dosis genera dudas, incluso entre las embarazadas convencidas de la vacunaci¨®n. Sobre todo, si han pasado la covid recientemente. Seg¨²n Sanidad, en estos casos, se administrar¨¢ la dosis de refuerzo ¡°al menos cuatro semanas despu¨¦s de la infecci¨®n¡±, pero algunos expertos lo consideran demasiado pronto. Nuria Ram¨ªrez, por ejemplo, acaba de cumplir el mes tras infectarse de covid, pero como est¨¢ en la semana 34 de embarazo y, previsiblemente, le provocar¨¢n el parto en la 38, prefiere esperarse a dar a luz: ¡°Quiero que todo vaya bien en el parto y no quiero un pinchazo m¨¢s antes. Voy a esperar un poco¡±. Y lo mismo piensa Olivia (nombre ficticio), de 39 a?os: se infect¨® en Navidad y ya le han mandado el aviso para pedir cita para la dosis de refuerzo: ¡°Soy provacunas, pero no me acaba de convencer lo de la tercera dosis tan seguido. Voy a esperarme un poco m¨¢s¡±, resuelve. A prop¨®sito de estos casos, Mart¨ªnez defiende seguir la estrategia vacunal para evitar riesgos: ¡°La reinfecci¨®n era rara tras la covid hasta que apareci¨® la ¨®micron¡±, avisa.
Sobre las terceras dosis en general, los expertos consultados son tajantes. Las vacunas son ¡°extremadamente efectivas¡±, insiste Villar: ¡°La evidencia es clara. Estas vacunas han sido estudiadas en m¨¢s de 250.000 mujeres y no se ha encontrado ning¨²n efecto alterado. Adem¨¢s, no tienen ning¨²n agente viral que pueda producir ninguna cosa. La evidencia l¨®gica indica que no hay ning¨²n elemento de riesgo, tampoco con la tercera dosis¡±. El Gobierno brit¨¢nico ha lanzado una campa?a para incentivar los pinchazos entre las gestantes y ha advertido de que los datos del Sistema de Vigilancia Obst¨¦trica del Reino Unido muestran que el 96,3 % de las mujeres embarazadas ingresadas en el hospital con s¨ªntomas de covid entre mayo y octubre de 2021 no estaban vacunadas, un tercio de las cuales requirieron asistencia respiratoria.
A peque?a escala, Suy se?ala tambi¨¦n que las pacientes que ingresan ahora en estado grave no est¨¢n vacunadas. Anti?olo agrega que en estos momentos ¡°hay muchos contagios, pero no enfermedad grave, y muchos ingresos con covid, pero no de covid¡±. Sin las vacunas, coinciden los expertos, el escenario hubiese sido muy distinto. Y mucho peor.
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