El par¨®n de la tercera dosis facilit¨® el estallido de la s¨¦ptima ola de covid
Los expertos lamentan el estancamiento en el ritmo de los pinchazos de refuerzo, que atribuyen a la baja percepci¨®n de riesgo, la fatiga pand¨¦mica y la falta de campa?as
Cada vez que Carlos Quintero tiene decidido ponerse la tercera dosis de la vacuna frente al coronavirus, coge la infecci¨®n. ¡°Me pas¨® en Navidades cuando todo el mundo cogi¨® la ¨®micron. Ten¨ªa ya reservada la cita y dos d¨ªas antes empec¨¦ con fiebre y la sensaci¨®n de que me hab¨ªa pasado un cami¨®n por encima. Y ahora hace un mes, lo mismo. Est¨¢ claro que el destino no quiere¡±, bromea este comercial de 44 a?os a la salida de una farmacia del barrio de Navas, en Barcelona. Marta Puig, de 33, tampoco la tiene, pero en su caso porque no ha querido: ¡°Ya me puse las dos primeras y no creo que me pasara nada grave si cogiera el virus ahora. La ¨²nica persona de riesgo en mi entorno es mi abuela, que s¨ª la ha recibido. Yo vigilo un poco antes de ir a verla¡±.
Carol Vel¨¢zquez, gestora hipotecaria de 48 a?os, tampoco se la hubiera puesto, pero en marzo ten¨ªa un viaje a las islas Maldivas y ¡°no quer¨ªa tener problemas en los aeropuertos¡±. Sonia Trigueros tambi¨¦n ha completado la pauta. ¡°Estoy bastante expuesta por mi trabajo y quer¨ªa protegerme. Si todos nos vacunamos, adem¨¢s, se lo ponemos m¨¢s dif¨ªcil al virus para circular¡±, defiende esta profesora de investigaci¨®n en la Universidad de Barcelona en la cuarentena. Siscu Luquero, de 51 a?os y voluntario en un santuario de animales, tambi¨¦n se la puso en diciembre, pero esto no le ha evitado pasar esta semana tres d¨ªas en la cama a 38,5 de fiebre. ¡°Esta nueva variante me ha dado fuerte¡±, lamenta.
Tras un 2021 de ¨¦xito en la campa?a de vacunaci¨®n, en el que 9 de cada 10 espa?oles mayores de 12 a?os y el 99% de los de m¨¢s de 60 recibieron las dos primeras dosis, los datos en este 2022 est¨¢n siendo m¨¢s dispares. Los niveles de protecci¨®n alcanzados siguen siendo elevados ¡ªm¨¢s del 81% de los mayores de 40 ha completado la nueva pauta, fijada ahora en tres pinchazos¡ª, pero uno de cada tres espa?oles mayores de 20 a?os no ha recibido todav¨ªa la dosis de refuerzo (para los menores de 18 esta no est¨¢ indicada).
Las diferencias entre grupos de edad son muy acentuadas. Algo m¨¢s del 92% de los mayores de 60 han completado la pauta de tres pinchazos. Es un porcentaje importante, pero siete puntos menor que la cobertura alcanzada con los dos primeros. Entre los que est¨¢n en la cincuentena, son el 79% (16 puntos menos en comparaci¨®n con las dos primeras dosis); el 63% en el grupo de 40 a 49 a?os (25 puntos menos); el 47% en el de 30 a 39 a?os (32 puntos menos); y el 41% en el de 20 a 29 (40 puntos menos). Los informes semanales del Ministerio de Sanidad, adem¨¢s, muestran que son muy pocos los que se est¨¢n vacunando en los ¨²ltimos meses. Las cifras apenan avanzan alguna d¨¦cima a la semana.
¡°Dos dosis son mejor que ninguna, obviamente, pero la evidencia cient¨ªfica nos dice que la respuesta inmunitaria adecuada se consigue con tres. Quiz¨¢ eso es lo que no hemos sabido transmitir a la poblaci¨®n y ha quedado la idea que con dos ya val¨ªa y la tercera era un a?adido¡±, expone Am¨®s Garc¨ªa, presidente de la Asociaci¨®n Espa?ola de Vacunolog¨ªa (AEV).
En opini¨®n de Jos¨¦ Miguel Cisneros, jefe de servicio de enfermedades infecciosas del Hospital Virgen del Roc¨ªo (Sevilla), la p¨¦rdida de miedo a la covid explica el desinter¨¦s por completar la pauta. ¡°Ese fue el elemento que favoreci¨® la elevada inmunizaci¨®n lograda en la primera parte de la campa?a. Pero la mejora de la situaci¨®n epidemiol¨®gica, lograda precisamente gracias a las vacunas, ha llevado a cierta relajaci¨®n. Veo a mucha gente que no se pone la tercera dosis y tampoco tiene una raz¨®n concreta. Simplemente lo han dejado pasar y tampoco se ha insistido con campa?as para que el ritmo de vacunaci¨®n no aflojara. Si tienes una poblaci¨®n poco motivada y no hay est¨ªmulos, el resultado es que la campa?a no avanza¡±, afirma.
Ambos expertos destacan que en este caso no puede hablarse de un rechazo a la vacunaci¨®n ¡ªson personas que s¨ª recibieron las dos primeras dosis¡ª y que la fatiga pand¨¦mica tras dos a?os de covid ha hecho mella entre los ciudadanos. Tambi¨¦n comparten la preocupaci¨®n por el escenario actual: ¡°Esta ola hubiera sido m¨¢s peque?a con m¨¢s gente con la dosis de refuerzo. La vacuna no evita todos los contagios ni todos los casos graves, pero s¨ª los reduce en cantidad y virulencia. Es la lecci¨®n que tenemos que aprender para el oto?o, cuando empiece a administrarse la cuarta dosis entre los mayores de 60 a?os¡±, apuntan.
¡°Una parte de esta diferencia puede explicarse por la gente que ha pasado la infecci¨®n con las variantes tan contagiosas de los ¨²ltimos meses, pero echo de menos m¨¢s campa?as para incentivar la dosis de refuerzo. Sin restricciones, es la herramienta que tenemos para frenar la circulaci¨®n del virus y lograr una protecci¨®n robusta que reduzca los contagios y, sobre todo, los casos graves y fallecimientos¡±, explica Quique Bassat, epidemi¨®logo e investigador del instituto ISGlobal (Barcelona).
Celia D¨ªaz, soci¨®loga investigadora de la Universidad Complutense de Madrid, considera que ¡°se ha producido entre los ciudadanos un cambio en la toma de decisiones acerca de la vacunaci¨®n¡±. ¡°Durante la campa?a ten¨ªa un mayor peso lo colectivo y emotivo. Nos vacunamos con mucho miedo y para proteger a las personas vulnerables. Ahora hay un mayor c¨¢lculo, se miden m¨¢s los beneficios y riesgos individuales, y aqu¨ª entra en escena el temor a los efectos secundarios. En este c¨¢lculo, y si tenemos en cuenta tambi¨¦n el cansancio, la dosis de refuerzo no ha sido considerada algo prioritario por muchas personas¡±, explica.
Ni el Ministerio de Sanidad ni las comunidades aut¨®nomas han llevado a cabo durante estos meses acciones relevantes para promover la tercera dosis, aunque en los ¨²ltimos d¨ªas los responsables auton¨®micos s¨ª han hecho llamamientos a vacunarse y se han tomado algunas medidas ante el creciente impacto de la s¨¦ptima ola en los hospitales. Canarias, por ejemplo, ha iniciado esta semana una campa?a de comunicaci¨®n y Galicia ha habilitado un sistema de autocita. En general, la medida m¨¢s relevante ha sido facilitar el procedimiento de vacunaci¨®n, con nuevos dispositivos libres de la necesidad de pedir hora, como ha hecho Murcia.
La Comunidad de Madrid informa de que en los ¨²ltimos d¨ªas ha notado un ¡°moderado aumento de un 3%¡± en las visitas a los puntos de vacunaci¨®n, hecho que atribuye a que estos pacientes no hab¨ªan podido acudir antes por haber pasado la infecci¨®n en la sexta ola a principios de a?o¡°, con la explosi¨®n de ¨®micron en las Navidades y, en menor medida, por la necesidad de tener la dosis de recuerdo por viajes a terceros pa¨ªses¡±.
Este mi¨¦rcoles, a las nueve de la ma?ana, los m¨¢s madrugadores hac¨ªan cola en la entrada del Colegio Oficial de M¨¦dicos de Madrid, donde esperaban una veintena de personas. Henar Soria, de 28 a?os, pas¨® la infecci¨®n sin s¨ªntomas en enero y ahora se va de vacaciones a Asturias. ¡°Me la pongo para viajar m¨¢s segura¡±, afirma. El m¨¦dico Jos¨¦ Antonio Valero explica que son unas 300 personas las que visitan este punto de vacunaci¨®n en los d¨ªas laborables. ¡°Llevamos notando un incremento desde hace un mes. En la mayor¨ªa de los casos deciden ponerse la tercera dosis por la s¨¦ptima ola y la necesidad de tener sus esquemas de vacunaci¨®n en regla para viajar¡±.
Es el caso de Freddie Herrera, de 40 a?os, que en un mes viajar¨¢ a Paraguay: ¡°Pas¨¦ el virus a principios de este a?o. Si ahora me pongo la tercera dosis, puedo viajar sin necesidad de hacerme una PCR¡±. Dentro de la sala, la enfermera Celia Pablos cuenta que no es el ¨²nico: ¡°Muchos vienen porque se van de viaje o porque pasaron la enfermedad en enero, y a los cinco o seis meses la inmunidad empieza a bajar¡±. Hay algunos que llegan de otros municipios porque aqu¨ª pueden vacunarse sin cita previa. Carmen Alonso, de 66 a?os, viene de San Lorenzo de El Escorial: ¡°Me dijeron que me la ten¨ªa que poner a los cinco meses y yo soy muy obediente. Adem¨¢s, me voy de vacaciones el lunes a Galicia y quer¨ªa hacerlo antes¡±, cuenta.
Con informaci¨®n de Eva S¨¢iz, Virginia Vadillo, Guillermo Vega y Sonia Vizoso.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.