El procurador general de Bolivia anuncia una gran investigaci¨®n de la pederastia en la iglesia: ¡°Es un deber con la historia y con las v¨ªctimas¡±
Wilfredo Ch¨¢vez asegura que impulsar¨¢ indagaciones sobre los abusos sexuales cometidos por cl¨¦rigos y sus encubridores en el pa¨ªs, tras el esc¨¢ndalo del cura que agredi¨® a decenas de menores y lo cont¨® en su diario
EL PA?S puso en marcha en 2018 una investigaci¨®n de la pederastia en la Iglesia espa?ola y tiene una base de datos actualizada con todos los casos conocidos. Si conoce alg¨²n caso que no haya visto la luz, nos puede escribir a: abusos@elpais.es. Si es un caso en Am¨¦rica Latina, la direcci¨®n es: abusosamerica@elpais.es.
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El procurador general de Bolivia, Wilfredo Ch¨¢vez, nacido en La Paz hace 53 a?os, estaba el pasado d¨ªa 30 de abril junto a su esposa disfrutando de lo que iban a ser unas tranquilas vacaciones por el puente de mayo cuando una noticia en la prensa cambi¨® sus planes repentinamente. Ambos regresaban en coche de hacer la compra y Ch¨¢vez, sentado en la parte trasera del auto, revisaba las notificaciones de su tel¨¦fono m¨®vil. Fue entonces cuando se top¨® con un titular que, dice, le enmudeci¨®: Diario de un cura pederasta. Unos minutos despu¨¦s, le mostr¨® la pantalla con el reportaje en cuesti¨®n a su mujer.
¡ª?Y qu¨¦ vas a hacer? ¡ªcuenta que le dijo.
¡ªReaccionar ¡ªrespondi¨® Ch¨¢vez¡ª, reaccionar de inmediato.
El procurador general de Bolivia, perteneciente al MAS ¡ªMovimiento al Socialismo, partido pol¨ªtico liderado por el expresidente Evo Morales¡ª, reley¨® una vez m¨¢s el art¨ªculo: la historia del jesuita espa?ol Alfonso Pedrajas, alias Pica, fallecido en 2009, que admiti¨® en un diario secreto c¨®mo abus¨® de decenas de menores en varios colegios de la orden en Bolivia y de c¨®mo la orden lo protegi¨® durante d¨¦cadas. Decidido, escribi¨® un tuit en el que anunciaba que abrir¨ªa una investigaci¨®n ¡°sobre este grav¨ªsimo hecho¡±. Los acontecimientos se sucedieron durante los d¨ªas siguientes: Ch¨¢vez registr¨® una denuncia formal ante la Fiscal¨ªa boliviana y solicit¨® al ministerio fiscal espa?ol los antecedentes del agresor. Por otro lado, los jesuitas apartaron a ocho ex altos cargos de la orden acusados de encubrimiento, los obispos del pa¨ªs andino pidieron perd¨®n y el provincial de la Compa?¨ªa de Jes¨²s declar¨® en los tribunales en condici¨®n de testigo.
Ch¨¢vez ofrece ahora una entrevista a EL PA?S a trav¨¦s de una videollamada para contar c¨®mo este caso ha sacudido los cimientos de la Iglesia boliviana. Son las ocho de la ma?ana de este lunes en La Paz.
Pregunta. ?En qu¨¦ punto se encuentra la investigaci¨®n?
Respuesta. Est¨¢ avanzando. Se ha conformado una comisi¨®n de fiscales, dos personas han declarado de parte de la Compa?¨ªa de Jes¨²s y estamos a las puertas de las declaraciones de los ocho sacerdotes [antiguos superiores de la orden] suspendidos. Tambi¨¦n ha habido un registro del lugar [el colegio Juan XXIII, donde Pica confiesa haber abusado de m¨¢s menores], se ha constituido una comisi¨®n a objeto de verificar [los abusos] y estamos a la espera de otras diligencias, sumadas a lo m¨¢s importante: la participaci¨®n de las v¨ªctimas.
P. ?Han prescrito los delitos?
R. No han prescrito en Bolivia. La Corte Interamericana ha determinado que, en estos casos, la violaci¨®n se asimila a delitos de lesa humanidad.
P. ?El diario es una prueba firme de los abusos y su encubrimiento? Es un archivo de texto mecanografiado...
R. Es un indicio que nos tiene que llevar a cotejar. Por eso se lo hemos solicitado a la Fiscal¨ªa General de Espa?a y, si se puede, tomar contacto con el familiar [el sobrino que dio a conocer el diario]. La mera declaraci¨®n de un familiar directo nos favorece much¨ªsimo en la investigaci¨®n. Ahora, no es la ¨²nica prueba. Obviamente est¨¢n los testimonios de las v¨ªctimas, tanto del hecho como del encubrimiento, que es lo que podemos sancionar en este momento. Este hombre [Pica] ha fallecido y el delito es intuitu personae [la responsabilidad penal no puede ser transferida a terceros]. Pero el encubrimiento sistem¨¢tico no. Y eso lo vamos a lograr [enjuiciar]. Sobre todo, con los testimonios y el diario.
P. ?A qu¨¦ penas se pueden enfrentar los encubridores?
R. Podr¨ªan tener la misma responsabilidad penal que el autor, seg¨²n las condiciones en las que han participado en el hecho. Aqu¨ª ha habido un encubrimiento sistem¨¢tico y habr¨ªa que ver qui¨¦nes y qu¨¦ participaci¨®n ha tenido cada uno de ellos. L¨®gicamente, la pena podr¨ªa ser de privaci¨®n de libertad o resarcimiento del da?o. Debe haber un resarcimiento ejemplar en todos los sentidos que establece la jurisprudencia.
P. Hay v¨ªctimas que acusan a otros jesuitas de abusos. ?Esta investigaci¨®n abordar¨¢ estos casos si se denuncian?
R. Por supuesto que s¨ª. Yo lo dije desde un principio: esto no es un caso aislado.
P. Estudia, entonces, la posibilidad de abrir una investigaci¨®n general sobre los casos de pederastia dentro de toda la Iglesia de Bolivia, como ya han hecho otros pa¨ªses como B¨¦lgica.
R. As¨ª es. Es un deber con la historia y con las v¨ªctimas. He estado revisando qu¨¦ ha pasado en otros pa¨ªses, c¨®mo ha habido una especie de comisi¨®n de la verdad que ha abierto todo lo que deb¨ªa abrirse en la Iglesia. Se tiene que averiguar, por un concepto b¨¢sico de memoria, verdad y justicia, la participaci¨®n de la Iglesia en estos casos, que son muchos. Las denuncias nos han sorprendido mucho. Tambi¨¦n a nivel internacional. He visto informaciones [noticias recientes de abusos en otros pa¨ªses de Latinoam¨¦rica] que las estamos solicitando para hablar tambi¨¦n con nuestros pares de M¨¦xico, Chile, Argentina, en fin, en el continente. Para ver qu¨¦ actitud general vamos a tomar, tal vez alg¨²n pronunciamiento a nivel internacional.
P. El caso del padre Pica ha provocado un terremoto medi¨¢tico en Bolivia.
R. Las noticias est¨¢n subiendo, sobre todo por redes. La indignaci¨®n est¨¢ en las redes. Se han pintado paredes [grafitis pidiendo justicia] en los lugares donde hab¨ªan sucedido los hechos y en colegios que regenta la Compa?¨ªa a nivel nacional. Y se hace abiertamente. Grupos de mujeres, madres y exalumnos est¨¢n pronunci¨¢ndose y el problema crece. Lo que lamentamos es que hay alguna prensa que es parte de este grupo de poder [de la Iglesia] que est¨¢ haciendo un trabajo en contra de ello.
P. ?Se refiere a que hay sectores y medios que ven la investigaci¨®n como un ataque a la Iglesia?
R. Es as¨ª. La respuesta es directa. Ayer en las homil¨ªas [la entrevista se realiz¨® este lunes] no hemos escuchado la palabra perd¨®n de manera sincera hacia las v¨ªctimas. Los obispos hacen una reacci¨®n de victimizarse ante un hecho tan abominable, tan horroroso. Una reacci¨®n que est¨¢ fuera de todo lugar y confirma el encubrimiento que hace la Iglesia a sus pares. Hay medios que est¨¢n usando a esos periodistas para hacer una especie de victimizaci¨®n pol¨ªtica. A ver qu¨¦ de pol¨ªtico puede haber en esto cuando el procurador ha anunciado que va a abrir una investigaci¨®n. Que era lo l¨®gico. Nosotros no pod¨ªamos aplaudir semejante situaci¨®n interna en el pa¨ªs.
P. Tanto los acusados de abusos como la mayor¨ªa de posibles encubridores son espa?oles enviados a Bolivia por la Compa?¨ªa de Jes¨²s de Espa?a. ?Qu¨¦ responsabilidad tiene la Iglesia espa?ola?
R. La investigaci¨®n tiene que dar cuenta de esto. Obviamente, estigmatizar a una entidad es muy complejo y yo pienso que primero debemos obtener la informaci¨®n oficial. Habr¨¢ que pedir la respuesta a la Iglesia espa?ola y a la Compa?¨ªa de Jes¨²s, que ha enviado, en el caso particular de Pedrajas, que este ten¨ªa antecedentes y ¨¦l habr¨ªa dicho all¨ª [que comet¨ªa delitos] y lo mandan a Bolivia.
P. ?Tambi¨¦n pedir¨¢n informaci¨®n al Vaticano? Uno de los encubridores lleg¨® a la c¨²pula de la Compa?¨ªa en Roma.
R. Por los conductos consulares tenemos que hacerlo. Recu¨¦rdese tambi¨¦n que el papa Francisco es jesuita. Tenemos que andar con una l¨ªnea homog¨¦nea de trabajo y pedir informaci¨®n donde la podamos encontrar. Y el Vaticano es una fuente porque, efectivamente, el padre Marcos Recolons [uno de los superiores encubridores] trabaj¨® en esa ¨¦poca, y entendemos tambi¨¦n que conoci¨® y fue parte de una estructura importante, primero regional y luego mundial.
P. ?Qu¨¦ dir¨ªa a las v¨ªctimas?
R. Les dir¨ªa a mis hermanos y hermanas del pa¨ªs que han sido v¨ªctimas o que sepan de este hecho delictivo que se aproximen a la investigaci¨®n penal. Que hay la reserva, por supuesto, de una oficina especial que les va a proteger su integridad y su dignidad. El Estado va a coger todas las declaraciones e informaci¨®n que tengan las v¨ªctimas, en nuestro mensaje de solidaridad y compromiso de llegar a una investigaci¨®n que concluya con la sanci¨®n penal. Si ya no se puede a Pedrajas, s¨ª a los que han encubierto los hechos grav¨ªsimos que han sucedido. No vamos a parar hasta tener la sentencia ejecutoria y los responsables penales purgando sus penas y reparando integralmente lo que ha ocurrido. Tiene que haber una sanci¨®n penal ejemplar y que rompa de una vez la estructura de encubrimiento sistem¨¢tico que existi¨® en el pa¨ªs por parte de la Iglesia cat¨®lica.
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