La Conferencia Episcopal Boliviana anuncia una investigaci¨®n general de los casos de pederastia del pasado

EL PA?S puso en marcha en 2018 una investigaci¨®n de la pederastia en la Iglesia espa?ola y tiene una base de datos actualizada con todos los casos conocidos. Si conoce alg¨²n caso que no haya visto la luz, nos puede escribir a: abusos@elpais.es. Si es un caso en Am¨¦rica Latina, la direcci¨®n es: abusosamerica@elpais.es.

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Cercada por el esc¨¢ndalo de la pederastia, la Conferencia Episcopal Boliviana ha dado un paso hacia delante y ha anunciado que pondr¨¢ en marcha una investigaci¨®n general de los casos de abusos del pasado. En un comunicado publicado este mi¨¦rcoles, los obispos bolivianos han reconocido que su trabajo hasta ahora ante este problema ha sido insuficiente y, por ello, han decidido ¡°crear una comisi¨®n nacional de escucha y una comisi¨®n nacional de investigaci¨®n que determinen responsabilidades y visibilicen lo que ha sucedido¡±. La Conferencia no ha precisado qui¨¦n conformar¨¢ estas comisiones, si realizar¨¢n una investigaci¨®n con expertos independientes, si indemnizar¨¢n econ¨®micamente a las v¨ªctimas ni si abrir¨¢n sus archivos para recabar datos. S¨ª ha puntualizado que habilitar¨¢ varios ¡°lugares¡± para recibir denuncias y que comunicar¨¢ ¡°con transparencia a la opini¨®n p¨²blica los avances¡± de sus trabajos. Los prelados tambi¨¦n se han comprometido ¡°a hacer todo lo posible para acompa?ar y procurar una reparaci¨®n¡± a las v¨ªctimas, ¡°con apoyo de profesionales que brinden asistencia y ayuden a sanar heridas y cicatrices¡±.

La decisi¨®n de los obispos bolivianos llega en un momento en el que las denuncias de abusos sexuales a menores no han dejado de crecer en el pa¨ªs. La mecha la prendi¨® el caso Pedrajas, la historia del jesuita espa?ol Alfonso Pedrajas, fallecido en 2009, que admiti¨® en un diario secreto haber abusado de decenas de menores en centros de la orden en Bolivia durante d¨¦cadas y c¨®mo sus superiores le protegieron y encubrieron sus delitos. Ante la noticia, los jesuitas apartaron a ocho ex altos cargos como posibles responsables y la Conferencia Episcopal Boliviana pidi¨® p¨²blicamente perd¨®n. Junto al terremoto medi¨¢tico y pol¨ªtico ¡ªLa Fiscal¨ªa ha abierto una investigaci¨®n y el presidente Luis Arce ha presentado un anteproyecto de ley para frenar la impunidad de estos delitos¡ª, nuevas denuncias han salido a luz y algunas de ellas han alcanzado a las altas esferas de la Iglesia boliviana. Es el caso del jesuita espa?ol Alejandro Mestre, fallecido en 1988 y que fue arzobispo de La Paz, denunciado por una v¨ªctima de abusos sexuales en 1961, cuando Mestre era profesor en el colegio pace?o de San Calixto. Adem¨¢s de ocupar el cargo de obispo, fue secretario general de la Conferencia Episcopal Boliviana a comienzos de los ochenta, uno de los puestos m¨¢s influyentes de la Iglesia en el pa¨ªs latinoamericano. Sobre este caso, los obispos bolivianos siguen sin pronunciarse.

La Conferencia justifica que llevan algunos a?os trabajando en la prevenci¨®n ¡°para crear ambientes seguros¡± y en ¡°acciones orientadas a sancionar los delitos que hayan sucedido¡±. No obstante, este discurso no convence a las v¨ªctimas y a varios colectivos feministas, que han salido a la calle en las ¨²ltimas semanas para protestar por la gesti¨®n de la Iglesia ante las acusaciones por pederastia. Algunas de las protestas han tenido lugar a las puertas de la sede de la Conferencia Episcopal, donde los manifestantes han pintado en la fachada del edificio frases como: ¡°Curas violadores fuera de Bolivia¡± o ¡°Ped¨®filos¡±. Tambi¨¦n han prendido hogueras, en las que han quemado fotograf¨ªas de sacerdotes pederastas mientras ped¨ªan la expulsi¨®n del clero de los centros educativos.

Ante esta situaci¨®n, los obispos afirman estar enfrentando un momento doloroso: ¡°No porque estemos sufriendo ataques y amenazas, sino porque tenemos la certeza de haber sido parte, directa o indirectamente, de un dolor profundo causado a personas inocentes que han sido v¨ªctimas de abuso sexual y de un manejo insuficiente de la situaci¨®n¡±. Ahora, su principal misi¨®n, dejan ver en su escrito, son las v¨ªctimas y la comunidad eclesial, ¡°que en lugar de darles la protecci¨®n y el cuidado que merec¨ªan se encontraron con una Iglesia sorda a sus sufrimientos¡±.

En un segundo plano, los obispos tambi¨¦n se han mostrado dispuestos a trabajar con el Ministerio P¨²blico, la Polic¨ªa y los ¨®rganos judiciales para ayudar ¡°con las investigaciones que se lleven adelante para el esclarecimiento de los hechos y la administraci¨®n transparente de justicia¡±. No han precisado si entregar¨¢n a las autoridades civiles todas las denuncias que han llegado a sus oficinas o las que llegar¨¢n durante la futura investigaci¨®n.

Una decisi¨®n tomada tras la visita del Vaticano

El comunicado de la Conferencia Episcopal Boliviana aterriza d¨ªas despu¨¦s de que lo hiciera el sacerdote Jordi Bertomeu, uno de los grandes expertos en materia de abusos y enviado del Papa Francisco al pa¨ªs latinoamericano para tratar este problema con los obispos bolivianos. As¨ª lo ha citado tambi¨¦n la Conferencia Episcopal en el documento, refiri¨¦ndose a la creaci¨®n de esta comisi¨®n de investigaci¨®n como ¡°fruto¡± de las jornadas que Bertomeu ha pasado con ellos.

Bertomeu, oficial de la secci¨®n disciplinaria de la Congregaci¨®n para la Doctrina de la Fe, es conocido por haber participado en numerosas misiones en Latinoam¨¦rica, como en los casos de pederastia del padre Maciel en los Legionarios de Cristo o en el esc¨¢ndalo de abusos en la Iglesia chilena, que termin¨® con el cese de pr¨¢cticamente toda la c¨²pula eclesial de ese pa¨ªs. Su llegada a Bolivia no fue vista con buenos ojos por muchas v¨ªctimas, que se muestran preocupadas por ¡°que una instituci¨®n [la Iglesia cat¨®lica] que es investigada por posible comisi¨®n de delitos en grado de encubrimiento y complicidad se re¨²na con las v¨ªctimas¡±, seg¨²n public¨® la asociaci¨®n de antiguos alumnos del Juan XXIII, colegio jesuita donde m¨¢s casos de pederastia han salido a la luz.